Transmigración Rapida: seduciendo al lobo BOSS (Volumen 1)

21. Seduciendo al principe Imperial Yandere

Mo Qianchen salió después de permanecer allí durante mucho tiempo. Después de que salió, Chu Huang pareció inadvertidamente y le preguntó a Tao Qianji: "Señor Tao, ¿qué piensa de mi séptimo hijo?"

Tao Qianjii no respondió inmediatamente las palabras de Chu Huang, pero se paró a un lado, cerró los ojos y levantó las manos para resolverlo. Con el paso del tiempo, la mirada en el rostro de Qianji se volvió más y más dolorosa, sus ojos fruncieron el ceño y cuando Chu Huang estaba pensando en decir algo este le hizo una seña de que no lo detuviera, hasta que, repentinamente, Qianji de repente tosió y escupió sangre.

Pero esto no fue suficiente para asustar a Chu Huang, e insistió de nuevo: 

"Maestro Tao? Maestro Tao, ¿estás bien?" "Si, gracias por la preocupación del emperador, la mala forma de esta pobreza no es un problema". Tao Qianji extendió la mano y se limpió la sangre en los labios. Luego sacó una pequeña botella de porcelana de la bolsa, se echó unas pastillas en la boca y la pálida y decadente mirada de repente se volvió de un rojizo saludable.

Por supuesto, el cambio en la mirada de Qianji no perdió los ojos de Chu Huang. La mirada de Chu Huang estaba fija en la pequeña botella de porcelana en la mano de Qianji, y había una luz oscura en sus ojos.

Sin embargo, Qianji respondió en este momento: "Volviendo al emperador, el séptimo príncipe es joven y tienen dos personalidades, que no han sido escuchadas por lo que la mayoría de su vida a sido pobre. Sin embargo, si uno quiere continuar explorando más profundamente, se dificulta un poco, sin embargo, algo es seguro, el séptimo príncipe tiene el destino del fénix, su vida no se puede prever, pero como un fénix del nirvana, renacerá de sus cenizas. "

Después de escuchar las frases de Tao Qianji, los ojos del emperador sus ojos ligeramente se estrecharon con una mano en la caja del escritorio, tocando con la punta de los dedos y el sonido de tocar la mesa es inaudible.

Solo miró el tratamiento de Mo Qianchen hacia Qianji, y su expresión era ligeramente diferente a la de los otros príncipes que vinieron antes, por lo que preguntó casualmente, pero no esperaba recibir un elogio tan grande de Qianji.

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Más tarde Mo Qianchen y los otros príncipes se reunieron una vez en el palacio. Al parecer Tao Qianji parecía ser apreciado por el Emperador Chu. Además de su temperamento, por supuesto, hay otras cosas que pueden demostrar su verdadera habilidad.

Originalmente, el emperador Chu quería llamar a algunos ministros, además de algunos príncipes, para darle una viva bienvenida apropiada a Tao Qianji, pero fue rechazado por Qianji. Poco después de una cena simple pero lujosa, Qianji expresó regresar por adelantado a Chu Huang por motivos de "cultivo" y "alquimia".

Chu Huang que fue atrapado por las dos manos de Qianji expuestas en el banquete. Dejó a la gente en el palacio en ese momento y ya había ordenado a los sirvientes que arreglaran una sala especial para Qianji, para que colocara la alquimia.

El simple banquete terminó con la partida de Qianji.

Tan pronto como Mo Qianchen salió del palacio, pensando en Xia Yichu que lo estaba esperando en la mansión, su corazón se calentó e inmediatamente corrió de regreso a la Mansión del Séptimo Príncipe.

A la tenue luz, una elegante mujer estaba sentada en un taburete, mirando en silencio el libro en sus manos.

Parecía que acababa de bañarse, su cabello oscuro estaba desatado, y estaba dispersa detrás de su cabeza, soplaba el viento de la tarde y la cinta que rodeaba su delgada cintura.