Frágil

740 36 21
                                    

Aitana

-Teo, come

-No

-Pero bueno, ¿y está negativa a que se debe?

-No pienso comer hasta que venga papá, me prometió que comeríamos juntos

Y como por arte de magia, apareció mi salvación, su superhéroe. Los pies del pequeño correteaban hasta el gran cuerpo de su padre, que lo abrazaba con fuerza como hacía apenas 24 horas. Podría mentir y decir que verlos a los dos así no me removía nada por dentro pero entonces no sería la verdad y me estaría engañando a mí misma. Meses después de separarnos todavía sigo pensando en porqué fui tan idiota como para perderle, una completa idiota.

Dos besos como saludo, yo pidiendo más, él conteniéndose las ganas de cumplir mis deseos. Puto orgullo.

Teo se empeñó en bajar al parque, en dar una vuelta, y, obviamente, comprar un helado de oreo gigante que parte de el acabaría en su nariz.

El final de Septiembre nos regalaba un día de Sol, aquel que llevábamos pidiendo otros tantos. Aún así, y contando con la pataleta que montaría mi hijo, la chaqueta no sobraba. Estaba empeñado en que la bufanda le abrigaría más, porque claro, si tú te tapas la garganta, no te pones malo. Cosas de niños.

Luis tampoco ayudaba mucho, no dejaba más que reírse y yo, frustrada, les dejé a los dos para que se las apañasen. Llevaba tiempo hablando con Luis, al principio por Teo, ahora por nosotros. Escribir mensajes es fácil, no le ves, no sientes pero cuando esos ojos negros profundos se acercaban a mí todo se paraba y no era capaz de verle como amigo, no a una persona de la cual todavía estoy enamorada.

Oigo desde mi cuarto unos acordes, acordes que reconozco al instante y que en seguida me hacen frágil. Acordes de "Llegas tú". De camino al salón me aseguro de que no se noten las lágrimas que un abrir y cerrar de ojos se han derramado por mis mejillas. Espero en la puerta, deseando ser participe de aquel momento, decidiendo que es mejor no hacerlo.

La guitarra negra dejaba que las últimas notas se evaporasen como por arte de magia, aquella que él creaba sólo con rozas aquellas cuerdas. Teo se había aprendido esa canción como nana y solo teníamos derecho a cantarla los tres después de manifestar que él era la inspiración de aquella canción.

El helado de oreo, como bien predije antes de comprarlo acabó por toda la cara del renacuajo provocando la risa ahogada de Luis. Los patos según él, pedían a gritos que nos quedáramos un rato más y que los deberes podían esperar, a esto último me negué. Durante los dos años que Teo llevaba de escuela tanto su padre como yo le habíamos intentado inculcar lo importante de los estudios para la vida además de lo privilegiado que se debe de sentir al poder ir al cole con sus amigos.

Esto Teo se lo hizo llegar a sus amigos, Nico y María. "Mali" como ellos la habían apodado porque le gustaban mucho las maliquitas decidió hacer lo mismo que sus amigos, por lo que durante una semana los tres hacían dibujos para niños pobres que no tendrían el material suficiente para hacerlos por ellos mismos y así que tuviesen algo con lo que decorar sus casitas de África.

Puede que Teo le encontrase algún cana a Luis al subirse a sus hombros y que el disimulase con su típico "pero que dices chaval, si son mis nuevas mechas" por lo que su hijo no tuvo otra idea que no fuera echarse un poquito de su helado blanco por su pelo para ir igual que papá.

Llegamos a casa más muertos que vivos, Teo realmente muerto y dormido mientras Luis se queja del dolor del espalda. Yo inicio una guerra contra mí misma, el querer y el orgullo siempre hicieron mella y en mi y a día de hoy lo siguen haciendo. Pero decido comerme el orgullo y hacer lo que llevo esperando hacer meses.

-Luis, quédate a dormir

Él me mira entre sorprendido y confuso, yo le regaló una sonrisa

-No es necesario en serio, puedo llegar a casa vivo

-Luis, por fa, sólo hoy, en mi cama, lo necesito

Y sé de sobra que a ese "lo necesito" no se va a negar por lo que le tiendo una de las tantas camisetas suyas que guardo aún con su olor y le dejo cambiarse en el baño. Mi pijama amarillo y azul de Daisy versión verano recubre mi cuerpo dejando parte de mi culo a la vista de cualquiera.

Él está tumbado en la cama, ya ha cerrado los ojos y Morfeo le abraza suavemente. Yo me giro hacia él, frente a él, y dejó que mis párpados caigan y mi mano repose en su pecho.

-Aitana... -avisa con voz ronca- no sé si esto es lo mejor

-¿Y qué es lo mejor Luis? Seguir con mi orgullo por el cielo cuando solo quiero dormir contigo, pues perdona pero para eso para mí no es lo mejor

-¿Y después qué?

-Después volveremos a ser los padres de Teo cómo llevamos haciendo ocho meses

-Que descanses -murmura dándose la vuelta

-Luis yo...

-Buenas noches Aiti

-Buenas noches Pedrito -y cuando creo que ya nadie me oye me acerco le susurro al oído- t'estimo molt, més del que et puguis imaginar

Y ahí, entre sus brazos dejo de ser un frágil cristal, sabiendo que ahí nada me puede romper.

______________________________________

Holaa!!! Sé que dije que tardaría en publicar pero tenía pensado que este capítulo tuviese una quinientas palabras y escribiendo, escribiendo tiene prácticamente las de un capítulo normal que acabo de terminar. Bueno, esto es una pequeña tregua entre los dos que espero que os guste mucho y hayáis disfrutado.

Contarme por aquí... ¿Que tal todo? ¿El verano bien? Espero que súper bien, yo ando un poco deprimida porque ya no queda nada para empezar con la rutina de estudios (aunque no la he dejado porque mis queridas amigas AitedaC aiteda9358 me han puesto a estudiar catalán jajaj)

Menos mal que prometí dejar de ser tan pesada pero bueno, es algo que llevo dentro y no se me va y olé 💃🏼

Bueno, ya me despido que es un poco tarde para publicar y este va de sorpresa. Os cuero mucho mucho, más de lo que os podéis imaginar

OS LEOO!! Besooos 💙💛

Descolocas TODOOnde histórias criam vida. Descubra agora