Descolocas TODO

Si pudiera

El gallego vestía un pantalón negro con un jersey gris que estaba ligeramente tapada por su chaqueta negra, mientras que de su cabeza salían algunos de los rizos que se habían escapado del gorro. Se dirigía a casa de la madre de su hijo para verle un rato, le daba la sensación de que su pequeño crecía demasiado rápido y eso no le gustaba nada. Monta en el coche color naranja adornado por miles de sonajeros, chupetes y biberones que Teo iba perdiendo durante los viajes y arranca para perderse por las calles de Moncloa.

Suena el timbre y Aitana no consigue calmar a Teo, grita a Amaia para ver si puede abrir ella pero al ver que su amiga sigue en el baño se asoma hacia la puerta. Allí ve como una alegre Emma se dirige a abrir la puerta tal y como ha pedido su tita. La catalana que al asomarse ve las intenciones sale corriendo dejando al pequeño de la tropa en la cuna y llega justo a tiempo para detener a su sobrina que ya tocaba el pomo.

-Emma te he dicho miles de veces que tú no puedes abrir la puerta

-Jolin Tita, echo no vale -dice la niña a modo de queja cruzándose de brazos y poniendo morritos mientras frunce el ceño

Aitana manda a la nena de rizos morenos al salón y abre la puerta. Lo que pasa es que no espera que quién estuviera allí fuera él. Claro que sabía que le tocaba hoy a Cepeda ver a Teo pero no pensaba que fuera a llegar tan pronto, de echo con un poco de suerte se retrasará y justo pasaría cuando Amaia se fuese a comprar despidiéndole con la excusa de que tenía que cuidar dos pequeños terremotos y así no tener que intercambiar apenas palabras.

Son milésimas las que pasan desde que la catalana abre la puerta hasta que ambos se miran. Ella se muerde el labio inferior, signo de que está incómoda, él aparta la vista un segundo y mira a sus zapatos, aquellos que tanto han corrido detrás de ella.

-Teo está en mi cuarto y Emma en el salón, yo voy a cambiarme

Y así como si nada, el torbellino de flequillo desaparece por los pasillos de aquella casa directa al baño. Luis camina despacio, como si nunca hubiese pasado por ahí, como si su voz no hubiese retumbado por aquellas paredes, como si no se hubiese declarado tantas veces con Aitana en aquel recibidor, en la alfombra y en su cama. Al llegar se encuentra al pequeño Teo en la cuna, no para de moverse y cuando le ve echa una pequeña sonrisa.

De aspecto Teo no se podría decir que fuese más parecido a uno que otro, tiene los ojos achinados de él y las pestañas largas de ella, sin embargo, los ojos son marrones, como quien diría los típicos ojos "caca". Al echar esas pequeñas carcajadas aparecen los hoyuelos de Cepeda mientras que al arrugar la nariz aparece la cara de ratón de su madre. No es muy alto para lo que un bebé de 8 meses podría ser, y tampoco es una bola, se alimenta bien y tiene la típica barriguita de bebé regordeta que les hace más monos y adorables, si cabe, donde sus papás dejan pedorretas de vez en cuando para verle esa sonrisa.

Cepeda se dirige a cogerlo, está un poco haciéndole reír y jugando con él y luego va hacia la hija de Amaia, la cual se tira a sus brazos en cuanto le ve y éste la lanza hacia arriba.

-Hombre renacuajo, ¡Que mayor estás!

-Pero tito, chi me vistes ayer

-Pero es que creces súúúúper rápido

Su tito le revuelve el pelo y Emma lo único que puede hacer es poner la cara más enfadada de que adorabilidad la deja y sale corriendo de nuevo hacia el salón. Justo aparecen Amaia y Aitana, la primera más arreglada que la otra, sale a saludarle y él le deja un beso en la cabeza. Una vez ha llenado a Emma de besos y abrazos y se ha despedido de su amiga con un "nos vemos luego, ponte sexy" y un beso en la mejilla, Amaia sale por la puerta de su casa para disfrutar de una noche loca.

-¿Vais a salir de fiesta?

-Si, ¿Por qué, te parece mal?

-No, para nada, de echo, me gusta que salgáis y que disfrutéis, además hace mucho que no vas con Amaia de fiesta sola. Si quieres me quedo con estos pequeñajos y así paso más tiempo con ellos

-¿Estás insinuando algo?

-No joder, lo sacas todo de contexto. Amaia se iba ahora, ¿no? Pues vete con ella y yo me quedo con los torbellinos toda la noche y así no os tenéis que preocupar por llegar más pronto, además, seguro que el tito Roi está encantadísimo de que vengan.

-No no, entonces me niego, no quiero que les pase nada y con Roi corren peligro

El gallego muestra automáticamente una sonrisa al pensar el peligro que tiene su amigo con los niños. Ambos por primera vez en muchos meses se miran y sonríen. La chica de flequillo acaba aceptando la propuesta pero con la condición de que Amaia la apruebe. Está acepta bien rápido al saber que así no tendrán preocupaciones de por medio.

Tardan bien poco en preparar a los pequeños, Luis cambia a Teo mientras que Aitana intenta convencer a Emma de que tiene que abrigarse y ponerse su disfraz de Campanilla sin abrigo no es muy factible. Al final la niña acepta a regañadientes y se pone su abrigo de purpurina con una bufanda de oso a la que apodó "Sito". Aitana, al ver el conjunto que Cepeda le puso a Teo no pudo evitar reírse. Llevaba un pantalón "vaquero" negro y una camiseta básica verde caqui, le había puesto sus deportivas y el chupete que le regalaron hace tiempo dónde ponía "mi papi es que mejor me viste".

Y así salen los 4. Decidieron esperar a Aitana que todavía estaba en pijama y llevarla al restaurante donde había quedado con su grupo. El viaje pasa en silencio, un silencio incómodo, salvo cuando su sobrina lo rompe cuando suena la canción de Los Ronaldos, No puedo vivir sin ti. Todos menos el más pequeño que se durmió nada más montar en el coche cantan esta canción. Luis a Aitana, sin que ella lo sepa, queriéndole decir que no puede estar sin ella y ahora lo está descubriendo, mientras Aitana se la canta a Teo, porque desde que supo que venía en camino le a querido inmensamente y, aunque no lo quiera admitir también se la canta a su padre, porque estar tan cerca pero a la vez tan lejos la rompe. Y Emma, que queda completamente al margen de esta conexión entre sus tíos, la canta porque sí, porque su mamá y sus titos la cantan y eso significa que es especial.

Dejan a Aitana en el coche, ella se despide con muchos besos al aire y doblando y extendiendo la mano en forma de adiós. Luis vuelve a arrancar el coche con propósito de llegar a casa, está claro que no era el plan que esta noche tenía planeado pero también es mejor que el que podría haber tenido. Emma se pasa el camino haciendo preguntas sobre todo tipo de cosas y cantando con su tío. Tiene muchas ganas de ver al tito Roi y con un poco de suerte a la tita Miman. Sabe de sobra que verán muchas pelis Disney y que habrá muchos mimitos para ella, aunque a veces no la gusta que también haya para Teo.

Cepeda le escribe un mensaje a Roi contándole el cambio de planes, él gallego menor acepta encantado al igual que su novia. Un largo rato después están allí todos, viendo La Bella y la Bestia. Luis está con Teo dormido en su pecho acariciando su espalda con una mano, Roi le tiene la mano agarrada a Miriam que está muy atenta a la peli, al igual que Emma a la que la acaricia la cabeza con su otra mano.

Llevan a Emma al cuarto de invitados y duerme con Roi y Miriam, mientras que Teo queda acurrucado en el pecho de su padre mientras le acarician la espalda. Y Luis sólo puede mirar al techo, tal vez por la postura o para quitarse los fantasmas de la cabeza. Aquellos que le hacen hablar, o más bien cantar.

Si pudiera quedarse callado...

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Holaaa!!! Bueno, pues aquí está capítulo de hoy. Siento otra vez no haber publicado antes pero me ha sido imposible. Además estas semanas las tengo llenas de competiciones y festivales de baile así que voy a estar a tope. Bueno, espero que os guste mucho el capítulo, la verdad es que yo he quedado bastante satisfecha. Por cierto, yo quiero saber una cosa, ¿Alguien está leyendo esto?😂🤷
Se me había ocurrido que si estáis leyendo esto comentéis un emoji que os recuerde a Aiteda. Pues nada, que os cuero muchooooooo y que muchísimas gracias por los 571 votos y las 15,5 K visualizaciones, sois increíbles, eternamente agradecida, ya lo sabéis.

OS LEOO!! Besooos💙💛