Psycho (KimNamJoon)

49

Se me habían quitado las ganas de comer así que guardé su comida y la mía en el refrigerador y mientras lo hacía decidí en disculparme.

—¿Yun? -toqué a su puerta

—Largo

—Oye... lo lamento, no fue mi intención molestarte

—Eres un idiota, Namjoon

—Lo sé, me lo has dicho muchas veces, es solo que... me molesta que quieras rendirte tan pronto -escuché como bajaba de la cama y en segundos abrió la puerta con fuerza

—No tiene por qué molestarte lo que quiera hacer con mi vida

—Claro que sí

—¿Por qué? -se cruzó de brazos

—Porque no quiero verte morir

—Como si esto te importara

—Me importa

—Aja -me dio la espalda y regresó a la cama para sentarse en ella -intentaste matarme una vez ¿Recuerdas?

—Sí, lo recuerdo -entré

Se llevó la mano al oído y se quitó el audífono, mismo que guardó en el cajón de su mesa de noche.

—¿Entonces? -preguntó

Me acerqué y me hinqué delante de ella.

—No quiero verte morir porque... te quiero

—¿Me quieres?

—No diré que te amo si es lo que quieres, hemos convivido poco tiempo para decir esas palabras ¿No crees?

—Lo creo

—Dos meses en poco tiempo para decir que te amo -puse mis manos en sus rodillas -pero sé que no tardaré en decirlo -susurré sin despegar mis ojos de los de ella -no quiero que mueras ¿Entiendes?

—Entonces -se inclinó un poco -dime una cosa

—La que quieras

—¿Qué pasó el día que me embriague?

—¿Por qué quieres saberlo? -quité las manos de sus rodillas

—Por eso, siempre que lo menciono te alejas de mi

—No lo hago

—Lo haces ¿Dime lo que paso? ¿Te hice daño?

—¿Qué?

—¿Te lastime?

—No ¿Por qué piensas eso?

—Porque en el hospital, cuando recién me medicaron para tenerme sedada y no tratara de suicidarme, la dosis que me dieron fue muy alta y me terminaron drogando incorrectamente, perdí mis cinco sentidos de mi control -se alejó de mi un poco -agredí a un interno y a dos enfermeras... me terminaron diagnosticando como una persona altamente agresiva -me miró -por el modo en que te alejas de mi cuando menciono esa noche, me hace creer que te hice daño

Sentí que mi corazón se deslizaba al suelo. La Yun ruda y sin emociones de un principio estaba desapareciendo y ahora había una Yun con todo un pasado y con debilidades delante de mí. Era por fin una persona con sentimientos, miedos e inseguridades.

—Yun -volvía poner mis manos en sus piernas -esa noche, no me hiciste ningún daño, no me lastimaste de ningún modo

—¿Entonces por qué no quieres decirme lo que pasó?