Psycho (KimNamJoon)

24

—No, no, no

—Yun

—Lila

Escuché los dos nombres al mismo tiempo.

—Lila

—Yun, despierta

Sentí como me tocaban del hombro asustándome y haciéndome despertar de un salto.

Mi pecho subía y bajaba aceleradamente y sentía el sudor escurrir por mi nuca.

—¿Qué pasa? -preguntó Namjoon

—Yo... solo -me incorporé un poco en la cama -tuve una pesadilla

—Lo note -él estaba delante de mí, ya había apagado la televisión y todo estaba en silencio

—¿Te... desperté? -pregunté aún algo adormilada

—Sí

—Lo lamento

—Mejor, ve a dormir a tu habitación

—Sí -me levanté del sofá camino a mi habitación sin despedirme siquiera de Namjoon o desearle buenas noches

—¿De nuevo esas pesadillas? -preguntó Owen cuando cerré la puerta

—¿De nuevo?

—Sí, no es la primera que tienes

—Claro -sonreí un poco -se me olvida que eres mi sombra, lo viste ¿No? -suspiré -sí, de nuevo esas pesadillas

—¿Las tenías en el hospital?

—...Sí

—¿Cómo las controlabas?

—Medicina -me tumbé en la cama boca arriba

—¿Necesitabas medicina? Los doctores me dijeron que ya no tomabas medicina

—No lo hacía, porque habían pensado que estas malditas pesadillas ya no me pasaban

—¿Desde cuándo no te pasaba?

—Desde hace dos años

—El haberte sacado de ese lugar ha sido mucho para ti ¿No?

—¿Me regresaras?

—¿Quieres regresar?

—...No

—Puedes controlarte, Yun, no necesitas regresar a ese lugar ¿Cuál es la medicina? Te la haré llegar

—¿Cómo lo harás?

—En cuanto vayan de compras, lleva algunas bolsas, compra cosas de mujeres y en ellas encontraras la medicina

—Entiendo

Le di el nombre de la medicina, estoy segura de que con ella las pesadillas cesaran y podre dormir mejor. Solo espero que vayamos por comida lo más pronto posible.

(3 días después)

Esto de estar desayunando, comiendo y cenando puro líquido, helado y caldo de pollo no me estaba dando la energía que necesitaba y hoy estaba tan feliz porque ya podría volver a comer como una persona normal.

—¿Hoy iremos a comprar comida? -no había comida en la alacena ni en el refrigerado y en estas últimas noches había vuelto a tener esas malditas pesadillas, solo que ahora dormía con el audífono puesto para que Owen pudiera despertarme