I Want To Tell You (George Harrison)

57.

CAPÍTULO 58. 

Los siguientes días no fueron mejores, en realidad todo se volvió infinitamente más triste que el día que recibieron aquella fátidica noticia, sabía que Angie se preocupaba por él, tanto que incluso se había quedado a dormir en su casa para hacerle compañía, en realidad lo agradecía no quería estar solo, aunque de compañia tampoco era mejor, sabía que probablemente la castaña se aburría, apenas si hablaba y la mayor parte del tiempo se la pasaba tocando algún instrumento o meditando, pero nunca se quejó Angie y ella se volvía hacer sus propias cosas. 

Mientras tocaba la guitarra se dio cuenta que May lo observaba discretamente, era algo que se había dado cuenta desde hace días, la niña siempre lo observaba medio escondida cuando comenzaba a tocar algún instrumento, el fingía que no se daba cuenta era algo que le había levantado curiosidad, se dio cuenta que por primera vez en esos días sentía curiosidad al mismo tiempo le divertía el comportamiento de May, y se sentía realmente agradecido por eso. 

Un día de esos decidió preguntarle a Angie.

-Sabes, hace algunos días descubrí que May me observa siempre que estoy tocando algún intrumento ¿porque?

Angie sabía exactamente la razón pero no se la podía decir a George ya que aún recordaba las palabras que le había dicho varios meses atrás, pero no era díficil de deducir Mick hace meses que no iba a ver a su hija, y George después de ella y talvez la niñera era la persona que su hija veía más ya que constantemente salían juntos , además a pesar de lo que habí dicho nunca se había mostrado frío o distante con May, y en los últimos días la niña lo veía a diario porque se había quedado en su casa a dormir, sabía que su hija comenzaba a mirarlo como una especie de figura paterna, se limitó a responder:

-Creo que te admira. 

Y tenía miedo no quería que May se encariñara bastante con George porque al final no sabía lo que pasaría, podían terminar y no solo sería la única que quedaría con el corazón roto, pero tampoco podía evitar que lo hiciera al fin y al cabo no podía apartarla.

-¿A mi? ¿Porque me admiraría?- preguntó incredúlo. 

-No lo sé, unos días atrás me pidió una guitarra. 

-¿Y que le dijiste? 

-Que tenía que esperarse a que fuera más grande.  

-¿Y porque se esconde?

-Es demasiado tímida últimamente más, no sé de donde sacó eso supongo que de mi porque Mick es todo lo contrario.

Inconscientemente frunció el ceño y apretó los labios, George se daba cuenta que siempre hacía eso cuando mencionaba a Jagger, sabía que lo desaprobaba en cierto manera las había abandonado a su suerte, estaba casi segura que sino fuera porque estaba obligado a pagar cierta cantidad para la manutención de May no lo haría. A veces se preguntaba ¿porque había durado tanto tiempo con él?

En eso el timbre de la puerta sonó fue abrir la puerta y cuando la abrió de inmediato sintió los brazos de Paul rodeandola para darle un fuerte abrazó, ella reaccionó algo soprendida dandole unas palmadas en la espalda, y luego volteó a ver a George pidiendole ayuda ya que el abrazo era bastante afixiante y Paul olía bastante a alcohol. 

-Vamos, Paul, estas agobiando a An, ven. 

Paul se separó de ella y se lanzó ahora abrazar a George que este debía tener la misma cara que ella puso hace cinco segundos.

-Te preparé un té- murmuró ella caminando hacía la cocina rápidamente ya que no sabía que otra cosas hacer, cuando regresó con la tasa se la dio a Paul y vio que aún parecía muy desconsolado.