Brújula

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P.O.V Camila

¿Qué acabe de hacer? Díganme que es un sueño.
Yo me quedo muda, al igual que el chico de ojos negros que tengo encima mío.

Estoy algo agitada al igual que él, mis manos están posado encima de sus brazos, y oh por Dios tiene unos bíceps tan definidos...¡Concéntrate Camila! No es hora de estar morboseando.

—Cami ¿Estás bien? —si, bien excitada.

—Si...me puedes dar permiso —digo empujándolo un poco. No es momento de tener cerca a Ethan.

—Claro —comenta él y acto seguido se quita de encima mío. Yo me levanto rápidamente, y me dirijo al baño. Al verme el espejo puedo notar que mis labios están muy rojos y estoy algo acalorada. Me lavó la caro y comienzo a procesar lo que acabo de ocurrir.

Me di un beso con Ethan, lo cual no está mal ya que nos lo pedía el libreto. El problema es que eso fue muy subido de tono, y además me siento algo incómoda ya que el chico mujeriego es el novio de mi mejor amiga. Pero es que las acotaciones decían que el beso debe de ser candente, mierda Ethan lo hizo muy profesional, y yo aquí como si fuera una primeriza debatiéndome por eso.

—Chica pervertida ¿Estás bien? —inquiere Ethan detrás de la puerta.

—Si, ya salgo —al abrir la puerta, veo que Ethan ya se ha ido de ahí. Lo busco es su cuarto pero no hay rastro de él, voy a la sala y veo como esta sentado en el sofá con un cojín encima de su entrepierna. Y yo que pensaba que la profesional aquí no era yo. Tomo asiento a su lado y observó como su cuello tiene unos pequeños rasguños, me mató donde haya sido yo.

—Fuiste tú —ya pueden matarme. —   Pensé que me ibas arrancar la cabeza.

—Y yo pensé que tú me ibas arrancar el labio —contestó en contraataque. -

—Ganas no me faltaron —responde el con su típico acento pícaro. Y tras del hecho humedece su labio con su lengua. Maldito gigolo. Yo tan solo lo miro mal y me abstengo de seguir con ese tema.

—Oye hablando enserio, perdóname yo casi no he hecho esas escenas así que no se como manejarlas. Intentaré pedirle consejos a Ben, porque si me pongo nerviosa solo por un beso, imaginate con el resto de las escenas que viene —digo suspirando y pensando en una forma de ensayar para mostrar ese amor salvaje y pasional que describe Ben en la historia. —Además tengo que conseguir una forma de verme sexy y salvaje.

—Tonta, ese beso fue uno de los más apasionantes que he tenido en mi vida —dice el tomándome del mentón, y haciéndome girar la cabeza para que lo mire. —Y créeme Camila Santana eres muy sexy. Y si te tranquiliza saber esto, no eras la única nerviosa yo también lo estaba. —sus palabras me hacen sonreír, este chico tiene su lado tierno. Pero como siempre me encanta romper los momentos cursis.

—Ya entiendo porque te va tan bien con las chicas —digo levantandome y recogiendo mi bolso. —Tienes una oratoria impresionante. Pero conmigo no funciona chico mujeriego. —digo y el empieza a reírse.

—Lo sé, lo sé. Eres indomable —dice Hunter mirándome y sonriendo de oreja a oreja, me encantan los hoyuelos que se le forman, además de que sus labios rojos hacen muy buen contraste con su perfecta dentadura. Y saber que hace poco estaba besando esa boca.

—Ethan, se que tal vez aún sigues enojado por lo de Andrew pero te juro que no es nada malo. En verdad necesito que confíes en mí, y cuando termine todo te lo voy a contar. —digo acurrucándome enfrente de él y colocando mis manos encima de sus rodilla para poder mantener el equilibrio. En verdad me gusta esos momento de paz que comparto con él.

Enséñame a dejar de ser mujeriego [PAUSADA TEMPORALMENTE] Where stories live. Discover now