Las acciones del chico hablaban en voz alta y clara, lo suficientemente claro para que ella entendiera el mensaje, pero simplemente no estaba lista para dejarlo ir de su vida.

Podía sentir la manera en la que poco a poco comenzaba a romperse, y aunque no era la opción más saludable para ella, _______ no quería perder la esperanza antes de intentar salvar lo mejor en su vida, él.

De igual manera y para tratar de detener lo que él pensó que podría ser su peor pesadilla, Niall intentó forzar el amor de su parte para seguir adelante. Realmente lo había intentado, hasta que se dio cuenta que no había nada más en lo absoluto.

"Salirse de su rutina" solo para llamarla preciosa después de que llegara del trabajo, o prepararle el desayuno de vez en cuando, o incluso dar incómodas caricias a su espalda cuando sabía que algo estaba molestándola simplemente se sentía como algo inmaduro y tonto para él. Quiero decir, ¿acariciar su espalda? ¿cuando estaba triste? Si los tiempos fueran distintos, nunca hubiera dudado en hacer algo tan simple e insignificante como eso cuando sea que su chica estuviera triste. Pero la cuestión era que ella ya no era su chica y eso era algo que ambos habían estado fallando en entender.

Las señales que él le enviaba eran claras, pero al mismo tiempo no tan claras. Ella no podía adivinar cada uno de sus movimientos y él lo sabía.

Sin embargo, la pequeña voz en la mente de Niall estaba cuestionándose cada aspecto de su relación, y se mantuvo persistente, por desgracia. Si hubiera ignorado esa pequeña voz, tal vez no estarían en dónde estaban ahora.

Ninguno de sus intentos salía ya de su corazón. Las intenciones que alguna vez fueron amorosas y consideradas, eran muy diferentes a las de ahora.

Niall no había hecho todo eso porque quería, sino porque simplemente sintió que tenía que hacerlo. Había estado amándola por más de 3 años. Ese amor simplemente no podría desaparecer de repente. E incluso si no trató exactamente de aferrarse a ello, de alguna manera hizo lo que pensó que tenía que hacer. Su esfuerzo fue sin esfuerzo. Fue descuidado e insignificante. Pero al menos podía decir que lo intentó.

Ella no estaba segura cuándo fue que se perdieron el uno al otro.

Niall y _______ alguna vez fueron tan cercanos que nadie se atrevería siquiera a pensar que llegarían a esto, incluso ni una ligera idea de ello cruzaría la mente de las personas, sería considerado como un pecado para cualquiera que hubiera experimentado pasar un día a su alrededor. Pero desafortunadamente, para ella, eso era todo, y al parecer estaba siendo más difícil para ella que para él.

Por supuesto que lo era.

Pero, ¿cómo no podría serlo si lo único que rondaba su mente era un remolino de pensamientos y recuerdos de ellos cuando todo estaba bien?

Recordar los buenos momentos en los que había tenido el privilegio de vivir con Niall como su novia nunca se sintió tan duro en su corazón.

Ahora estaban tan distantes y lejanos del otro que, honestamente, no se sorprendería si hubiera malinterpretado esos recuerdos como si fueran de otra persona, o de una vida diferente, incluso.

Pero ella aún podía sentirlo, algunas veces.

Si se enfocaba con fuerza, su toque en su piel incluso ahora persistía desde la última vez en la que ella sabía que los sentimientos en su corazón estaban tan presentes como en el de ella.

La forma en la que las yemas de sus dedos solían deslizarse sobre su cuerpo, acariciándola de una manera que no creería posible.

Cómo sus labios delgados se curvaban para formar palabras que ella nunca había dado por sentado.

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