23.

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ATENCIÓN ⚠️

Este imagina tiene algo de smut, muy muy poquito, pero aún así, yo sé que no a todas las personas les gusta leer este tipo de contenido, así que si se sienten incómodas leyendo este tipo de cosas, les recomendaría que pasen al siguiente imagina.
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Rodaste en la cama y pestañeaste un par de veces con el fin de acostumbrarte a los rayos de sol que atravesaban las cortinas.

Sonreíste cuando recordaste quién estaba a tu lado. Niall. No lo habías visto por casi cuatro meses y anoche había sido la primera vez que se habían visto desde que se había ido a Estados Unidos para continuar con la última parte de su tour.

Jalaste un poco las sábanas con la intención de cubrir más tu cuerpo desnudo y te diste vuelta para mirar las facciones de Niall, te acercaste a él y te acurrucaste a su lado.

Era hermoso, no había otra manera en la que pudieras describirlo. Su cabello despeinado sólo era prueba de la manera en la que habías pasado tus dedos por él durante su momento íntimo en la noche. Sus párpados se movían un poco por lo que sea que estuviera soñando. Sus labios estaban un poco entreabiertos y su pecho subía y bajaba lentamente con cada respiración que daba.

Lo amabas, demasiado.

Sentiste la necesidad de ir al baño así que te separaste de Niall pero tan pronto como lo hiciste, sentiste su brazo acercarte de nuevo a su cuerpo.

─Amor... tengo que levantarme.─ Dijiste suavemente.

─No.─ Niall murmuró más dormido que despierto.

─Niall, tengo que hacer pipí.─ Mencionaste.

─Ven aquí.─ Él dijo ignorando tu comentario.

Suspiraste y volviste a dar vuelta para terminar encima de Niall, con tu pecho tocando el suyo.

Niall puso sus manos sobre tu espalda y rozó sus labios con los tuyos antes de finalmente besarte, te separaste del beso y miraste sus ojos azules que por fin estaban abiertos.

Hiciste el intento de alejarte de él pero te tomó con fuerza para que no dejaras de estar acostada sobre su cuerpo y te acercó para volver a juntar sus labios con los tuyos. Al parecer no quería que esto terminara.

Sonreíste y negaste con la cabeza mientras te estirabas y tomabas la camisa que Niall había estado utilizando anoche y que estaba tirada en el suelo junto a todas las otras prendas.

─Esto es mío ahora. ─ Sonreíste mientras deslizabas el pedazo de tela sobre tu cuerpo, quedando justo a la mitad de tus muslos.

Le diste una sonrisa triunfante a Niall quién seguía recostado en la cama con la sábada cubriendo hasta sus caderas, mirando cada movimiento que hacías y finalmente te metiste al baño para encargarte de tus necesidades. Saliste de nuevo a la habitación y Niall sonrío.

─¿Sabes? Esa camisa te queda mejor a ti que a mí.─ Niall dijo mientras se acomodaba en la cama, se sentaba y dejaba salir otra sonrisa de altanería mientras te veía de pies a cabeza.
─ Pero no voy a dejar que te la quedes, de hecho la necesita de vuelta.

─Pero me gusta. ─ Te quejaste.

─Amor, es parte del guardarropa del tour, tengo que llevarla para el siguiente show.

─No me importa, aun así me la quedaré. ─ Dijiste mientras le sacabas la lengua.

─No, no lo harás, bebé. ─ Niall dijo.

─ ¿Qué te parece si vienes y me haces dártela de nuevo entonces, hm? ─ Lo retaste.

Niall tenía que admitir que te veías adorable con su camisa, y siendo honesto sabía que no habría ningún problema si no se la regresabas pero aun así estaba determinado a quitártela de encima desde el momento en el que te la habías puesto. Aunque al fin, después de conseguir lo que buscaba, estaba más que seguro que dejaría que te quedarás con la camisa si eso era lo que querías.

Niall se puso de pie y para tu sorpresa ya llevaba un par de boxers puestos, comenzó a caminar hacia ti y poco a poco fuiste dando pasos hacia atrás, con la intención de alejarte de él pero tus intentos se vieron fallidos cuando tu espalda tocó la pared. Niall se acercó a ti, dejándote acorralada entre su cuerpo y la pared mientras sus manos se posicionaban cada una a un lado de tu cabeza.

Junto su cuerpo un poco más hacia el tuyo y pronto sus labios estaban sobre los tuyos para después poner sus manos sobre tu cintura. El beso continuó y las manos de Niall comenzaron a deslizarse sobre tu cuerpo, momentos después sentiste sus manos sobre tus pechos haciendo que soltaras un jadeo. Tu cuerpo instintivamente se pegó más al de Niall y moviste tus caderas contras las suyas, ganando un gruñido profundo de su parte.

Una de sus manos continuó sobre uno de tus pechos mientras que la otra comenzó a descender hasta la orilla de la camisa. Sus dedos se metieron debajo de ésta y acariciaron tus muslos para después comenzar a subir la camisa poco a poco.

─Niall...─ Su nombre salió de tu boca como un gemido mientras te acercabas incluso más a su cuerpo con la esperanza de que se decidiera a tocarte en donde más necesitabas.

Necesitabas más.

Los labios de Niall hicieron su camino a través de tu mejilla y mandíbula hasta llegar a tu cuello mientras dejaba besos húmedos sobre tu piel y succionaba un poco con el fin de dejar una pequeña marca, volviste a soltar un quejido cuando sus labios pasaron por debajo de tu oído.

Sus manos quitaron con facilidad la camisa sin que te dieras cuenta ya que tus ojos estaban cerrados y estabas demasiado enfocada en lo que su boca y sus manos estaban haciendo.

De repente, detuvo los besos sobre tu cuello y se separó de ti para mirarte con una sonrisa triunfante y la camisa entre sus manos. Miraste hacia abajo notando que estabas desnuda de nuevo.

De inmediato te sonrojaste y bajaste la mirada. No podías creer que estabas tan ansiosa y concentrada en sus acciones que ni siquiera había batallado cuando quitó la camisa de tu cuerpo.

─Ahora... ¿qué era eso que decías de que la camisa te pertenecía? ─ Niall preguntó antes de poner la camisa sobre su cabeza y deslizarla sobre su torso.

Todo lo que pudiste hacer fue sonreír mientras te acercabas a él y envolvías tus brazos alrededor de su figura, te pegaste a su cuerpo y podías sentir el bulto en su entrepierna, lo que causó que sonrieras. Te paraste de puntitas para rozar tus labios con los suyos.

─Eso fue trampa, Niall. ─ Te quejaste como una niña pequeña antes de que él soltara una carcajada y tomara tus caderas para después levantarte, haciendo que envolvieras tus piernas alrededor de sus caderas.

Niall dio vuelta y comenzó a caminar hacia la cama aún contigo en sus brazos. Después de todo el día había comenzado de una manera bastante buena para ustedes.

Imaginas | NHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora