Ok, todos los imaginas pasados son los antiguos, a partir de este, son puros nuevos. 😊
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—Por favor, Niall. Solo serán 20 minutos, media hora a lo máximo.— Miraste a tu novio con desesperación. Te miro y después su mirada viajó hacia la caja de productos de belleza recién abiertos, poniendo en consideración tu petición por unos segundos. Su mirada volvió hacia ti y frunció el ceño, aún un poco confundido por tu petición.
—¿Por qué no lo haces tú? Es es un patrocinio tuyo.— Mencionó, suspirando un poco.
—Ya te dije, me acaban de hacer este tratamiento facial y necesito que mi piel respire. Si aplico maquillaje los poros se van a tapar y van a arruinar todo.
Esta compañía de maquillaje te había contactado por tu cuenta de Instagram no hace mucho tiempo atrás, ofreciéndote un patrocinio a cambio de que probaras su nueva línea de productos, viendo la manera tan grande en la que habías estado creciendo en la aplicación. Esta compañía, como sea, te había enviado los productos con un corto periodo de tiempo para que pudieras probarlos. Y tanto tú como Niall no veían correcto todavía el juntarse con otras personas cuando la pandemia estaba en su punto más alto, dejándolos a ambos en la mayor parte encerrados en el departamento. A todo esto, se le agregaba el hecho de que con el tratamiento fácil recién aplicado y con un limitado número de voluntarios, no te quedaba más opción que pedirle ayuda al hombre con el que vivías.
—No tiene que ser un maquillaje súper elaborado tampoco, puedo solamente ponerte algo de base o...— Comenzaste a explicar pero te callaste cuando escuchaste a Niall murmurar algo, que debido a tu desesperación, no pudiste escuchar con claridad.— ¿Qué dijiste?— Preguntaste, con la emoción comenzando a crecer en ti.
—¡Dije que está bien!— Repitió completamente serio, pero el gritito y el pequeño brinco de emoción que dejaste salir y la sonrisa que se plasmó de inmediato en tu rostro fue suficiente para hacerlo sonreír a él también. De inmediato lo envolviste en tus brazos mientras le agradecías sin parar sobre la piel de su pecho desnudo. La sensación de su vello en el pecho te hizo mirar hacia su rostro de inmediato, recordándote de esa barba de aproximadamente una semana sin afeitarse.
—Um, amor, hay otra cosa también...
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Niall tomó el rastrillo nuevo del estante del baño mientras miraba su reflejo en el espejo una vez más, pasando una de sus manos por su mejilla y negando un poco a la vez que tú le pasabas su crema para afeitar.
—Me debes un montón de cosas por esto, nena.— Mencionó, preguntándose a sí mismo mentalmente por qué tenías tanto poder sobre él que lo tenías en la palma de tu mano. Una vez que comenzó a tener vello facial hace un par de años atrás, nunca más lo afeito por completo. Él y algunas personas cercanas a él, incluyéndote a ti, llegaron a la conclusión de que la barba lo hacía verse más maduro y simplemente era parte de su imagen desde que comenzó su carrera como solista. Mostraba madurez tanto en él como en su carrera.
—Amor, yo estoy tan decepcionada como tú.— Mencionaste mientras le entregabas el bote de crema de afeitar.— Pero es lo que se tiene que hacer.
—¿Me ayudas?— Lo miraste confundida por su petición quedándote quieta de pie a su lado.— Tu nunca cortas tus piernas cuando las depilas ni nada... y me lo debes.— Se defendió, mirándote con una sonrisa mientras te ofrecía el rastrillo en su mano. ¿Y quién eras tú para negarte a sus peticiones? Soltaste una risita ante su petición y no perdiste más tiempo antes de ponerte a trabajar en su rostro.
—Quédate quieto.— Pediste mientras ponías una cantidad considerable de espuma en tus manos. Niall soltó un sonido pequeño y descanso sus manos en tu cintura como un reflejo cuando comenzaste a esparcir la espuma sobre sus mejillas y barbilla.
—Está frío.— Mencionó.
Soltaste una risita y lo miraste juguetona.— No creo que te congeles, tranquilo.
Niall comenzó a quejarse segundos después, pidiendo algo de música para que llenara el silencio cómodo una vez que terminaste de aplicar la espuma en su rostro. Rodaste los ojos y enjuagaste un poco tus manos antes de caminar hacia la bocina pequeña que había en el baño.
—Qué exigente.— Mencionaste haciendo que Niall te mirara
—Querías que te ayudará.— Se defendió, causando que lo arremedaras con un acento irlandés más profundo y fingido. Niall te miro con advertencia a la vez que tomaba tu cintura en sus manos una vez más, apretándote un poco más de lo normal, reíste y levantaste el rastrillo en tu mano.
—Ten cuidado, irlandés. No tengo miedo de usarlo.— Lo miraste con una sonrisa. Él solo sonrió de lado, tomando tu celular y poniendo algo de música para que se conectara a la bocina. Una vez que escogió algo para escuchar, los dos regresaron a la tarea en manos.
Niall murmuraba las canciones que iban sonando mientras tu rostro concentrado y con un ceño fruncido hacía su trabajo en sus mejillas, guiando el rastrillo lentamente y sin prisa alguna. Las vibraciones de sus labios tan cerca de tus dedos comenzaron a despertar a las mariposas en tu estómago. Una sonrisa apareció en tus labios sin pedir permiso alguno y cuando Niall la notó, te miro y sonrió también.
—Ya está.— Limpiaste el exceso de crema de su rostro con una pequeña toalla que tenías a tu lado, mirándolo con atención.
Niall se miro en el espejo y sonrió.— Espera, te hizo falta algo.— El chico murmuró, acercándose a uno de los cajones en el baño. Regreso contigo unos segundos después con una loción aftershave en sus manos, causando un sonido de sorpresa de tu parte.
—¿Cómo se me pudo olvidar?— Preguntaste con una sonrisa y fingiendo decepción. Tomaste el bote y pusiste una porción en tus manos, frotándolas un poco antes de acercarte a las mejillas de Niall. El chico no desperdició el tiempo y tomó tus mejillas para acercar sus labios a los tuyos para un beso rápido. Fue corto, dulce y totalmente puro. Cuando te separaste lo miraste antes de fruncir un poco la nariz, haciéndolos reír a ambos.
—Ok, ahora sí, ¿listo para la siguiente parte de tu trabajo facial, mi amor?
