Jacob huye de Labán

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Génesis 31:1-9

Pero Jacob se enteró de que los hijos de Labán andaban diciendo: «Jacob se ha ido apoderando de todo lo que le pertenecía a nuestro padre, y se ha enriquecido a costa suya».

2 También notó que Labán ya no lo trataba como antes.

3 Entonces el SEÑOR le dijo a Jacob: «Vuélvete a la tierra de tus padres, donde están tus parientes, que yo estaré contigo».

4 Jacob mandó llamar a Raquel y a Lea al campo donde estaba el rebaño

5 y les dijo:

―Me he dado cuenta de que su padre ya no me trata como antes. ¡Pero el Dios de mi padre ha estado conmigo!

6 Ustedes saben muy bien que yo he trabajado para su padre Labán con todas mis fuerzas.

7 No obstante, él me ha engañado y me ha cambiado el salario muchas veces.[a] Pero Dios no le ha permitido causarme ningún daño.

8 Si él acordaba conmigo: Los animales manchados serán tu salario, todas las hembras tenían crías manchadas; y, si él acordaba: Los animales rayados serán tu salario, todas las hembras tenían crías rayadas.

9 Así Dios le ha quitado el ganado al padre de ustedes, y me lo ha dado a mí.

Aquí vemos que la presión y problemas familiares van en aumento, ahora los hijos de Labán acusan a Jacob de que les había quitado lo de ellos y Labán ya no se comporta igual con Jacob ¿Qué nos enseña esto? que cuando las personas se aprovechan de otras mientras todo va bien, todo es maravilloso, pero cuando la persona reacciona y ya no quiere ser parte de la injusticia entonces empiezan los cambios de actitud y problemas.

Es obvio que la actitud de Labán y sus hijos iba a cambiar, pues ya Jacob no los estaba enriqueciendo como antes. El no soportar que a otra persona le vaya bien, es un total egoísmo nunca debemos entrar en este tipo de actitud.

¿Porqué le pasaba tanta opocisión a Jacob? por no hablar a tiempo, por no poner las cosas claras y en detalle. Labán era un tramposo y con personas así es muy difícil negociar. Pero Dios en su justicia, al ver todo lo que esta pasando le da favor y gracia a Jacob.

Siempre que te sientas que alguien te ha hecho mal o que te lo hace a propósito pon todo esto en oración y actúa, habla a tiempo, pon tus puntos delante de la persona, si esta no reacciona a lo mejor es tiempo de moverse de tal situación.

Dios literalmente tuvo que sacar a Jacob de aquí, pues él no hablaba, no se quejaba y a pesar de que eso es una muestra de humildad , tampoco debemos confundir la humildad con el querrer quedarnos estancados en la vida y que otros saquen provecho de nuestra situación, atrasándonos de nuestro propio destino.

Tenemos que ser humildes y tener respeto hacia los demas, pero cuando es tiempo de hablar claro... también hay que hacerlo.

Un día Con Dios (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora