One Shot McDanno

Misión (Parte 2)

Danny se encontraba en la sala de la casa de Steve, por más que trataba no podía superar su muerte. Realmente lo intentaba, por su ohana, por su monito por el, pero no podía.
No aceptaba el hecho que Steve nunca más volvería, nunca más conduciría su auto o lo obligaría a salir de excursión, nunca más discutirian por el proceder del Marín; por que simplemente Steve ya no estaba.
Después del funeral del comandante, Chin y Kono se dieron a la tarea de averiguar que era lo que había pasado con su jefe, pero no obtuvieron nada. Sólo cuando Joe Waite intervino pudieron saber que Steve fue dado como "perdido en accion" nadie sabía en que país fue la misión, ni cual era el objetivo. Sólo sabían que Steve no volveria.
Y por más que Danny tratará de mostrarse entero frente a sus amigos y familiares, siempre se derrumbaba cuando estaba sólo, trato de mudarse de la casa de su jefe, pero descubrió que no podia, prefería sufrir en la casa del hombre que amaba a estar lejos de lo único que le quedaba de el.
Y así la noche lo encontró, sentado en el sofá rodeado de botellas de cervezas.
El detective ya no distinguía ni el día ni la hora, pero sus pensamientos inevitablemente seguían en una persona, en el hombre que le robó el corazon, ese hombre que entró en su vida sin pedir permiso, y la puso patas arriba. Danny pasaba por muchos estados cuando sólo se concentraba en su dolor. En esos momentos "Furia" el rubio estaba enojado con Steve, por haberlo dejado, por no ver lo que Danny callaba, por marcharse y no volver, por que no cumplió su promesa de regresar con su ohana.
Pero también estaba furioso con el, por ser un cobarde, por no decirle que lo amaba, que lo necesitaba, que no se marchará, que se quedara con el.
Las lágrimas corrían por sus mejillas y el no hacia nada por detenerla, quería liberar de una ves por todas todo ese dolor, quería dejar de sufrir, dejar de amarlo, dejar de extrañarlo.
La puerta de la casa McGarret fue abierta, una bolsa de lona fue dajada en el suelo a lado de la misma, pasos suaves se escuchaban por la habitación, pero Danny no podía reaccionar.

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Steve entró a su casa agotado, realmente el viaje había hecho mella en sus heridas todabia sin sanar del todo, el quería ver a Danny primero que nada, pero no sabía como aparecer frente a su puerta después de seis meses en los que sabía el rubio lo creía muerto.
La misión fue un éxito sin bajas que lamentar, pero para llegar a ese resultado Steve tubo que separarse de su equipo, y fue capturado por los enemigos, quienes solo.lo torturaron por pura diversión, después de mucho trabajo y esfuerzo logró escapar y llegar hasta una base militar aliada. Pero no todo fue fácil, varía costillas rotas, un brazo fracturado y una herida de bala, fueron sólo algunas de sus tantas heridas, sus superiores sólo lo dejaron volver hasta ahora.
El corazón del Marín se rompió al ver la imagen frente a el.
Danny estaba sentado en su sofá, rodeado de botellas de cervezas, y las lágrimas caían sin cesar de sus ojos. En dos zancada acortó la distancia y abrazo el cuerpo de su rubio favorito. Danny se dejó hacer pensando que simplemente era una alucinación más, un sueño en el que Steve estaba a su lado.
-Shhhh Danno, tranquilo. Susurró Steve, Danny ya sin fuerzas para resistir se aferró a la camisa de Steve y lloro más desconsoladamente.
-Tranquilo Danno, ya estoy aquí, yo te tengo.
- No, no es cierto, no estás te fuiste, me dejaste y no volverás. Hablo el detective. -Y ya no quiero sufrir más Steve, te tengo que dejar ir, no puedo seguir así.
-Mirame Danno estoy aquí. Hablo Steve tomando el rostro del rubio. -llegue a casa, tu eres mi hogar Danno, Te amo y ya nunca más te dejare.
- No... tu te fuiste... me dejaste... Y ya no volverás... Y te amo y ahora no se que hacer con este amor. Danny no podía dejar de llorar, quería dejar de sufrir, quería que Steve supiera como se sentia.
El Marín esperaba muchos posibles escenario, Pero nunca espero encontrar a Danny, Su Danno tan destruido, y le partía el corazon saber lo que el rubio a estado sufriendo por su causa.
Steve no era un hombre de palabras si no más de acción por lo que tomó el rostro de Danny entre sus manos y lentamente se acercó a sus labios, esos labios que tanto había deseado y saltaba con probar, el sabor a cervezas y lágrimas rompieron el corazon del Marín, Danny creía definitivamente, que era un sueño, por que Steve no podía estar allí.
El beso era lento, sin prisa, descubriendose mutuamente, Steve creía desfallecer los labios de Danny eran muchos más suaves de lo que había imaginado y su lengua hacia magia en su boca.
Danny no quería que ese sueño terminará, quería detener el tiempo y vivir en ese instante, por que ahí estaba Steve besandolo con tanto amor y ternura que lo dejaba sin aire. Danny tomó con sus manos la nuca del Marín lo levantó he izo que se sentará en el sofá, el rubio aprovechó para sentarse a ojarcadas del comandante, el beso comenzó a subir de nivel, Danny estaba desesperado, quería sentir al hombre que amaba.
Steve emitió un gruñido casi animal al sentir la erección de su rubio favorito. Se fue separando lentamente de Danny y lo miro a los ojos. -Detente Danny.
- Por favor Steve, quiero sentirte. Sollozo el rubio.
-Y yo me muero por hacerte el amor, pero no haci, no cia do se que mañana.nonrecordaras nada. Exclamó Steve. -Ben vamos a dormir. El Marín levantó a Danny y lo llevo a su habitación, lo acostó y abrazo. - Te amo Danno.
-yo te amo más Steve. Hablo Danny antes de caer rendido.

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La mañana llego y Danny corrió al baño, vomitando todo lo que su estómago tenía. Luego entró a la ducha, para bajar un poco la resaca, a su mente llegaron las imágenes del sueño. Y nuevamente lágrimas caían por su mejilla, deseaba tanto que fuera real.
Salió del baño, se vistió y bajo para prepararse una taza de café.
El alma casi se escapa de su cuerpo viendo vio a Steve parado frente a la estufa dándole la espalda y cocinando.
-¿Pero qué mierda? Exclamó Danno.
-Hola Danny. Hablo Steve.
-¿Hola Danny? ¿Que mierda eres? Danny retrocedió cuando Steve intento acercarse a el. - No... no te acerques... ya me volví loco.. . Tu estas muerto...
- Danny tranquilo, soy yo. Estoy aquí. Steve tomó en sus brazos al rubio.
Danny se dejó hacer, pero pronto reaccionó.
-¡Eres un imbécil! Hablo Danny . - Te vas, te dan por muerto, y ahora sólo regresas. Danny le dio un golpe en la mejilla. -Eres un idiota.
- Danny, nunca quise hacerte esto.
-Claro tu nuca quieres, pero siempre terminó en el medio; sabes acaso lo que sufrí estos meses dándote por muerto.
Steve se acercó nuevamente al rubio y este ves no pudo escapar.
- Danno, se que has sufrido, de la misma manera que yo sufrí, se sé te prometo volver, y es por eso que estoy aquí, saber que estabas aquí pensando que morí fue lo único que me dio fuerzas para volver. Quería rendirle te juro, pero sabía que estabas aqui.
Steve probó nuevamente los labios de Danny, era una sensación a la que no quería renunciar, estar ahí en su casa en los brazos de su Danno era lo que el realmente quería. Danny y Grace era su familia, su ohana y era ahí donde Steve quería estar. - Te amo Danno, y ya no habrá más misiones clasificadas, ni viajes sorpresas, nada más importa, que estar aquí junto a ti y Grace. Te amo Danno.