Ojos

2.5K 192 5
                                    

Danny ser sentía frustrado, había relativamente tranquila, y habían decido salir a festejar con el equipo todo iba de lo más tranquilo hasta que Steve decidió levantarse de la mesa para ir a hablar con una de las meseras.
Al parecer ni Chin ni Kono les llamo la atención está actitud de su jefe, pero para Danny no podía pasar de ser persivida, no después de estar enamorado de su jefe y mejor amigo por más de dos años.
Apesar de resignarse a tener sólo una amistad con Steve, no podía evitar sentir celos de todas las mujeres que podía estar con el Seal y que simplemente se deleitaban con la vista, el rubio estaba convencido que el destino lo odiaba, por que no era justo estar enamorado de un hombre como Steve (Un amor imposible) y para colmo ser sólo su amigo, y tener que ver como coqueteaba con cada mujer que pasaba frente a el.
Luego de una hora sentado en el bar junto a Chin y Kono y viendo como su Marín estaba de lo más cómodo con la camarera, decidió marcharse.
-Bien chicos creo que me voy, mañana tengo a Grace y tengo que buscarla temprano. Danny se levantó, pago su cuenta y se despidió con un leve saludo de Steve, quien levantó su cerveza para despedirlo.
Pero la perspectiva de ir a su departamento sólo, no le era muy atrayente, así que tomó su auto y condujo hasta otro bar. No paso mucho para que un joven se sentará a su lado.
-Hola. Dijo el hombre. -Soy Nick, puedo ofrecerte un trago.
-Si claro. Danny se giró para ver al chico y sonrio. -Soy Danny. Se presentó pensando en lo parecido que era el joven con Steve.
Danny no sabía muy bien como había terminado en la parte de atrás del auto de Nick pero realmente le agradaba la idea de poder pasar un buen rato y olvidarse de todos sus problemas, y frustraciones. Pero cuando se separó por un momento de los labios de Nick y vio sus ojos, supo que no podía hacer eso.
Apesar de que Nick era alto y musculoso, de piel bronceada y cabellos negros, pero los ojos, esos ojos no eran los que el quería ver a la hora de tener sexo o hacer el amor. Nick simplemente no era ni sería Steve, y Danny se sintió patético, por que aún ahí en la oscuridad de la noche en el asiento trasero de un coche el estúpido de Steve McGarret podía joderle la existencia, y se odio por sentir que lo estaba traicionando.
-Perdona Nick pero no puedo hacerlo.
-¿Qué? ¿Porque? Nick realmente parecía sorprendido.
- Por que estoy enamorado de una persona y se que sonará patético por que el ni siquiera me ve como algo más que un amigo pero siento que lo estoy traicionando.
-Hey, tranquilo, lo entiendo y no es patético, sólo me parece increíble que no te vea cuando eres un hombre tan especial.
-Pues el si me ve, pero sólo como amigo, y compañero de trabajo, y Gracias por lo de especial y por entender.
- No tienes nada que agradecer Danny y ojala hubiera más hombres como tu.
Danny se despidió de Nick con un suave beso y fue hacia el Camaró el camino a casa estuvo lleno de insultos hacia Steve, ¿es que acaso no merecia poder tener una noche tranquila, y placentera? Su enojo sólo aumento cuando vio la camioneta de Steve estacionada en el lugar del Camaró.
-¿Dónde estabas? Pregunta Steve apenas Danny pone un pie dentro de su casa.
-¿Perdón? ¿quien te crees que eres Steven? Y además ¿Qué haces en mi casa?
-Vine a ver como estabas, pero que sorpresa la mía al no encontrarte. Steve estaba de pie frente a la puerta con los brazos cruzados y una expresión creía. -Dijiste que tenías a Grace mañana, ¿A donde fuiste?
-Si no te has dado cuenta Steven soy un adulto y como adulto puedo hacer lo que quiera, lo que no quita que almas entrado a mi casa sin mi autorización. Contestó Danny cada vez más enojado.
-Basta de juegos, ¿A donde estabas? Exigió el Seal acorralando a Danny contra la puerta.
-¿Qué haces animal?
-Algo que quería hacer hace mucho tiempo. Dijo Steve antes de tomar los labios del rubio.
Danny sintió sus piernas flaquear, no sabía había pasado estar enfadado con Steve a estar besandolo. Todo en el se sentía de gelatina y su cuerpo tembló al sentir las frías manos del Marín bajo su camisa. Y un gemido ahogado escapó de sus labios cuando Steve dejo sus labios y se dirigió a su cuello.
Un te amo escapó de los labios de Steve y Danny miro los ojos del hombre que tanto amaba y deseaba, y sonrio, -Yo te amo más Steven. Fue lo único que pudo decir el rubio antes de besar a su Seal loco y entregarse al amor y la pasión.

One Shot McDannoOù les histoires vivent. Découvrez maintenant