Él y yo⇝Jungkook→BTS

treinta y ocho

Ahn Sun Hee

Y bueno, hoy era viernes pero además de ser el típico día de la semana hoy era el día en que mi padre se supone que conocería a mi novio, que aún no sabía nada de él y que no respondía ni mis mensajes ni mis llamadas, todo era un desastre y estaba al borde de un colapso mental, dentro un par de horas la pequeña cena que mis padres organizarían estaría lista y yo aún ni sabía si mi novio llegaría, de sólo pensarlo me causaba jaqueca.

Pero no podía estar quejándome por algo que yo misma había causado, era oficial, en lugar de llamarme Ahn Sunhee, debía llamarte la idiota Ahn, era una vergüenza para mi familia, no me merecía a Jungkook, después de haber reflexionado las cosas supe que todo lo que me había pasado era porque me lo merecía, ¡¿a quién se le olvida la fecha en que comenzó su noviazgo?! ¡Exacto! A nadie, sólo a mí y claro que Jungkook debía estar molesto.

Después de haber reflexionado por varias horas supe que era hora de decirle a papá sobre mi gran catástrofe, me ganaría unos cuantos regaños pero debía ser honesta y decirle que la cena no sería hoy o tal vez nunca. Bajé las escaleras con sumo cuidado y miré como papá estaba sentado en el sillón mirando su reloj, él yacía vestido con un traje negro que sólo usaba para ocasiones especiales, y bueno ya había arruinado eso.

Inhalé lentamente y caminé hacia él, mi padre al verme puso una cara de horror por ver como andaba vestida, mi traje no era el más adecuado ya que estaba en mi pijama de unicornio y mi cabello estaba hecho un gran desastre, ni siquiera sabía si al menos lo había peinado, de igual manera me daba igual.

-¡Sunhee! ¡Mira nada más como estás vestida! ¿No se suponía que debías estar vestida en no sé, un vestido?-preguntó siendo más que obvio.

-Papá tengo algo que decirte.-comencé diciendo.

-Ya veo que sí, ¿qué es tan importante que aún no estás arreglada? ¿Ya viste la hora? ¡Son las 7:30 de la noche! Y tú aún en pijamas.

-Lo sé papá pero primero escúchame, es algo que no puedo dejar pasar...-

-Está bien, tienes toda mi atención.-dijo observándome, suspiré y decidida a hablar abrí la boca.

-Verás, lo que tengo que decirte es que...-me detuve en el momento en que el timbre sonó indicando que alguien había llegado, papá se levantó, caminó hasta la puerta y en cuanto la abrió sentí mi alma abandonar mi cuerpo, esto no era real.

¡Que alguien venga y me pellizque! ¡Necesitaba comprobar que esto era cierto y no un sueño! Mis ojos veían a un Jungkook bien vestido, había hecho caso a mi pedido y ahora estaba vestido con un esmoquin negro y estrechaba las manos con mi padre diciendo que era mi novio, sentía que iba a desmayarme en cualquier momento.

-¡Cariño!-exclamaba Jungkook en el momento en que se acercaba caminando hasta mí para luego darme un abrazo, yo aun impactada por todo no había podido reaccionar a su abrazo de modo que demoré unos segundos.

-Jungkook... ¡Estás aquí!-dije esto último para nosotros.

-Debo decir que aún sigo enfadado, pero vine por tu padre así que no te emociones, ahora ve a cambiarte mientras que yo entablo una conversación con tu padre sobre mis sentimientos hacia ti y toda esa mierda.-finalizó y deshizo el abrazo, asentí ante su petición y subí a mi habitación prácticamente corriendo.

Él estaba aquí.

Sonreí abiertamente al estar sola en mi habitación, entré al baño y me deshice de toda mi ropa y entré en la ducha dándome un baño rápido, al salir me envolví en una toalla y salí a mi habitación, busqué mi ropa interior y me la puse, abrí mi armario y busqué entre mis vestidos.