La teoría del caos.

50. Futuro.

Emell.

Estaba en mi habitación, mi abuela no estaba; era fiscal en una corte un poco lejos de Orlando así que aveces se alejaba unos cuantos días.

Eran las 4:12 de la madrugada y había despertado de sobresalto. No había tenido un buen sueño, de hecho fue terrible. Mis ojos estaban llorosos y mi pecho latía muy rápido, la camisa negra de Anther que solía quedarme muy suelta estaba adherida a mi pecho por el sudor. Mire a mi alrededor, ahí estaba mi novio dormido, con el dorso desnudo y frío. Tan claro y marcado, tan bonito.

Subí las mantas que tenia a la altura de la cadera, se despertó alarmado al sentir mi tacto. Abrió los ojos con dificultad y me miro, sonrió pero luego me miro desconcertado. Se incorporo en la cama y tomo mi barbilla.

- ¿Qué tienes? - Su voz estaba mas ronca de lo normal, siempre estaba así cuando acababa de despertarse.

- N-nada. - Tenia un nudo en mi garganta y al hablar dolía mucho.

- Emi, estas llorando. ¿Estas bien?

Lo abrace lo mas fuerte que pude, el me correspondió el abrazo y beso mi cabeza.

- Y-yo soñé algo muy feo. S-soñé que tu habías muerto.

El me separo de su pecho y se levanto de la cama, solo andaba en boxers, no pude evitar mirarlo. Abrió uno de mis cajones y saco una camisa, volvió a la cama. Me quito su camisa y la tiro al suelo, me coloco la que había sacado anteriormente, luego me miro.

- Fue un sueño bebe.

- N-no lo entiendes, fue u-un sueño muy feo.

- ¿Cómo moría?

- ¿Q-qué?

- En tu sueño, ¿Cómo moría?

Recordé, aunque aun estaba muy bizarro.

- T-tu me habías pedido que te acompañara a las montañas, p-pero mis padres estaban en problemas, no recuerdo cuales. - Las lágrimas empezaron a caer y no pude contenerlas. - Yo no p-pude ir contigo. Tu - Comencé a llorar. - tu caias en un risco, te hacías pedazos. Y yo, yo no podía hacer nada, ya no podía hacer nada.

El volvió a abrazarme. Nos acostamos nuevamente en mi cama, esta vez Anther fue el que nos cubrió con las mantas. Me miro a los ojos y sonrió.

- Oye, solo fue un sueño. - Quito los mechones de cabello de mi frente y dejo un beso ahí. - Eso no va a pasar y lo se. Porque tu nunca me vas a dejar.

Sonreí. Lo bese.

- Nunca te voy a dejar.

- Ni ahora, ni en un futuro, ni nunca.

- ¿Planeas pasar un futuro conmigo?

Abrió mucho los ojos, luego volvió a sonreír.

- Claro que si. Terminaremos de estudiar, nos casaremos, rentaremos una casa aquí en Orlando. Adoptaremos a muchos pequeños y tendremos un perro al que llamaremos Hocicos. Todo sera genial.

Me reí un poco.

- ¿Has pensado en todo verdad?

- Obviamente. - Me sonrió. - Oye, eres muy bonito.

- Tu eres mas bonito.

Me beso, le devolví el beso.

- Emell.

- ¿Si?

El se quedo callado un momento.

- ¿Has pensado en tus padres?

- No. - Mentí.

- ¿Por qué?

- Ellos me odian.

- ¿Cómo estas tan seguro?

- Porque es así. No me gusta pensar en ellos.

- Pues deberías. Se que ellos son malas personas, se lo que te han hecho. Pero creo que es peor no tenerlos. - El ya no me miraba, no miraba a ningún lado. - Creo que debería tratar de buscarlos antes de que sea tarde Emell, por lo menos a tu hermana.

- Tal vez lo haga. Agh, no lo se.

- Solo es una opinión.

- Creo que me gusta mas la idea de solo casarnos.

- Oye, mi plan no es solo casarnos.

- Bueno, con sus otros derivados.

El sonrió.

- Pequeño. - Lo mire. - Te amo.

Yo amaba que dijera que me amaba. Lo abrace y me pegue lo mas que pude a el.

- Yo también te amo, mucho.

Me fui quedando dormido, con todo lo que me había dicho Anther. Lo de nuestra vida en un futuro era una idea maravillosa. Lo de mis padres, no sabia en realidad como clasificarla pero no me agradaba mucho.

Por ahora no sentía la necesidad de tenerlos junto a mi. No después de todo. Pero si había llegado a extrañarlos algunas veces. Por ahora no estaba decidido a buscarlos. Tal vez luego, en un futuro alejado. Tal vez nunca.

Nadie quiere a los gfes del Emell ;-;
Weno, he estado pensando en lo de ukear a Anthersito. La idea me agrada jaja, pero seria muy complicado. :<
Bueno sin han llegado hasta aquí, gracias, te amo, mucho, mucho. ❤