La teoría del caos.

37. Lo necesito.

Nathaniel.

- Estoy un poco quemado. - Ethan estaba rojo de los brazos, muy rojo.

- Te dije que te pusieras bloqueados, sabia que te quemarias.

- No me regañes, esto duele.

Puse mi dedo en su brazo derecho.

- ¡No bobo! - Se quito velozmente de la cama. - ¡Arde mucho en cerio!

No pude contener la risa. Luego de llegar dormimos un rato, después estuvimos en la alberca de la casa y le insistí a Ethan que se pusiera bloqueador el cual me ignoro completamente y ahora estaba rojo y le ardían los brazos.

- No quiero decir "te lo dije" pero - Lo mire y sonreí burlonamente. - Te lo dije.

- Debiste obligarme a ponermelo así como Canille obligo a Tinna, luego debiste ponermelo como hizo Anther con Emell.

- Lo siento, eres muy terco. Mañana te obligare y te lo pondré ¿bien?

- Esta bien.

Le di un beso.

- Te veías muy lindo en la alberca.

- Gracias. Aunque tu te veías mejor.

Se tiro sobre mi en la cama, Anther dijo que nos quedáramos en la habitación que solía ser de su hermano.

- Falso.

- Claro que si. - Beso mi cuello y la piel se me erizo. - Tu eres tan hermoso.

Quería estar con Ethan, pero me sentía un poco incómodo al hacerlo en la habitación de un chico que estaba en coma.

- E-ethan, n-no, aquí no.

Puso sus mano a caso lado de mi cintura y se elevó, ahora me miraba a la cara.

- ¿Por qué?

- E-es raro, me siento incomodo.

- ¡Ay vamos, no estamos haciendo nada ilegal!

- Ya lo se tonto, pero me siento culpable.

- Agh, apuesto a que Tinna y Canille están teniendo sexo en el cuarto de los papas de Anther.

- No lo creo.

- Pues yo si. - Se callo un momento luego se rió. - ¿Crees que Emell y Anther vayan a follar?

- ¡No lo se! No preguntes eso. - No pude contener la risa.

- Bueno, no haremos nada que no quieras. - Se bajo de mi y se acostó a un lado. Me voltee hacia el para mirarle.

- No dije que no quisiera, pero me siento incómodo.

Me sonrió, luego acarició mi mejilla.

- No pasa nada bebe.

Era un desgraciado, conocía su técnica y aun así siempre caía y terminaba convensiendome.

- Ven aquí idiota.

Tire de su camisa y volví a subirlo a mi, me beso y yo lo bese. Alce su camisa, el se la quito y la tiro al piso al igual que la mía.

Lo necesitaba tanto, y unos minutos mas tarde el placer había mandado a la mierda la incomodidad.

Anther.

Estaba con Emell en mi antigua habitación, este se divertía viendo mi álbum de fotos.

- Te veías muy lindo con lente.

- Parecía idiota.

- Claro que no. ¿Desde que edad los usabas?

- Desde los 11, después del accidente mi vista empeoro notoriamente. - Sonreí. - Yo amaba mis lente de pasta azul.

- ¿Qué les paso a tus bonitos lentes?

- Bueno, es una larga historia.

- Quiero escucharla. ¿Puedes contarmela?

- En la secundaria solían molestarme mucho, demasiado. Un día intente enfrentarlos y me golpearon, y luego empezaron a golpearme con mucha frecuencia. En una de esas golpizas me rompieron los lentes mientras los tenia puestos, un cristal se incrustó en mi ojo izquierdo, dolía como mierda. - Me saque cuidadosamente el lente de contacto. - Mi mamá casi se volvía loca así que decidió comprarme los lentes de contacto, que por cierto son una puta mierda. Los odio pero soy excesivamente miope así que los necesitó.

Emell me beso, yo le seguí el beso.

- No voy a dejar que te hagan mas daño.

- Te quiero. - Lo bese. - Te quiero demasiado.

- Yo te quiero mucho mas.

- Oye. - Lo mire. - A menos de que hagas mierda mis sentimientos, creo que ya nadie puede hacerme mas daño.

- No voy a hacer eso, nunca.

Lo volví a besar y así por un buen rato, hasta que se quedo dormido. Era tan precioso así que lo observe, e igual yo me quede dormido.

Tinna.

- Oye. - Estaba conteniendo la risa.

Canille abrochaba su sostén y se ponía su blusa.

- ¿Qué pasa?

- Creo que Nath y Ethan están follando. - Me eche a reír.

- Vaya, que alivio. Empezaba a sentirme culpable.

- ¿Crees que Anther folle con Emell?

- ¡Oye no preguntes eso, es raro!

Las dos nos echamos a reír esta vez.

- Tengo sueño. - Canille me beso.

- Hay que dormir, yo igual tengo dueño.

Canille se acostó a mi lado y apagó la luz, realmente era lo mejor dormir con ella.

Hola ewe
Bueno si llegaste hasta aquí, gracias. Te amo mucho. 7u7
Weno ahora si adiós. Gudbai mai loverr, gudbai mai frend. ❤