Capítulo 3

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Owl

Había salido a rastrear el camino de los cazadores junto con Paul, mi padre adoptivo. Su cuerpo era grande y esbelto, como la gran mayoría de nosotros. Yo era más pequeño que él, pero en unos años más lograría tener su mismo tamaño, y no podía esperar hasta que sea así.

Según Paul, el rastro que habían dejado los cazadores era muy vago, por lo que habrían pasado por nuestro territorio hace menos de una semana, pero los olores aún eran fuertes para él. Mi deber era aprender lo que más podía, aun no sabía diferenciar el olor de los cazadores con los de un humano normal. Yo estaba atento a los olores y sonidos, quería asegurarme que no hubiera cazadores observándonos ahora mismo, pero Paul ya había peinado la zona, pero de todas formas quise asegurarme. El lobo mayor hizo un movimiento con su cabeza y ambos continuamos rastreando.

El deber de Paul, como el beta de la manada, era asegurarse que estábamos a salvo en nuestro escondite. Teníamos mujeres embarazadas, niños y ancianos que proteger, por lo que era esencial asegurar el territorio que nos habíamos establecido. Según Paul era un grupo de cuatro cazadores jóvenes. Tres machos y una hembra. Posiblemente estaban reconociendo la zona, pero en caso que nos lo encontráramos, debíamos silenciarlos de inmediato.

Actualmente los lugres seguros estaban contados para criaturas como yo. Habíamos sido exiliados de nuestro territorio de origen, pero yo no tengo recuerdos de eso. Nací en medio del viaje y Paul se hizo cargo de mí cuando quedé huérfano con apenas semanas de vida. No es que me afecte ese hecho. Paul me crío y para mí, él es mi padre. Por lo que solo conozco la existencia de nuestro lugar de origen y como otras criaturas buscan lugares para esconderse gracias a él. Hubo un tiempo en que éramos muchos y vivíamos en armonía con los humanos, pero después estalló la guerra y hablar de eso era muy doloroso para mi gente. Perdimos a muchos de los nuestros, y solo un bando ganó: Los humanos.

Ellos estudiaron nuestra especie y la de otros. Aprendieron métodos de pelea, por lo que no dominan diferente tipo de armas, sino también son letales en batallas de cuerpo a cuerpo. Cada humano que conocemos pueden ser potenciales miembros de La Orden, cuya organización entrena a los cazadores y es financiada por los más ricos. Sin embargo, es una organización secreta y no todos estan al tanto de ella. Mientras menos sepan de su existencia y la nuestra, mejor.

Paul se aseguró que los cazadores habían tomado otro curso, alejándose de nuestro territorio, por lo que rápidamente su espalda empezó a convulsionar y la piel de lobo cayó como si fuera una simple tela. De ese gran animal emergió un escuálido hombre de cabello canoso. La transformación de hombre a lobo es realmente dolorosa. El animal reside dentro de ti y cuando te transformas por primera vez, suele ser realmente doloroso. Sientes tus huesos moverse de lugar y tu piel se separa de la carne. Sin embargo, la transformación de lobo a hombre no es tan dolorosa. El cuero cae y surge el hombre, completamente desnudo y sin ningún rasguño. Yo aún no sabía hacerlo con velocidad. Aún era joven y tenía mucho que aprender.

Paul se acercó al escondite que habíamos hecho para guardar nuestras ropas y torpemente, se colocó sus vaqueros desgastados. Él era el hermano del alfa, Ian, por lo que eso lo posicionó en un sitio importante dentro de la manada. Paul siempre fue amable para enseñar a los lobos jóvenes. Les enseñó a luchar y a rastrear, ya saben, lo básico. Todo era por el bien de la manada y en tiempos de guerra, debíamos proteger a los débiles. Así debía ser, esa era la ley.

—Estamos a salvo, Caleb—Caminó en mi dirección mientras se colocaba un abrigo—Deberías transformarte.

Era difícil buscar al hombre en tu interior cuando estas transformado en lobo, por eso se necesitaba mucha concentración y visualizarte a ti mismo como hombre. Por eso mismo se necesitaba aprender a hacerlo, y si lo hacías en menos de unos segundos, entonces recibías la aprobación del alfa y no había nada más agradable que eso.

El lobo de los ojos amarillos | [Libro 1] (EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now