Capítulo 25 (Sin Editar)

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-Ellie... -la voz de Leila acabo con el incomodo silencio que se había formado en el lugar.

Ellie no dejaba de ver la expresión molesta de Will y la confusión de su pequeño, pero debía reaccionar de inmediato porque sino todo se iría a la basura.

-Leila -dijo algo nerviosa -. ¿Acaso no recuerdas a Adam, nuestro amigo del hogar de acogida donde estuvimos?

Leila se puso pálida y fruncio el ceño.

-¿Adam? -preguntó confundida. Ellie temió que no hubiese entendido la idea -. ¡Oh por Dios! Pero mirate nada más -la ojiverde corrió a abrazar a Gabe para de esa manera esconder su expresión de pánico ante Will.

-Hola Leila -Gabe la abrazó con mucha fuerza y Leila sonrió animada.

Chris se escondió detrás de Will y este tomó posición sobre protectora con el pequeño.

-Chris cariño, todo esta bien -le aseguró Ellie -. Ellos son unos amigos de mamá y de tía Leila.

El niño se acercó a Ellie con paso inseguro y le susurro al oído.

-¿Por qué ese señor te estaba abrazando?

-Porque es mi amigo y tenía muchos años de no verlo -respondió Ellie con el mismo método del niño.

-Hola Chris -Liam se acercó al pequeño y este de inmediato le sonrió. Viendo detenidamente a Chris y Liam juntos, habían muchas similitudes entre ambos, misma tonalidad de cabello, mismo color de ojos, la nariz pequeña y ancha, la forma en la que se ambos se paraban, tenían gestos muy parecidos. Ellie agradecía a los dioses que su hijo se pareciera más a Liam que al demonio de su padre.

-Hola señor.

-Ellie -la voz de William volvió a captar su atención. El hombre estaba inmóvil y su mirada oscura era dura y severa.

-Will, estaba preocupada por ti, desapareciste -Ellie se le acercó y este no hizo más que estudiarla con detenimiento.

-Tuve que arreglar unos asuntos -se limitó a responder -. Parece que estas ocupada en este momento, volveré luego, necesitamos hablar -Will se despidió con un beso en la frente de la joven -. Nos vemos Súper Man -se despidió de Chris, quien corrió a los brazos de Will a despedirse.

Ellie se quedó con la boca abierta al escuchar las palabras de su novio y de pronto comenzó a tener lo peor.

Dejó que Will se marchara por el momento, ya que no podía resolver todos sus problemas de una sola vez.

Algo grave había sucedido, de eso no tenía duda alguna, ya que la actitud de William no era así.

-Dale un poco de espacio -la voz de Leila la sacó del trance en el que se encontraba.

-Algo extraño esta pasando Leila -susurró con la voz entrecortada.

-¿Que puede ser más extraño que ver a tu novia abrazando muy cómodamente a un tipo super sexy?

-¿Quien eres tu?-la pregunta de Chris iba dirigida a Gabe, quien observaba al pequeño rubio como si fuera un ser divino.

-Hola amiguito -Gabe se agacho hasta la altura del niño y sus ojos se llenaron de lágrimas.

Ellie tuvo que armarse de valor para no llorar frente a su hijo.

...Soy Adam, un viejo amigo de tu madre -el joven le extendió la mano a Chris para saludarlo. El pequeño respondió al gesto.

-Hola Adam, mi mamá nunca me hablo de ti -Chris se volteo a verla y Ellie comprendió la mirada de inmediato. El chico quería que le contara de inicio a fin todo acerca de Gabe, alias "Adam".

Una Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora