Infiltrada [EN EDICIÓN]

Capítulo 22: "Carl."

—Bueno, como pudieron ver en la cartilla ustedes son las cinco elegidas para ser parte del equipo de porristas —hablaba Dani con las nuevas integrantes y nosotras estábamos sentadas en una de las gradas haciendo acto de presencia—. La explicación de porque son cinco y no tres como se había predicho se la dará mi compañera Cristina Ferrer.

Cris se puso de pie mientras Dani, por el contrario, se sentaba junto a nosotras.

Estábamos reunidas en la cancha de básquet, siendo la primera hora donde teníamos el permiso de pasarla y estar aquí, Bruno se ofreció a traernos a todas esta mañana y con la idea de saber por Stephy aceptamos, luego Yuko pasaría por su auto a mi casa o tal vez se lo mandaría con Brayden.

— ¿Sabes algo de tu prima? —preguntó abruptamente Dani desde la parte de atrás del auto ganándose una mirada de alerta por parte de todas.

—No mucho, sé que se fue de viaje junto las hermanas Collins después de un altercado que tuvieron, mis tíos solo se encargan de llenarle la cuenta bancaria y ya, no son un buen modelo de padres a seguir —respondió mirando a los lados de la intersección para poder dar vuelta.

—Entonces no sabes nada —respondió un poco desilusionada Yuko.

—No, lo último que supe es que fueron a Latinoamérica, si no me equivoco, se fueron a Colombia.

— ¿Tan lejos? —inquirió asombrada Dani.

—No es un viaje que no podamos costear —respondió intrigado por su asombro mirándola por el retrovisor.

Si bien es un viaje que mis padres podrían darme, pero no lo harían a unos meses de graduarme haciéndome perder el año. Además, Dani no tiene los mismos lujos que nosotros, es algo lógico que se asombre con cosas así.

Cris prefirió cambiar de tema y así seguimos el resto del camino hablando de cosas sin importancia realmente. Al llegar, Bruno se despidió de mí con un "Te veo pronto, cariño" provocando me mis mejillas se tornaran de un color carmesí por la presencia de ellas y el sonidito que hicieron.

Las mofas y burlas no tardaron en llegar por lo sucedido pero decidieron centrarse más en dar una bienvenida a las elegidas.

Por esa razón, estamos aquí explicando cada detalle del proyecto PSG y como nos desenvolveremos al respecto, dormir en el sillón a las cuatro de la mañana no fue una buena idea ya que me duele el cuerpo por la mala posición más la cara de sueño que ni el maquillaje puede ocultar, tengo entre mis manos una vaso de café bien cargado para lidiar con esto sin quedarme dormida en el intento.

—Entonces, en las prácticas estaremos todas, pero sólo practicaremos con Sophia, Carly y Rachel mientras las demás observaran para prepararse en su próximo año y también podrán acotar algo si lo ven necesario o incluso practicar de vez en cuando con nosotras algunas rutinas —explicaba Cris bajo la mirada atenta de cada una de ellas—. Creo que sería conveniente que nos presentemos sin tanta formalidad, para conocernos mejor y así gastar los últimos quince minutos que quedan antes de regresar a clases.

—Mi nombre es Rachel Dorman, tengo 16 y me gusta mucho poder ser parte del grupo —habló poniéndose de pie una chica de cabellos negros ondulados, ella sería la más baja del grupo, pero decidimos integrarla porque es muy buena en esto y no podemos negárselo solo por ser pequeña. Sus ojos eran increíblemente grises, era una perfecta combinación con su tono de cabello y su tez blanca.

—Quiero empezar diciendo que me alegra muchísimo estar aquí presente y ser parte de este equipo —sonrió muy dulce, su cabello era largo hasta llegar a sus caderas las cuales eran muy favorecedoras, con un corte escalonado que formaba aún más sus ondas y lo que más me gustaba de él era su tono pelirrojo natural. Tiene ojos verdes y varias pequitas esparcidas por sus mejillas—. Mi nombre es Rosee Grayson y tengo 17 años.