CAPITULO 36
- Tenemos que hablar - sentenció Katniss entrando a la habitación sin esperar a ser invitada.
- Supongo que sí - murmuró Peeta cerrando la puerta tras ella - ¿Quieres beber algo? - ofreció
- No, gracias - declinó ella - ¿Qué significa esto, Peeta? - dijo soltando el sobre encima de la mesa
- Imagino que ya lo has visto
- ¿Estás donando tus acciones a la fundación?
- Sí - asintió
- Pues no las acepto - refutó incómoda - No sé a dónde pretendes llegar con esto pero no me interesa
- No vas a rechazarlas
- Desde luego que sí. ¿Crees que me manipularás con ello?
- ¿Que te manipularé para qué?
- No sé - reconoció embarazosa - Para lo que sea que pretendas
- No lo entiendes, Kat. No voy a permitir que unas estúpidas acciones nos separen.
- No nos hemos separado por unas estúpidas acciones - le corrigió molesta - Nos hemos separado porque me traicionaste, me mentiste, me utilizaste.
- No es verdad. Puedo explicarlo, pero nunca me creerás mientras pienses que para mí Everdeen es más importante que tú.
Le observó desafiante sopesando sus palabras.
- Te amo, Katniss - confesó él con ternura - Te amo y tú eres lo único que me importa. Sé que tal vez debí hablarte sobre la existencia de esos documentos, pero te juro que no sabía que Brutus aún los tuviera.
- Llevaban tu firma, Peeta - dijo irónica
- Lo sé, cielo. Los firmé, es verdad. Pero los firmé el verano pasado, cuando tú te dejaste ver con Ateara, Brutus hizo que los redactaran y los firmamos. En aquel momento no creí que te importara
- ¿No creíste que me importara que me quitaran lo que me pertenecía?
- En aquel momento, no. Y ambos sabemos que no puedes culparme por eso. Era lo que tú pretendías. Que creyéramos que no te importaba Everdeen. Firmamos la compra y Brutus guardó los documentos para hacértelos llegar. Pero tú desapareciste, no hubo más portadas y simplemente los olvidé. Luego sobrevino el accidente de tu padre y todo lo que sucedió después ya lo sabes. Nunca volví a pensar en esos documentos. Simplemente olvidé su existencia, aunque parece ser que Brutus sí los había guardado.
- ¿Por qué nunca me dijiste que los habías firmado? - preguntó escéptica
- No lo sé, cariño. Debí decírtelo, lo sé, pero te juro que simplemente no lo pensé. Tienes que creerme, Katniss. - rogó acercándose a ella
Katniss retrocedió un paso y Peeta detuvo su avance.
- ¿Por qué le dejas tus acciones a la fundación?
- Pensé que podría venderlas, pero luego me di cuenta que sería una tontería. Everdeen da buenos beneficios, tú lo sabes. Una vez me dijiste que la fundación estaba abierta a donaciones, así que ¿por qué no hacerle una donación que le dará buenos réditos?
- ¿Lo sabe Brutus?
- Sí - dijo acercándose a ella con lentitud
- ¿Qué le ha parecido?
ESTÁS LEYENDO
La heredera
FanfictionEl último escándalo de la heredera. Esa última portada sería el comienzo. ¿Qué iba a hacer él con una niña problemática y caprichosa?¿ Qué iba a hacer ella con ese hombre serio, arrogante y autoritario? Drogas, alcohol, sexo desenfrenado e irrespons...