-Mia... -dijo y dio un paso hacia ella, pero esta retrocedió.
-No te me acerques -le advirtió. Zayn los observó en silencio, tratando de entender quien era ese tipo -¿Qué haces aquí?
-Volví, encanto -respondió -Me di cuenta de que hice todo mal y volví por ti.
-Eres un cínico -aseguró ella sin poder creerlo.
-He hablado con tu abuelo, y me ha contado todo lo que ha pasado en estos meses que no estuve -miró hacia su vientre.
Mia se llevó las manos a la panza, horrorizada. Se sentía mareada y amenazada. ¿Qué demonios hacía él allí? Jamás se imaginó que iba a encontrarse a su ex en la puerta de la casa del hombre que la confundía tanto.
Estaba aturdida... ver a Adam era como revivir la noche en la que él la había llamado y le había roto el corazón por teléfono.
Su corazón latía rápido, demasiado. Ella había amado a ese hombre, y hubiese dado todo por él. pero ahora nada quedaba de ese amor, y eso, en cierto modo, la lastimaba.
-¿Por qué volviste? -quiso saber -¿Se te terminó el dinero y pensaste que tal vez yo, la tonta Mia, iba a dártelo? Quiero que sepas, Adam, ya no soy heredera de nada.
-Ya te lo dije, preciosa -sonrió -Volví por ti.
-Eres un enfermo -dijo Mia en un susurro.
-Mia, linda -comenzó a hablar él con calma. No había intentado acercarse a ella de nuevo - Sé por todo lo que has tenido que pasar desde que me fui...
-No, no tienes ni idea -le aseguró ella.
-Estoy realmente arrepentido -dijo con toda seriedad. Mia tenía muchas ganas de llorar, él no comprendía el dolor que le había causado -Por eso mismo, mi amor, estoy dispuesto a retomar lo nuestro -volvió a mirar su vientre -Yo puedo hacerme cargo de ese bebé, no me importa si no tiene mi sangre -ella lo miró con los ojos bien abiertos -Todo el mundo va a creer que sí es mío. Salvaré tu herencia, volverás a tus comodidades, a tu verdadera vida...
Zayn, que hacía unos varios instantes había entendido quien era el castaño, pero se había mantenido en silencio solo para ver hasta donde llegaba, comenzó a ver todo rojo y la sangre le empezó a recorrer las venas con más fuerza.
-Eres un infeliz, Adam -le aseguró Mia con las lágrimas a punto de resbalar de sus ojos.
Adam se iba a acercar a ella, pero sintió un par de dedos tocando su hombro. Al darse vuelta, solo fue consciente del gran puño que aterrizó en medio de su rostro.
-¡No! -exclamó Mia horrorizada. Perrie salió al escuchar el alboroto, y se encontró con su novio encima de un hombre.
-¡Ya para, Zayn! -trató de detenerlo, pero era casi imposible, parecía poseído.
Zayn tomó a Adam de la ropa y lo puso de pie. Adam logró soltarse y retrocedió unos pasos. Y justo cuando Zayn iba a arremeter de nuevo contra él, Mia se puso en su camino.
-Basta, por favor -le pidió angustiada.
Zayn la miró agitado, su pecho subía y bajaba por la rabia que lo consumía. Dirigió su vista a Adam, que se refugiaba detrás de la morena.
-¡Hijo de puta, tú no vas a hacerte cargo de mi hija! -le gritó.
Adam se tocó el labio y luego miró sus dedos para encontrar un poco de su propia sangre allí. Sonrió levemente.
-Con que tú eres el padre... -miró a Mia -Mi amor, te hacía de mejores gustos.
Zayn iba a lanzarse de nuevo hacia él, pero Perrie lo sostenía de la cintura y Mia seguía frente a él.
-No más, Zayn -murmuró la morena - Adam... vamos a hablar a otro lugar.
-¡No! -gruñó el moreno.
Adam se acomodó el saco y paró erguidamente, para luego acercarse a las escaleras y comenzar a bajarlas.
-Yo estaré adentro -informó Perrie y desapareció.
Mia levantó la vista hacia Zayn, sintiéndose mucho peor que cuando había llegado y se había encontrado a Adam ahí. Ninguno dijo nada, hasta que ella decidió hablar.
-No tuviste que haber hecho eso -le dijo.
-Él no va a hacerse cargo de mi hija, Mia, ¿escuchaste? -dijo apretando los dientes.
Ella rió quedamente, fue lo único que pudo hacer... era eso o largarse a llorar como una estúpida.
-Se nota que no me conoces -meneó la cabeza decepcionada. Sus palabras la lastimaron, porque ella jamás sería capaz de hacer una cosa así.
-Puedes hacer lo que quieras con él, pero que no se meta con mi hija...
-Yo sé que hacer con la vida de mi bebé, Zayn -aseguró clavándole la mirada decidida, aunque se estaba desmoronando por dentro -Y sé perfectamente que hacer con la mía... ¿Tú sabes que hacer con la tuya? -Zayn no respondió nada -Eso me imaginaba, Zayn.
Él observó como ella se iba, y tuvo muchas ganas de romper todo. Decididamente las cosas entre ellos jamás podrían estar del todo bien, siempre iba a haber algún problema. Y la verdad era que no estaba seguro de poder con eso.
Ingresó a su casa y cerró la puerta con fuerza. Perrie estaba sentada en uno de los sillones, y lo miró de manera inquisidora.
-Perrie -la llamó.
-¿Qué? -preguntó ella.
-Acepto casarme contigo.
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Mucho drama lol
en la próxima semana voy a estar bastante ausente por un problema de salud de mi abuela :(
les pido por favor que no presionen para subir ;-;
Apenas pueda lo haré, lo juro <3
Nos leemos luego xx.
