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—Por supuesto que estará controlado. Directora no seré una mala influencia...

La Directora sonrio —No digo que lo seas, por dios Anne eres la mejor que tenemos y lamento la partida de Bieber. Aunque se que ese muchacho no seguiría en esta carrera lamento la perdida, era uno de los mejores y lamentaría que te fueras, pero no le hace mucho bien los escándalos de este tipo a mi academia, el chico es famoso y...

•No debe preocuparse, su familia contendrá todo el chismorreo, ni siquiera Jasmine los dejará mal, es un poco escalofriante pero ellos tienen los medios para apagar un incendio si es necesario ¿Me entiende?

—Perfectamente. —contesto ella. —ahora ve a dormir.

¿Quizás resultara un problema fingir un embarazo después de todo? ¿Valía la pena perder clases por esto? ¿Vale la pena Anne?

Dios si que valía la pena perder clases por él, era bobo pero si quería que todos pensaran que estaba embarazada no podía seguir tomando las clases de baile, si lo estuviera no las tomaría eran demasiado exigentes, ¿Qué hacer?

Pero ya pensaría en eso después, ahora necesitaba descansar, se detuvo en seco cuando noto la ligereza, sentía el cuerpo liguero, sentía que el enorme peso la presión en su pecho ya no existía, ¿Cuándo sucedió? Lo sabia, cuando lo beso, toda la tristeza y melancolía la abandono, se sentía en libertad, florecía, dios estaba salpicando la miel.

—¿Qué tienes Anne? ¿Te ves rara... algo feliz?

—Si Dylan, me siento feliz, eso me pasa.

—¿Por qué? ¿Por qué estas feliz? Tu vida es un caos... Anne tu vida es un asco, estas embarazada de ese idiota que dejo preñada a la tipa esa de segundo o tercero o no se, y ese es un cretino que escapo del fuego ¿Por qué estas feliz? Tienes la mierda hasta el cuello tu deberías...

—Oh Dylan cállate. —bufe molesta —tu no sabes nada, Justin no es un idiota ni un cobarde y esa miente, Justin no es el padre de su hijo, él esta trabajando, y tu deberías meterte en tus asuntos.

—Sabes Anne. —contesto el mirandola despectivamente —eres igual que todo el resto de las chicas, caíste igual que todas.

—Es imposible no caer Dylan, él es maravilloso.

—Oh por favor no me vengas con babosadas ¿Qué tiene de magnifico ese? ¿Te lo digo? Tiene dinero, tiene mucho dinero, y ya es famoso, el mejor gancho para las chicas de aquí y yo creí que tú eras diferente Anne.

—Hablas mal de mí si sugieres que me interesa el dinero Dylan ¿Quieres saber cual es mi interés? Me divierto y es tan condenadamente perfeccionista como yo, es inteligente y honesto, es tolerante, ingenioso, y tiene carácter, es valiente, un poco egocéntrico quizás pero no me molesta.

—Si claro por eso te fijaste en él. —bufo el.

Estaba hartándome, toda la felicidad que sentia empezaba esfumarse, pero no se dejaria —¿Oí sarcasmo Dylan? Pero tienes razón, por eso me gusta, pero me fije en ese delicioso trasero que tiene, esa espalda ancha y hombros que dan ganas de morder, y esa sonrisa de diablo...

—No tienes remedio chica.

Si quería fastidiarla no lo consiguió, solo la provoco, la éxito, no Dylan sino sus pensamientos respecto a Justin, ¿Por qué debía sufrir? ¿Por qué debía privarse de él? La otra tipa no estaba embarazada de Justin, no había pecado si ella, era normal en una relación de gente adulta que, ¿Por qué debía someter su relación a este estrés? Entro al cuarto y se quedo mirando el vacio, pensó.

—¿Qué tienes Anne? —pregunto Sophia con una media sonrisa pintada en su rostro.

Ella miro a la chica que estaba sentada en su cama con un libro en las manos, Mackenzie estaba dormida pero sobre la cama y en ese momento salía Taylor que secaba su melena rubia.

—Estoy... hecha un lio.

—¿Por qué estas hecha un lio? —pregunto Taylor.

—¿Qué paso con Justin? —hablo Sophia dejando su libro a un lado.

Taylor se quedo mirandola esperando su respuesta. —No me digas que le dijiste la verdad ¿Anne?

—No, no le dije... no es eso... solo hablamos, lo bese cuando me trajo, no pude evitarlo.

—Se quieren, eso es normal... ¿Eso te confunde? —dijo Sophia.

—Yo creí que él no me quería...

Taylor bufo irritada —Ya acordamos que si te quiere Anne, no empieces otra vez.

—Tampoco es eso, yo pensaba que, no es justo que él y yo... intentemos salvar una relación que nunca empezó, digo es pedir...

—Hay por favor Anne eso es bobo. —murmuro Sophia.

—Ustedes dicen que me quiere y que yo lo quiero pero... ¿Qué quiere? Solo pasamos dos días juntos y se formo un caos, nos hemos odiado toda la vida y eso pesa mas.

—Se han peleado desde siempre y no odiado, se peleaban por que se sentían atraídos y él te ha querido siempre... pero tienes razón. Sophia dame tu teléfono.

Sophia y ella se quedaron mirando a Taylor mientras ella esperaba que contestaran su llamada, luego hablaba con Chaz, por lo menos decía Chaz cada tanto, y parecía hablar en clave, además le ordenaba que se fuera inmediatamente a casa de sus padres, parecía, agresiva.

—¿Le gritabas a Chaz, Tay?

—Bueno Sophia el no quería hacer caso, Anne dame tu teléfono, vamos chica ahora.

Ahora ella tecleaba en su móvil y sonreía, y daba miedo, pero algo le decía que la chica la estaba ayudando.

Taylor levanto la cabeza y le lanzo el movil con una sonrisa maliciosa en la cara —Listo.

Acéptalo, Eres mía.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora