Acéptalo, Eres mía.

27

Justin.

Ella era una obra de arte, le gustaba su piel, suave y trigueña, sus pies finos y delicados, y esas piernas larguísimas y torneadas, dios quería lamerlas, aunque no le extrañaba por que la saborearía entera durante horas, su barriga con ese arete le daba escalofríos de placer, deseaba poner su lengua ahí.
La playera fue una pésima elección, estaba más deliciosa con ella, le daban unas tremendas ganas de arrancársela, su boca, sus labios inflamados gracias a esos profundos y brutales besos de pasión, estos se movieron. Levanto un poco mas la mirada para ver esos ojos cafés mirarlo con diversión, ella no sonreía pero sus ojos si.

—Deja de mirarme como un lobo hambriento... Espera un momento... ¡Estoy vestida! ¿Por qué estoy vestida? —pregunto alzando la voz.

—No podía verte desnuda...

•Oh dios... No me mires. —contesto.

Su rostro estaba mostrando todas sus emociones, se veía vulnerable, y en ese momento sus ojos se pusieron tristes, se llenaron de lágrimas mientras cubría su rostro y todo su cuerpo temblaba.

—No Anne. —hable acercandome a ella —No podía verte desnuda por que me vuelve loco, yo te deseo demasiado y no te dejaría descansar, Yo... eres tan hermosa que solo pensarlo mi cuerpo reacciona, yo quiero cuidarte.

Ella bajo las manos y lo miro a los ojos igual que un cachorrito abandonado bajo la lluvia, su labio inferior temblaba y cuando pestañeo una lagrima bajo por su rostro, como un pequeño diamante, estiro su mano y retiro la lagrima con el pulgar.

—¿No mientes? Justin si estas jugando conmigo Yo... dios dime que no lo estas...

—Nunca, nunca jugaría contigo —la interrumpí —Anne ya te lo dije...

—¿Qué cosa? Tú dijiste que me deseabas...

—Y lo hago pero no hablo de eso. —conteste.

—¿Qué? Tu dijiste que... dijiste... que estabas... estabas en...

—Enamorado, enamorado Anne, y si lo estoy... pero ahora estoy preocupado.

—¿Por qué? ¿No querías...? —dijo ella señalando la cama.

—Si dijera que no quería seria el peor de los mentirosos, no es eso, Yo... fui descuidado Anne.

—¿Descuidado? ¿Con que? No comprendo... esto es tan extraño...

—Ven aquí.

Le estiro los brazos y ella vino hasta él inmediatamente, eso le hacia hinchar el corazón, que ella viniera a él asi, de la forma mas simple. La abrazo fuerte y la sintió temblar, Ella necesitaba de todo su cariño, de su ternura, ella lo necesitaba. Lentamente la tumbo y se estiro a su lado bien abrazados, sabia que no podía estar asi mucho tiempo porque podría entrar alguien, no es que le importara que se supiera que estaban juntos pero no permitiría que nadie los viera así, no así, dios debía ser honesto con ella.

—Soy un bruto —hable tratando de tranquilizarla —yo no te cuide como debía, yo me descuide pero es que si te tengo en mis brazos no puedo pensar, simplemente no puedo.

—¿De qué estás hablando? —pregunto mirándome a los ojos frunciendo el ceño.

Cerre los ojos y trata de sonar normal —Podrías estar embarazada Anne.

La sintió tensarse y prácticamente salto, estuvo sentada en dos segundos, y lo miro con cara de horror, lo miro sin verlo y luego lo fulmino con la mirada, odiaba que lo mirase así, se sentó y quedaron frente a frente, espero hasta que ella decidió hablar.

—Y si es así ¿Qué pasa Justin? —pregunto.

—Es complicado... Todo es complicado...

—No voy a hacer nada para evitarlo si es lo que me vas a proponer... Yo no haría...

—Y yo jamás te pediría algo asi, ¡Anne dios! —casi grite, jamas pensaría en ello —No te pediría una cosa así... ¿Qué crees que soy? ¿Un monstruo? También seria mi hijo.

—Lo siento Yo... los chicos... estoy...

—Ok... Solo... esta bien, Estas nerviosa, pero Anne yo no seria capas ni de pensarlo, y francamente un hijo tuyo que también sea mío, Es lindo, se siente bien, que mis hijos sean tus hijos es perfecto para mi.

Anne.

—¿Si lo estuviera Justin que harías? —pregunte esperando su respuesta.

Contuvo el aliento mientras él pensaba en su respuesta, estaba mas nerviosa que antes, cuando él estaba sobre ella, él no podía fallarle, si le fallaba demostraría que todo lo que dijo antes era falso. Que solo quería... El no podía haber mentido, él no podía hacer esas cosas solo por, pero Anne estamos hablando de Justin Bieber, el chico sin compromisos, se reprendió por ese pensamiento por que hasta ahora él no le había fallado. Bueno desde que se besaron él no.
Aún no podía soltar el aliento y sabia que su mirada debía ser desesperada pero él no la miraba, estaba mirando la puerta, Oh dios

¡Responde de una vez!

Él se volteo para mirarla y la miro directamente a los ojos —Creo que podría hacerme cargo mientras tú estés de gira...

—¿Qué?

¿Qué? ¿De que demonios estaba hablando? Es que ya se había vuelto loco o solo quería aparentar demencia.