Capítulo 21

4.3K 296 17
                                    

La semana numero 18 llegó más rápido de lo que ellos pudieron contar.

Estaban casi terminando en cuarto mes de embarazo y listos para entrar al quinto. Según el beta, los cachorros estaban saludables, fuertes y creciendo de una manera sana y optima.

La cita había sido un poco más interesante que la última ya que estaba vez no fueron cuatro alfas y un omega.

Eran seis alfas y un omega.

Si.

Louis había ido acompañado de su alfa, Harry. Sus tres cachorros, Alexander, Axel y Ax. Y sus suegros; Anne y Desmond.

Así que no hubo cuatro gruñidos sino más bien seis, sin embargo, el beta solo se reía de la situación. No le molesto el haber sido prácticamente intimidado por la casta superior, es más, parecía muy feliz con aquella aura protectora y llena de amor que proyectaba la familia Styles-Tomlinson.

—Tengo tu expediente completo, Rafael Johnson — El alfa más viejo le había dicho —Y espero que cumplas con las expectativas de las cuales he leído — Desmond lo miró inexpresivamente, con sus orbes verdes fríos e intimidantes.

—Yo también lo espero señor Styles — El beta rió moviendo el transductor sobre el pancita del omega —Aquí vamos — Murmuró antes de dejar que los sonidos de los corazones de los cachorros resonaran por el lugar.

—Oh dios — La alfa chilló —¡Desmond escúchalos! — Sollozó sujetando el brazo de su alfa —Tan bonitos — Murmuró enternecida.

Harry miró a su mamá con los ojos relucientes y le guiño a sus cachorros, quienes tenían la mirada puesta en la barriguita de Louis, completamente embobados.

—Los escucho, alfa — Desmond besó a Anne con delicadeza —Están perfectos.

—Obviamente — Harry se pavoneó orgulloso —Yo los hice — Declaró emocionado.

—Asco — Dijeron los cachorros con una mueca.

—¡No te hemos dicho que lo saques! — Gruñó Desmond cuando el beta quitó el sonido de corazón de los cachorros no nacidos.

Harry se carcajeó cuando vio a su padre refunfuñar y escuchó las burlas estúpidas de sus hijos hacia el abuelo que se estaba volviendo "blando"

Y sí.

Todo había ido excelente.

Solo había un pequeño y muy minúsculo detalle que había comenzado a ser visible en la casa.

Louis.

El pequeño y bonito omega, aquella cosita tierna y pequeña, estaba siendo preso de los antojos, las hormonas y los cambios de humor. La sensibilidad le había golpeado casi de un día para otro, su pancita ya notoria era lo más lindo de todo, sin embargo, Louis solía llorar muy seguido por ella.

Como ahora.

El fin de semana había sido mucho más cómodo para todos.

Ax se levantó perezoso antes de saludar a su papi Lou, quien estaba cocinando mientras tarareaba una canción.

—Buenos días — Le dijo sonriendo y besando su mejilla —¡Vaya! — Lo miró lleno de brillito —Esta tan grande esta pancita, ¡Mira como crecen! — Alabó feliz, con sus dos manos sobre la pancita del omega.

Louis lo miró estupefacto, sus ojos azules recorriendo desde los ojos de su hijo hasta su propio estómago y entonces comenzó a hacer un pequeño puchero, sus ojitos llenos de lágrimas y los hipos salieron casi al instante.

—¡¿Qué pasa?! — Se alarmó el menor chillando lleno de miedo —¡¿Papi Lou?!

—¡Estoy gordo y feo! — Sollozó lleno inseguridad haciendo que su hijo se paralizara.

Viviendo entre alfas (Larry Stylinson)Where stories live. Discover now