¿Quién no conoce a Possessed?
La banda de punk más aclamada de Cleveland. Sus tres integrantes no se han hecho famosos sólo por sus rebeldes letras, sino por los escándalos que desencadenan allá donde van. Son incluso peores que los jodidos Mötley C...
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Want you bad - The Offspring
Cassandra.
Regresar a Cleveland había sido bastante duro.
Los pocos días que había pasado junto a Jax en Italia, habían sido mágicos y ahora, me tenía que acostumbrar de nuevo a su ausencia.
— Te envidio — soltó Tom desde detrás del mostrador —, tienes la piel demasiado iluminada. ¿Cuántos polvos has echado en Italia?
— Siempre pensando en lo mismo... — tomé la bandeja para continuar sirviendo mesas, pero antes, le conté a mi amigo la novedad — ¿Sabes que es lo más asombroso? Que estás ante la novia de Jax Rockwell.
— Me caigo muerta — exageró tocándose la frente — ¿Has tenido que esperar a verme para contármelo? ¿No podías haber cambiado la felicitación de año? "Feliz año Tom, estoy de novia con el tío más caliente del planeta", hubiera estado bien.
— Entonces no hubiera podido ver tu cara.
— ¿Me he perdido algo? — Dave había aparecido por la puerta y no me había dado cuenta de su presencia hasta ahora.
— Felicita a Cassandra, que tiene un pie en el altar — anunció Tom, provocando que rodara los ojos.
— ¿Te vas a casar? — el ceño fruncido de Dave me hizo gracia.
— No entiendo cómo crees algo que venga de la boca de Tom — el susodicho soltó un quejido —, Jax y yo hemos formalizado nuestra relación, eso es todo.
— Enhorabuena, Cass.
Se marchó para sentarse en la misma mesa de siempre. Su felicitación no me había resultado muy sincera, pero intenté ignorar aquel pequeño detalle; sólo hasta que Tom decidió sacar el tema.
— Está celoso — sentenció.
— No lo creo, él sabe de sobra que somos amigos y cuál era mi situación con Jax.
— ¡Cassandra! ¡Tom! ¿Para esto os pago? — nuestro jefe apareció provocándonos un micro infarto —. Dejaros ya te tanto cotilleo, sino voy a tener que cambiar vuestros horarios para que no coincidáis.
— Será mejor que continue sirviendo mesas — le dije a Tom.
— Se nota que no ha echado un polvo desde que su mujer le dejó — habló en voz baja para que no le escuchara.
— No entiendo cómo te enteras de todos los cotilleos.
Pasaron las horas en la cafetería y justo cuando mi turno estaba a punto de finalizar, revisé mi teléfono para encontrarme un mensaje de un número desconocido.
Número Desconocido: Hola Cassandra, soy Bridget.
Estoy en la ciudad para arreglar unos temas y me gustaría que nos viéramos para hablar.
