ONE-SHOT DE FAMOSAS - II (Historias Cortas)

Ana de Armas 2/2

ANA

Después de pasar una semana intensa de trabajo, por fin creí a ver tenido mis merecidas vacaciones bueno al menos el finde semana, pero a mi hermana se le a ocurrido de asistir a una fiesta de disfraces. Solo podremos ir las dos ya que a Yon no va poder asistir por la lesión que tuvo en el pie en el trabajo. Termine de ducharme y en cinco minutos ya estaba lista. Me puse el primer disfraz que encontré en mi closet, espero llegar a dormir temprano y no amanecer con unas ojeras horribles.

Me asomé un poco por la puerta al ver pasar a Yon, me imaginó que iba a la sala.

—Pero que ven mis ojos— comento Yon desde la sala— Veo a una Supergirl hermosa ¿Dónde está Ana?

—Todavía se sigue alistando, pero nada que se apura y ya son las diez.

—Ya sabes como es...— dijo burlón— Es lenta para arreglarse

—Te escuché— digo saliendo llegando a la sala— Ya vamonos Carol, porque sino me arrepentire de ir a esa a fiesta.

—Pero si están preciosas— se acerco y nos beso la frente— Espero se diviertan mucho y no lleguen tarde.

Me aleje un poco de el, buscando mi bolso con mis cosas, el era mi mejor amigo de toda la vida, ahora se a mudado con nosotras aquí en New York por cuestiones de trabajo y de poder empezar una vida, lejos de la chica que le rompió el corazón, ahora se convirtió en mi roomie, y mi mejor amigo de toda la vida.

—Ya tenemos que irnos.

—Detengan a los malos— dijo entre risas.

—Muy malo tú chiste...

—Qué les vayan bien y anden con cuidado.

—Si papá— digo con sarcasmos.

Salimos del apartamento rápidamente, mi hermana le toco conducir esta vez a la dichosa fiesta porque yo no tenia ni idea donde era. Duramos como treinta minutos de camino a la fiesta, llegamos a una casa que parecía cabaña y era extremadamente lujosa, dimos nuestros brazaletes y registramos nuestros nombre y entramos a la fiesta.

—¿Quien hace fiesta de disfraces en pleno julio?— pregunto pasando entre la multitud de gente— Ni estamos en halloween todavía.

—¡Bueno era para ponerle sasón a la fiesta!

—Si claro— llegamos a la barra y pedi mi bebida, la gente que disfrutaba de la fiesta, pero algo me dice que esta fiesta no acabará hoy.

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Pasaron horas y la fiesta seguía la mayoría ya tenia el extasis del alcohol en su organismo que disfrutaban a más no poder, gente teniendo sexo en los baños y habitaciones, otros besandose debajo de las escaleras y piscina, unos que otros bailando y bebiendo. Grecia se acerco a la barra para pedir otro trago más y buscar con la mirada a sus amigos, que minutos atrás cada quien habían desaparecido y su hermana peor, se había ido quien sabe donde. Apostaba que estaba en algún rincón de su casa besándose a algún chico y sonrió por eso.

—Al menos alguien en esta fiesta está feliz— dijo una voz atrás suyo— Tranquila que no muerdo.

—Y yo que me había ilusionando— sonrio haciendo que la chica se sonroje— ¿Que tengo que hacer para que mujer maravilla este feliz?

Pregunto coqueta.

—Una Batwoman al parecer— comento guiñando- ¿Bailamos esta canción?

Grecia sonrió en grande y acepto irse a bailar con la chic misteriosa olvidándose por completo de la bebida. Lo que importaba para ella era solo divertirse esa noche, ambas chicas no se conocían o bueno eso creían ellas. Con cada canción sus cuerpos se pegando más y más, creando una tensión sexual, se miraban como si no hubiese más a su alrededor es como si todo hubiera desaparecido y solo existieran ellas, se veían con deseo, pasión, complicidad y quizás hasta un poco de cariño, un par de canciones más y ya no había distancia que las separe.