El secreto de Cignus [Terminado✅️]

Capítulo 4

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Descubrimiento casualmente escrito.

Amanda y Simone caminan con destino a la entrada del bosque de Metis, cinco chicos se encuentran hablando junto a un árbol que parece estar retorcido y uno al lado del otro crean un arco que parece una puerta, Simone no ha dejado de hablar desde hace diez minutos, Amanda, sigue sin comprender como la ha soportado tanto tiempo.

Simone, al parecer ignora la irritabilidad de Amanda, Simone es una chica sociable, extrovertida, ocurrente y muy curiosa, siendo Amanda todo lo contrario, estando la una junto a la otra, hacen un raro contraste, la imperturbabilidad de Amanda junto a la alegría de Simone.

Llegan hasta donde están los cinco chicos, siendo Simone la que habla.

—Ella es Amanda Mayorm. —anuncia con entusiasmo, haciendo que los cinco vean con curiosidad a la chica que acompaña a Simone.

«¿Cómo supo mi apellido?» Se pregunta Amanda.

—Tommy. —le extiende la mano un chico alto de tes oscura, con sonrisa afable.

Cada amigo de Simone se presenta ante Amanda, mostrándole cordialidad, y pensar que hace dos días apenas se percataba de las personas, ahora gracias al tropezón con Simone, conoce a, Tommy, Ashley, Maximilian, Gabriele y Lucania.

No comprende como es que, en dos años no ha hablado con nadie que no sea su madre o su padre, pero en menos de dos días ha conocido a seis personas con las cuales no tiene ni el más mínimo interés de seguir conociéndolas.

—Deberíamos ir a la fiesta.

Pidió Amanda luego de las presentaciones, es tan obvio en su actitud que detesta el hecho de estar en ese lugar, pero le dio su palabra a Simone, y piensa cumplirla, para ella su palabra tiene mucho peso, una promesa para Amanda es ley, si lo dice lo cumple, así es Amanda.

Todos siguen a Simone, dentro de su grupo, ella es la organizadora de las fiestas, y cada uno colabora para que puedan realizarse, Amanda de cerca sigue los pasos de Simone, manteniendo la distancia con los demás, estar con muchas personas le pone ansiosa.

Llegan al sitio el cual es iluminado gracias a la fogata presente al centro, luces colgadas en los arboles da más iluminación, haciendo parecer al bosque como si fuese mágico, todo es precioso al menos el elemento objetivo, para Amanda se torna un tanto desagradable al percatarse de las personas que se encuentran allí, sin duda para Amanda el elemento subjetivo le resta belleza a todo el encanto del bosque.

Todos se despliegan por el lugar, Amanda decide sentarse en un tronco tirado, Simone se queda, ella la invitó y no la dejara sola, es por eso que toma asiento al lado de ella ofreciéndole una bebida, Amanda duda en tomarla, no conoce de nada a Simone y su madre siempre le advirtió sobre aceptar bebidas de extraños, tras dudarlo acepta, rápidamente observa los hielos, la huele y prueba con algo de temor.

—No te voy a drogar. —interrumpe Simone con una sonrisa alegre.

—Nunca se sabe. —Amanda se encoje de hombro.

Simone va por bocadillos, Amanda permanece observando a todos los adolescentes que se encuentran en el lugar mientras Aerosmith suena de fondo.

Un ruido proveniente desde atrás de su espalda llama su atención cosa que la hace girar buscando con su mirada el origen de aquel ruido, se levanta procediendo a caminar hasta donde ella cree que provino aquello que llamó su atención.

Llega hasta un árbol, después de subir por una pequeña colina, ve detrás de otro árbol y más allá de este, no hay nada, pero continua caminando encontrando un camino muy peculiar, el sendero brilla como si le hubiesen puesto glitter rosa y morado, las hojas de los árboles son naranjas, unas luces se encuentran iluminando el sendero.

Amanda tiene la intención de seguir, quiere saber a donde llega ese peculiar sendero, pero el cielo tiene otros planes.

El cielo comienza a rugir advirtiendo la tormenta, las nubes grises se toman el cielo ocultando las pocas estrellas que habían, las gotas comienzan a caer, lo que hace correr a todas las personas de la fiesta, menos a Simone que observa todo en busca de la chica de ojos grises, llego con Amanda y con ella volverá.

Amanda camina, Simone la busca gritando su nombre, John espera por su hija, la lluvia a reclamado a Metis como su territorio. Amanda sigue caminando por aquel sendero, encontrándose con una cueva, sin dudarlo entra intentándose protegerse de la lluvia, ya adentro busca su móvil encendiendo la linterna para ver mejor aquel lugar.

Al encender la linterna su visión se amplia, encontrándose con un pasillo, el cual conduce a una cámara, que en su entrada reza, «¡cuidado, puedes morir!» dentro es más pequeña de lo pensado, sin ningún tipo de ventilación no sé puede percibir el exterior ni el olor a tierra húmeda de fuera.

Simone sigue busca a su invitada sin obtener ningún resultado decide irse pensando que, quizá por la lluvia Amanda corrió, como los otros hicieron. Amanda en la cámara de la cueva, se encuentra con una especie de caja hecha de piedra guardan un objeto en su interior, al iluminarlo una... «roca». Se observa al fondo.

«¿Tanto misterio por una roca?» piensa Amanda dándose media vuelta para así volver, sin saberlo tras ella la roca se ilumina con una luz verde, se eleva, haciéndola voltear, su luz es encandecerte, Amanda suelta su móvil, pone sus antebrazos sobre sus ojos tratando de evitar la luz.

Quiere girarse pero no puede. Quiere moverse pero sus piernas no la obedecen, ella da la orden de alejarse y ellas la acercan más a esa roca, siente como sus pies se mueven guiándola hacia adelante, estira una mano, la punta de sus dedos toca aquella roca.

Amanda cae al suelo. Simone llega a la entra del bosque, donde se encuentra Tommy. Simone le pregunta por su nueva amiga teniendo como respuesta una negativa por parte de Tom, ambos regresan al lugar para buscar nuevamente a Amanda, mientras esta escucha una voz antes de cerrar sus ojos cayendo inconsciente, diciendo

«Cuidado con Cignus»

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