Mía, una solitaria, callada y sobre protegida chica de Resseda cuya familia tenía un secreto; secreto por el que en su vida solamente tenía en su itinerario 3 cosas: escuela, casa, iglesia. Prácticamente aislada del mundo por su sobreprotectora madr...
Era sábado, prácticamente el medio día y Mía se había quedado sola en casa, era cumpleaños de su prima y la habían llevado al cine, mientras que su madre había ido a trabajar. Estaba en su cuarto, viendo universidades por Internet, estaban por ingresar al último año y, ella no tenía siquiera idea de qué quería hacer después de West Valley High. Ni siquiera sabía si quería irse a otro lado o quedarse en California. Fastidiada de no saber siquiera por dónde empezar, cambió la pestaña de su navegador y empezó a ver una de sus películas favoritas; de esas que pocos conocen y que, al parecer solo ella y Demetri sabían que existían. Sus 2 amigos, y su novio definitivamente eran unos frikazos, aunque Demetri más al estilo de ella, con historietas, películas, series y todo ese universo que era la cultura pop. Mientras que Miguel lo era más por la música, tecnología y video juegos, y por último Eli, antes de esa metamorfosis que estaba teniendo, era más asiduo a la literatura y un poco a la cultura pop, aunque no al punto del ojiverde.
No llevaba ni un tercio de la cinta cuando, escuchó golpeteos en su ventana; lo cual la extrañó un poco, eran demasiado para que fuera un insecto chocando repetidamente contra el cristal, y el cielo parecía tener intensiones de todo menos llover. Mía no hizo caso y siguió viendo su película, hasta que él golpeteo se repitió, seguido de un "Mía? Capone, si no quieres abrir o algo, al menos finge que no estás". Al escuchar "Capone" inmediatamente supo de quien se podía tratar, por lo que no dudó 2 veces, pasó su película y fue a asomarse a su ventana. - Bestie, qué demo... - venía por ti. Tienes chance de una escapada? - ... para? Mira, de una vez te digo, si piensas volver a cobra kai, a que OTRA VEZ te rompan la boca, no cuentes conmigo. Menos ahora que el sensei Lawrence anda de viaje dios y Miguel sabrán donde... 🙄 - no, ahí no bestie. Solo, me acompañas a buscar una dirección? - hasta donde?- protestó Mía, con flojera. Hacia un calor de aquellos y, ella andaba en short de pijama y un top de tirantes. - tú solo ponte otra cosa con la que no vayas casi en lencería y vamonos- ordenó, mientras tenía la mirada hacia el pasillo. Le resultaba raro ver a su amiga con semejantes prendas, pues no solo era la novia de su amigo, después de todo seguía siendo un adolescente con las hormonas a tope y ella era una chica. Una que, aunque no tenía una figura de ensueño, podría decirse quw tenía lo suyo, total... por algo dicen que para gustos, los colores. Y Mia, era curvy, si, pero no dejaba de tener ese tinte femenino. - ya voy, pues 🙄 solo necesito estar aquí antes de que anochezca... ok? - o qué? Te volverás vampiro? - deja de burlarte, mocoso...- protestaba Mia, cerrando su cortina para cambiarse rápidamente. Al cabo de 5 minutos... - Bestie, solo es buscar una dirección y pedir informes, no solicitar una visa. 🙄 - si fueras una chica me entenderías. Oh espera, si solo te faltó el cromosoma.... 😗 - mensa 😒 - ya me insultas en español! Joder! Aprendes rápido... - en serio tardaste tanto... por esto? Y por qué los zapatos de enfermera?
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- y tú por qué no te rasuras aunque ya casi seamos universitarios? 😒 - bien jugado, Hawtorne 😒
Los dos chicos salieron de los departamentos bromeando y discutiendo entre jueguitos, como solían hacer, sin percatarse de que alguien más los había visto y, el solo ver que se llevaran así de bien, lo hacia de repente, sentir un tanto de incomodidad al respecto. Pero, por Dios! No tenía por qué sentir... si, si... celos.
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- Bestie, ya tomamos un autobús, y caminamos cuadras enteras. Ya dime a donde va... - creo es aquí. O al menos eso me marca maps...- la interrumpió Demetri, al parecer igual aliviado de ya no tener que caminar mirando a todos lados. - y esta casita... - solo pedimos informes y pim pam pum! Nos vamos, y hacemos escala por uno de esos cafés que tienen como nesquick al fondo -un bubble tea?... mejor un frappé de Nutella 😗- instó Mía, incrédula de que, a pesar de sus complejos con su cuerpo y tener cierta incinacion a desarrollar algún TCA, su bestie fuera capaz de sobornarla con comida - mejor aún. 🥰😄 por algo eres mi bestie. - bueno, entonces toca el timbre... - Mía, no hay timbre - OK, ya vinimos, intentamos... ni modo - mira, está abierto de ese lado. Vamos? - ... - Mía...🥺 - 👀🙄🤦🏽♀️ chingada mirada de gatito que tienes. De acuerdo, vamos - protestaba Mia rodando los ojos, más cansada que nada - mira, si hay alguien... vamos a preguntar, y ya...
- ... ese es un estanque koi? Cuanto cuesta mantenerlo?- empezó a preguntar, cambiándose totalmente de tema - bestie, me hiciste venir hasta aquí por peces? Concentrado! - bueno, en realidad... - puedo ayudarte en algo?- cuestionó el mayor entre el pequeño grupo de personas que estaba ahí, a la anonadada mirada de Mía. Era en serio? De toda la población de su ciudad, debían ser ellos? - queremos aprender karate- explicó Demetri, mientras se señalaba a sí mismo y a Mia - queremos? Quieres, más bien. Y... oh por dios. 👀😳- se auto interrumpió la morena al acabar de reconocer al chico rubio que estaba con ellos - bestie, y si... 🥺🥺 solo me quedas tú... - Dem, no... 😪 - están en el lugar correcto- les respondió el sr. Larusso, con una sonrisa amable y de algo que podrían describir como alivio. - y por qué no? Tienes mucho potencial...- comentó el chico, acercándose a Mía con una sonrisa amistosa, aunque, algo tímido - ... 👀👀👀 - le tiraste 2 dientes a uno de los sujetos de esa vez... y, yo traje una mano vendada 2 semanas... tienes talento... - le explicaba Robby, haciendo un ademán como si quisiera adivinar el nombre de - Mía. Me llamo Mía. Y... lo siento por eso. - descuida. Yo tampoco estaba haciendo bien... - Mía, Robby ya me contó de esa vez, y he visto los videos que subió Demetri, de ti peleando... eres muy buena. Practicabas antes? O...- se integró Sam a la platica - ... es largo de contar, pero... yo no... - nada pierdes con probar, Mía. Si te preocupa que esto sea como cobra kai, no tienes por qué. Aquí aprenderás la forma correcta, a canalizar todo y...- le comenzó a explicar el sr. Larusso - pero, la decisión es totalmente tuya, Mía. - ... - tienes mucho por explotar, además, por lo poco que sé o se sabe de ti... te ayudaría a focalizar y expiar todo eso que sientes... - la animó Sam, apretando un poco el hombro de la morena. - de acuerdo, por qué diablos no? 😬😄- aceptó la castaña, y su sonrisa que bien podía describir como "qué rayos acabo de hacer?" - perfecto, bienvenidos entonces chicos- les dijo el padre de Sam, dando una palmada y acercándose a sus nuevos alumnos.
