Capítulo 18. Sé que puedo volar.

1.7K 180 2
                                    

Get Down – James Arthur.

 

Normalmente tendría todo un discurso preparado, también tengo siempre una gran habilidad para poder negociar una pelea el ganar una lucha o el de sacar verdades de tan solo argumentos nada válidos. Tengo la capacidad de encontrar excusas hasta debajo de las piedras, pero aquí, con Rain a mi lado, totalmente pálida, me quedé en completo shock. No sabía realmente qué decir.

-¿Qué estás haciendo en Londres? –preguntó Lorely. Miré a Rain y ella estaba aún estupefacta, revisando cada detalle de la mujer que estaba frente a sí, sus mejillas llenas de lunares, los ojos castaños claros, la forma en que no sonreía, y tampoco fruncía el ceño, estaba tan confundida como nosotros.

- Yo… es que… ¿mamá?

Entonces la mujer me reconoció, en diferencia a Rain, yo sí me sentía enojado y pretendía casi arrancarle la cabeza con el simple hecho de su existencia.

-¿Dónde está mi padre, sucia trepadora?

- ¿Disculpa?

- Lo que oíste, dime dónde está o entraré a la fuerza… -ordené y ella rió un poco recargándose en el marco de la entrada.

- Llamaré a la policía por allanamiento a mi hogar, ¿quieres arriesgarte?

- No sería la primera vez que tengo antecedentes penales amiga, ahora, háblale a mi padre –ella frunció el ceño retándome con la mirada.

-¿Cómo llegaste hasta Londres? ¿Por qué nos abandonaste? ¿Cómo te atreviste a tener más hijos después de abandonarnos a nosotros primero? ¿Sabes que papá te ama? Axel te odia, pero… ¿por qué? ¿Cómo?

La señora, quién parecía calmada, pero a la vez alerta, la miró y apretó los labios tratando de ser lo suficientemente firme-. Lo amo –susurró, no sabía qué sentir primero, si aversión o asco. Me giré y la empujé moviéndola de la puerta. No supe qué más pasó allí, pero yo subí las escaleras y comencé a abrir habitaciones.

Sabía que Lorely estaría lo suficientemente ocupada con su otra hija, por lo que yo estaba saqueando la casa y me importaba un comino que la policía me encontrara, había tenido tantos problemas en los últimos años que viví aquí, que no recordaba cuál era mi última sentencia.

Estudio, gimnasio, cuarto de cine y juegos, biblioteca. ¿Desde cuándo mi padre tenía tanto dinero? Abrí una habitación y estaba completamente desolada, pero la siguiente puerta me hizo doler el estómago. Dentro estaba un pequeño niño.

Cerré la puerta detrás de mí, le puse seguro y observé con atención al niño que estaba jugando con sus pequeños carritos de juguete. Al dar un paso se me quedó mirando, no tenía los ojos verdes, eran azules, tenía el cabello castaño oscuro, pero igualmente rizado. Apreté los labios y luego traté de sonreír, me recordaba un poco a Nicky-. Hola –saludé.

-Hola –respondió tímido- ¿y mi mamá?

- Abajo –respondí- ¿Cómo te llamas?

- Wesley Styles –dijo bajito, sabía que comenzaba a asustarse, caminé hacia donde estaban sus juguetes y tomé uno de sus carritos para luego sentarme en el suelo a su lado-. Hmnn…

- Yo me llamo Harry –respondí mirándolo- soy amigo de tu papi.

- ¿Amigo?

- Sì, muy cercano –susurré para mí- ¿está aquí en tu casa? Vine a buscarlo pero no lo encuentro –él se encogió de hombros, ojala fuera tan listo como Nicky, esto sería mucho más fácil de resolver-. ¿Te gustan los carritos? –asintió-. A mí me gustan los barcos –expliqué- ¿Quieres ver uno?

Ps: I Love You (Original) IIWhere stories live. Discover now