Pasado

117 11 0
                                    

Muchos hemos tenido que aparentar ser fuertes en un momento de debilidad, por algo que hicimos o no hicimos, algo que marcó nuestro pasado y llega un momento en el que el dolor nos consume por completo, cuando lo primero que hacemos al estar solos es llorar y tapar nuestros gritos con una almohada; y lo peor es que cuando salimos nadie nota nuestra tristeza, nadie nota que hemos llorado, nadie nota como vamos muriendo por dentro.
Quizá te sientas identificado(a) con esta situación.
Pero sabes, mucho ayuda el darte cuenta y aceptar una cosa: cuando todo pase serás mucho más fuerte que al inicio. Te sientes débil en ese momento, eso es un hecho.
Quieres llorar, hazlo y grita todo lo que quieras, golpea incluso tu almohada, la pared, enójate. Pero asegúrate de que cuando termines no vuelvas a hacerlo por la misma razón.
Cometemos errores, es cierto, y muchas veces esos mismos errores nos persiguen incluso toda la vida. Pero tienes que aprender que la vida es como un piano, que tiene teclas blancas (las cosas buenas de la vida, lo que disfrutas) y negras (los errores, de lo que te arrepientes); sin embargo para interpretar una bella melodía en ese piano, necesitas combinar ambos colores.
Así que tú decides. No arruines tu presente recordando un pasado que ya no tiene futuro. Nunca te definas por tu pasado, solo fue una lección y no una sentencia de por vida...

Sentimientos CompartidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora