You'll never love yourself Half as much as I love you | n.h.

Capítulo 78.

Niall: Porque... me han... -Buscaba las palabras para decírtelo- porque... 

Tu: Es una de las condiciones, supongo. –Sabías a que se referiría.
Niall: Bueno, sí. –Afirmó- Quería pasar este día contigo, y quería que fueses parte de esto. Ellos dijeron que estaba bien, sólo que no... podíamos salir juntos en las fotos. O sea... ser discretos. Y... lo que hemos hecho siempre.
Tu: Está bien. –Mentiste.

Sólo anhelabas el día en el que ustedes pudiesen salir de eso, no querías salir en las fotos con él, sólo querías dejar de esconderte, dejar de sentirte culpable de casi todo lo que hacías a él le perjudicaba.

Niall: Sé que no lo está... -Te dijo mirándote a los ojos.
Tu: Tiene que estarlo. –Sonreíste gélidamente.
Niall: te quiero mucho... lo sabes, ¿verdad? –Colocó su mano en tu rodilla.
Tu: Sí, lo sé. Yo también te quiero mucho.

Te acercó a él y te besó.
Bajó de la camioneta y te abrió la puerta, te ayudó a bajar y te encaminó a la iglesia. Rodeó tu cadera y caminaban juntos.
Llegaron a tiempo. Greg lucía impecable, Denisse lucía muy linda, era muy atractiva a su manera.
Niall sonreía, estaba orgulloso, feliz... una sonrisa cabal que iluminaba sus ojos azules.
Al terminar la pequeña misa de la boda, todos comenzaron a salir...

Niall: Amor... -Te detuvo.
Tu: ¿Sí?
Niall: -Miró hacia la puerta y luego hacia a ti- tendrás que salir por otra puerta...
Tu: ¿Por qué?

Miraste hacia la puerta... y extrañamente habían más de diez fotógrafos.

Tu: Olvídalo, ya lo sé.

Tratabas de no sonar dolida, pero realmente era algo que no podías evitar. Tratabas de actuar normal, pero aun aunque por más que intentaras, te dolía demasiado.

Niall: Nos veremos en la fiesta...
Tu: ¿Qué? ¿Hasta en la fiesta?
Niall: Sí amor, me seguirán en la camioneta...
Tu: -Aguantabas las ganas de sentirte mal- ¿Cómo me iré a la fiesta?
Niall: No, mentira... Se me ocurrió algo.
Tu: Dime.
Niall: Sal por la puerta trasera, camina al final de la cuadra y ahí pasaré por ti. ¿Bien?
Tu: Bien...
Niall: Paul te encontrará después de que me ayude a subir a la camioneta. ¿Bien?
Tu: Bien...
Niall: Lo lamento enserio...

Estaba frustrado, tanto como tú por no poder salir juntos, por ser privados.

Tu: Está bien.
Niall: -Te besó- Nos vemos en unos minutos.

Te quedaste paralizada en cuanto viste que caminó a la puerta. Al verlo, muchísimos fotógrafos comenzaron a poner el flash. Las pocas fans que estaba ahí gritaban, vaya... ¿Qué harían si te vieran con él? Caminaste a paso lento hacia la puerta trasera. Uno de los encargados de indicó cómo llegar al final de la cuadra y así fue como emprendiste camino.
Veías a los automóviles de los invitados pasar corriendo por la calle, mientras tú caminabas por la acera con unos zapatos altos y un vestido formal.
Llegaste a la esquina y sacaste tu teléfono para no parecer extraña estando sola en la esquina de la calle. Viste un gran arreglo de algunas plantas y rocas enormes, los zapatos altos te estaban cansando. Te acercaste a una de las rocas y te sentaste en ellas. Por suerte, tu vestido no era blanco.
La camioneta de Niall pasó y se estacionó. Salió de la camioneta y lo viste caminar hacia ti.

Tu: ¿Qué pasa? ¿Ya nos vamos?
Niall: Sí, listo.
Tu: ¿Y por qué has bajado del automóvil? –Sonreíste confundida.
Niall: ¿Por qué no hacerlo?
Tu: Bien, vámonos.
Niall: ¿Te han dicho antes que sonríes bien bonito?
Tu: -Sonreíste ruborizada- Supongo que no, pero gracias.

Sonrió, y te besó. Te ayudó a subir a su camioneta y tomaron camino a la fiesta de bodas.
Al llegar, por suerte no habían llegado todos los fotógrafos de antes, así que pudieron esta vez entrar juntos.
La familia de Niall era tan distinguida por ser tan humilde y risueña.
El lugar tenía una gran vista a un pequeño bosque o parque que se encontraba detrás del salón. Tú y Niall se encontraban ahí, recargados en aquel barandal que les separaba del oscuro y verte frondoso lugar.

Niall: ¿Sabes? –Decía sosteniendo un vaso con bebida.
Tu: ¿Qué pasa? –Lo miraste-
Niall: Me alegra muchísimo que estés conmigo.
Tu: ¿Enserio?
Niall: Sí, no sé... -Se agachó en hombros- creo que eres lo demasiado valiente para aceptar este estilo de vida.
Tu: -Sonreíste, mirando al suelo- No me gusta vivir así, pero me gusta estar contigo... todos arriesgan cosas y hacen cosas locas también; por las personas que quieren, ¿No? yo te quiero, y mucho. Y si tengo que acostumbrarme a vivir así, lo haré. No quisiera... perderte de alguna forma.
Niall: ¿Por qué me perderías? –Acariciaba tu mejilla.
Tu: No sé, tal vez si no te quisiera lo suficiente no hubiera aceptado estar contigo a pesar de vivir escondiéndonos.
Niall: ¿Y me quieres mucho? –Sonrió.
Tu: más de lo que tú crees.
Niall: Yo te quiero muchísimo, y te admiro más de lo que tú a mí. –Te besó.

Regresaron a casa antes de que terminara la fiesta. El sofá de la casa de Niall era tan acogedor que llegaste a sentarte. Él se sentó a tu lado, y te abrazó. Prácticamente estabas acostaba en su pecho, rodeada con sus brazos. Te quitaste los zapatos altos y descansaste tus pies.
Te acostaste en sus piernas, él te contaba algunas cosas y tú lo veías jugando con su corbata.
Al momento que dejó de hablar, tomaste con fuerza la corbata y suavemente lo allegaste hacia ti. Comenzaste a besarlo... cada que lo besabas sentías que hace mucho no lo besabas. Una sensación que sólo él te hacía sentir, entrelazabas tus dedos en su cabello, mientras él acariciaba tus brazos.
Bajaste tus manos a su corbata de nuevo y comenzaste a desabrocharla...
...