You'll never love yourself Half as much as I love you | n.h.

Capítulo 33.

Viste a Niall salir del baño. 

Todo era como, "¿Qué hace aquí?" "¿Por qué vino?" "¿Habrá notado mi terrible look despeinado?"
Al verte, él sonrió. Extendió su mano para saludarte pero no respondiste. Él soltó una risita, parecías haber visto un fantasma, o algo que te dejara en bastante estupefacción.

Niall: Hola. –Dijo al momento que reaccionaste a tomarle la mano.
Tu: Hola. –Sonreíste.

Él te acercó con su mano a él y te besó la mejilla.

Tu: Espera, qué... qué haces... qué haces tú... -Balbuciste
Niall: ¿Qué? –no te entendió.
Tu: ¿Qué haces aquí? O sea, no es que me moleste, solo que... ¡Wow! No te esperaba.
Niall: Vine porque... estaré con semanas libres. Y... ya que no te dejaron venir a Irlanda, vengo yo.

Te asomaste a ver si tu papá había escuchado lo que él dijo.

Tu: Papá...
TP: ¿Sí? –Dijo al asomarse.
Tu: ¿Escuchaste?
TP: ¿Qué cosa?
Tu: ¿Sabes por qué vino Niall?
TP: Am... ¿A verte?

La situación era realmente incomoda, pero querías que tu papá supiera lo que es apto de hacer Niall por ti.

Tu: Sí, ¿Por qué? Te preguntarás... yo sé, yo sé que te lo preguntas.
TP: bue... -Interrumpiste
Tu: ¡Porque no me dejaron ir a Irlanda! Él vino. –Sonreíste-
TP: Yo... -Interrumpiste de nuevo.
Tu: Ya, nomás quería que supieras eso. –Sonreíste-
Niall: -sonrió- ¿para qué querías que supiera?
Tu: para que no digan que no haces nada por mí.
Niall: ¿Eso decían?
Tu: Ah, no, pero para prevenir.
Niall: Lindo... peinado. –Dijo al apuntar tu cabello.
Tu: Ah, -Enrojeciste- no... es que me molestaba el recogido que tenía... es que hacía un poco de calor en el aula.
Niall: Está bien, -Soltó una risita- se ve bien.
Tu: Gracias... -Dijiste aun enrojecida.

Él sonrió y miró al suelo. Ambos se quedaron callados unos segundos, algo que inquietó a tu papá.

TP: ¡Quiero escucharlos hablar! –Dijo desde la cocina- ¡Chiflando y aplaudiendo!
Tu: Ay qué vergüenza... -susurraste, mientras enrojecías de nuevo.
Niall: -Soltó una risa- ¡Está bien! No pasa nada.
Tu: Mejor salgamos de aquí, ¿Sí? Estará todo el día, y me es algo incómodo hablar con él aquí.
Niall: ¿Segura? A mí no me molesta.
Tu: Sí, segura. –Sonreíste.
Niall: Bueno, vamos a... ¿Un centro comercial?
Tu: ¡Sí! Hay uno donde venden comida deliciosa, ¿vamos?
Niall: ¡Claro! Me parece bien. –Te sonrió.

Ambos pidieron un taxi al centro comercial que más te gustaba.
Cuando llegaron, él comenzó a ver los electrónicos, le gustaban, pero nunca le veías la última tecnología en manos.
Se aproximaron al restaurante que le decías donde venían deliciosa comida. Él te invitó, y te rogó un poco pagarte la comida. Aunque no te gustara eso de que él pagase siempre, tenías que acceder por qué de lo contrario, el tema se volvía algo incómodo.
Cuando terminaron de comer, se encontraron con Scarleth, quien tuvo el placer de conocer por fin a Niall. Cuando el día estaba acabando, recordaste que tenías deberes de la escuela por hacer.

Tu: Niall, ¿Vamos a casa? Necesito terminar mis deberes.
Niall: Ah, claro.
Tu: Y si gustas puedes... dejarme e irte y así, para no hacerte perder tiempo.
Niall: No, te ayudo a terminarla.
Tu: Es mucha, pero no, me distraerás mucho.
Niall: -Rio- ¿Soy un punto perfecto de distracción?
Tu: Algo así, aparte está en español y tú... no sabes español.
Niall: Sé algo...
Tu: Pero... -Interrumpió
Niall: Sé decir –Dijo en español- Hola, como estás.
Tu: Sí, bueno... yo... -Comenzaste a pensar que sería buena idea que Niall esté contigo, ya que sería algo romántico- bien, pero tratarás de no distraerme. ¿Bien?
Niall: ¡Claro que sí! –Sonrió- no te distraeré, lo prometo.

Tomaron un taxi a tu casa.
En el camino Niall no dejaba de preguntarte cosas para decirlas en español. Era como un niño que aprendía a hablar, oh comenzaba a conocer el mundo.
Al llegar a la casa, notaste que estaban absolutamente solos. Por lo cual no te molestó llevarlo a tu habitación para hacer tus deberes.
Sacaste los libros, y separaste lo que tenías que hacer. Niall tomó uno de los libros y comenzó a hojearlo, y parecía entenderle pero también trataba de leerlo. Estaba tan entretenido que calló por unos minutos. Comenzabas un ensayo sobre la historia de un monumento de tu país, tenías que buscar en internet, y no perdiste más tiempo.
Niall solía reírse de sí mismo, te hacía sonreír y podría distraerte, pero no querías correrle, ni mucho menos callarlo.
Al terminar el ensayo del monumento, te dejaron hacer un cuento en inglés. Niall estaba en tu cama acostado, mientras tú estabas en tu escritorio escribiendo.

Tu: Niall, podrías venir un momento.
Niall: Claro. –Dijo al dejar el libro sobre tu cama y acercarse a ti.

Se inclinó hacia a ti, al nivel de tu rostro. Se sostenía con las manos en las rodillas y veía tus cuadernos.

Tu: ¿Podrías escribirme un cuento?
Niall: ¿Un cuento? –Dijo al verte a los ojos.
Tu: Sí un... -Dijiste al automáticamente ver sus ojos- un cuen... un cuento. –Estabas nerviosa, jamás había estado tan cerca de ti...