𝐓𝐖𝐈𝐓𝐓𝐄𝐑 𝟑 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇🥀

54.

Capítulo 54.

Solo Ryan podría interrumpir una conversación importante y aún así, reírnos por ello. De rodillas sobre la alfombra comenzamos apilar los vinilos que nuestro bebé a sacado del estante y que continúa exparciendo por la alfombra mientras grita y balbucea. Sé que estos vinilos son importantes para Niall, es un coleccionista y los agrupa por artista según el año que salió a la venta. Ahora no es más que una torre de vinilos mezclados entre sí.

-Su primera travesura —Me dice, claramente divertido por la situación —Tendré que buscar otro lugar para dejarlos, quizás comprar otro estante, uno donde él no pueda alcanzarlo hasta que cumpla los 5 años como mínimo.

Sonrío escuchándolo.

-Y yo tendré que quitar mis libros y figuritas que hemos comprado en nuestros viajes al extranjero, él los sacará todos —Respondo mirando los otros estantes, donde yacen los recuerdos artesanales que compramos en Italia y Francia —Buscaré otro lugar para dejar mis cosas, es un hecho.

-Entonces... Volverás a casa —Dice suavemente, tomando mi mano entre las suyas —Volverás a casa ¿Verdad?

Mi corazón se acelera.

-Aún no hemos terminado de hablar —Le recuerdo mientras siento su mano cálida envolver la mía. Lo echo mucho de menos.

-Entonces podemos seguir con nuestra conversación —Me pide —¿Sí?

-Me gustaría amamantar a Ryan primero.

-Sí, por supuesto.

Él me ayuda a ponerme en pie y luego tomo a Ryan en mis brazos. Alcanzando el bolso que he traído para él, camino por el pasillo dándome cuenta que Niall no viene detrás de mí. Por lo que dándome la vuelta, me quedo mirándolo, él está parado allí en mitad del salón sin saber que hacer.

-¿No vas a venir? —Pregunto y él asiente con una pequeña sonrisa.

Al entrar en la habitación matrimonial, miles de emociones embargan mi ser. Aquí existen muchos recuerdos para ambos, nuestra historia está escrita en cada rincón de esta habitación y no existe nada que pueda borrar nuestras vivencias.
Niall me ayuda cargando a Ryan mientras me quito el suéter y desabrocho algunos botones de mi blusa, para luego subirme a la cama y recibirlo y ponerlo entre las mantas.
Su pequeña boca se abre como un pez fuera del agua y se adhiere a mi pezon en cuanto lo acerco.

-Niall, súbete a la cama —Le pido cuando lo noto de pie a mi lado —No seas tímido.

Intento bromear y él sonríe quitándose los zapatos y acostándose al frente mío. Apoyándose en su codo observa a nuestro hijo y acaricia su cabeza suavemente. Se ve emocionado y esperanzado.
Afuera, la lluvia se intensifica, puedo sentirla contra el ventanal. Por varios minutos es nuestro único sonido de fondo.
Niall se mantiene en silencio, solo acariciado a Ryan mientras bebe su leche adherido a mi pecho.

Yo también me siento esperanzada. Estar aquí junto a él, es un enorme paso que no creí que daría, me sentía tan herida que lo único que deseaba era escapar de esta casa. Pero estar fuera me hizo extrañarla, necesitarla y añorar cada rincón de este lugar, porque después de todo es nuestro hogar.
Cuando Niall fue a visitarnos, note que Ryan también lo añoraba y eso rompió mi corazón, porque sentí que no merecía pagar con nuestros errores. Es por eso que, ahora estamos aquí, para intentar solucionarlo, para intentar darnos una segunda oportunidad.

Cuando vuelvo a mirar a Niall, noto lágrimas en sus ojos. Está sumergido en sus pensamientos mientras observa a Ryan como si fuera lo único que importara en la vida. Mi corazón se rompe de nuevo y aquél nudo doloroso se instala en mi garganta.
Desde que cruce la puerta que he intentado mantenerme fuerte, no llorar y ser clara en las cosas que he querido decirle, pero también soy humana, también me quiebro y siento que ya no puedo retenerlo más.
Acercando mi mano, acaricio su cabello. Mi gesto lo hace alzar sus ojos hasta mí y mirarme como si lo que acabo de hacer es parte de un sueño.