Abro las cortinas esperando encontrar más luz en mi pequeño departamento.
Hace varias semanas que me he mudado aquí y sigo tratando de encontrar el ritmo, el colegio me mantiene ocupada pero no puedo evitar sentirme sola de vez en cuando.
Considere seriamente la idea de conseguirme una compañera de piso pero creo que solo necesitaba un tiempo para mi.
Descolgué mi abrigo del perchero y tome mi pequeño bolso, tenía que llegar a trabajar, buscaba independizarme cada vez más y más. Salí de mi pequeño departamento y pronto ya estaba en el pequeño restaurante, era bastante acogedor y me gustaba la gente que trabajaba y frecuentaba ahí.
Saludo a la alegre señora que maneja el lugar y se encarga de la caja. También agito mi mano hacia Elisa, amiga que hice al llegar aquí, que también trabaja como mesera.
Entre a la parte trasera del pequeño restaurante para quitarme el abrigo y colocarme el delantal; até mi cabello en una cola alta y guarde mi bolso, una vez que salí me encargue de las mesas que me correspondían.
Después de varías horas estaba sentada en la barra mientras acomodaba lo que venía en mi pequeña libreta. Acto seguido siento como tocan mi hombro, giro para encontrarme con Elisa.
— Aria, cariño. Se que estás apuntó de terminar tu turno pero hay un chico en la mesa 6 que no deja de insistir en que tú lo atiendas, intente explicarle que yo era la mesera asignada a la mesa pero él es realmente insistente.
La miro confundida unos segundos y giro mi cabeza hacia la mesa que le corresponde el número seis. Únicamente veo la parte de atrás de un chico, viene con una chaqueta y un gorro oscuro.
— ¿El me pidió? — pregunto sin apartar la mirada de la mesa.
— Si, de hecho me asusto un poco, pero supuse que te conocía por lo familiar que te menciono.— contesta mientras yo me levanto y guardo mi libreta en el bolsillo de mi uniforme.— ¿Lo conoces? Puedo decirle a Dean que lo asuste y lo saque de aquí, no es la primera vez que un loco viene acosando alguna chica.
— No, iré a ver quién es, si no es seguro volveré de inmediato, lo prometo.— ella asiente y pone su mano en mi hombro.
— Esta bien, solo seria una pena que fuera un asesino serial, es muy caliente.
Le sonrió un poco y me acerco a la mesa, trato de calmarme e ignorar el hecho de que este chico sabe mi nombre y dónde trabajo. Así que me limito a solo tratarlo como un cliente más, saco la libreta pero mis movimientos se quedan estáticos cuando quedo enfrente de la mesa.
— Hola, Aria.— sigo en un estado de sorpresa que no me permite moverme o hablar. ¿Cómo fue que me encontró?
— Jack.— no sé qué hacer y el nudo que he tratado que no se forme en mi garganta los últimos meses parece estar volviendo.
— Me alegra mucho verte.
— ¿Cómo me encontraste? — es lo único que puedo llegar a pronunciar. Él suspira y se desliza en el asiento del taburete en lo que parece una invitación a sentarme a su lado, lo pienso un momento y me dejo caer en el asiento, pero en la parte delantera de la mesa ocasionando que quedemos cara a cara.
— No fue fácil.— murmura mientras le da vueltas a la taza de café entre sus manos.— Trate de convencer a tu mamá de que me lo dijera, también a Anna y Kitty pero parece que todos me odian un poco ahora.
Asentí un poco sin levantar la mirada, tanto mis mejores amigas como mi mamá tenían bastante confianza en Jack, pero desde que se enteraron lo que ocurrió entre nosotros cortaron todo tipo relación con él; yo creí que eso estaría bien ya que sería más fácil para mí olvidarme de Jack.
— No entiendo qué haces aquí.
— Te busque por todos lados; cuando te fuiste, por un segundo, solo por un segundo, pensé en que tal vez tendría que dejarte ir. Pero después de tan siquiera haber planteado la idea en mi cabeza fue realmente desgarrador para mí. El no verte más, el no sentirte más, él no besarte más...
— Aunque volviera ya no estaríamos juntos, Jack.— aún me niego a levantar mi mirada. Han pasado meses, si, pero me niego a poner en duda el hecho de lo qué pasa conmigo cuando tengo delante sus ojos oscuros.
— Lo sé, lo sé, sé que me merezco todo tu desprecio, pero Aria, yo en verdad te amo y sé que...
— Me prometiste amarme cada segundo de tu vida, Jack. Se que fue una promesa estupida pero yo realmente creí que...
— Pero si te ame cada segundo de mi vida, te amo, Aria. Y estoy segura que dentro de 30 años voy a seguir amándote igual.— él toma mi mano y siento mi cuerpo estremecerse. También siento las lágrimas acumularse en mis ojos.
— Odio la manera en la que se siente esto. Recuerdo lo mucho que odiaba el estupido dicho de que el primer corazón roto es el más desgarrador, pero eme aquí, sentí que me moría, Jack.
Una maldita lágrima se escapa y baja por mi mejilla, bajo más mi rostro tratando de cubrirlo con mi cola de caballo, repentinamente siento a Jack levantarse sin soltar mi mano y sentarse a lado mío, creo que va a rodearme con sus brazos pero duda y no lo hace.
Después de unos segundos levanto mi rostro para mirarlo.
Me observa fijamente, su mano sostiene la mía. Efectivamente sus ojos siguen haciéndome estremecer.
— Solo te miro y quiero hacerme tanto daño porque puse esa expresión en tu rostro, cuando tú risa es la cosa más jodidamente hermosa que he escuchado.— pone un mechón de mi cabello detrás de mi oreja y retira la lagrima que estaba en mi mejilla.
— Jack...— es entonces cuando me rodea con sus brazos, no puedo evitar sujetarme a su camiseta mientras vuelvo a llorar.
— Te amo, soy el idiota más grande sobre la tierra, pero te amo y es lo único que se.
— No sé si pueda hacerlo, Jack. Estoy tan asustada. No quiero vivir mi vida con el miedo inminente de que tú...— él toma mi rostro entre sus manos y seca mis lágrimas con sus pulgares.
— No te voy a pedir que vuelvas conmigo, porque sé que necesitas tiempo y que has trabajado por construir una vida aquí, pero quizá pueda mudarme cerca, quizá pueda comenzar a traerte al trabajo, no lo sé, solo no quiero volver a alejarme de ti.
— Será difícil volver a dejarte entrar.
— Lo sé, cariño. Pero no importa cuánto tiempo tarde, en serio voy a amarte muchísimo tiempo y haré las cosas como tú quieras.— asiento y suelto el agarre en su camiseta, entonces siento la presencia de alguien más, Elisa nos mira con una expresión apenada.
— De verdad siento mucho interrumpir, sé que esto es evidentemente importante, pero estamos un poco preocupados, Aria. Ya sabes, te alteraste un poco.— yo asiento con una pequeña sonrisa y me limito a sentir el pulgar de Jack haciendo pequeñas caricias en mi mano.
— Esta bien, Eli. Nosotros ya nos íbamos, no te preocupes. Solo que mi amigo vino y me sentí un poco emocional, no lo he visto en largo tiempo.— ella sonríe y siento de Jack sobre mi.
— Oh, eso es muy dulce, realmente nunca hablas de nadie que conozcas, pero supongo que es porque él vive en tu ciudad natal.— Jack asiente y pasa un brazo por mis hombros.
— Si, es verdad, pero estamos pensando cambiar eso, pronto me mudaré.— contesta Jack mientras yo asiento lentamente. Ambos nos levantamos de la mesa y él me acompaña por mis cosas. Me despido de Elisa y los demás en la cocina y el restaurante y Jack me detiene fuera del local.
— Juro que es en serio. Quiero estar tan cerca de ti como sea posible, Aria. Y prometo amarte mucho.
— No quiero que lo prometas, Jack.— suspiro y él coloca sus manos en mi cabello y deja un beso en mi frente.
— Voy a hacerlo, es más que una promesa.— siento sus brazos rodear mi cintura y él dirige mis labios hacia los suyos. El hecho de una segunda oportunidad retumba en mi mente causándome temor. Haciéndome estremecer y preguntarme una y mil cosas, al fin y al cabo es el primer amor de mi vida, puede que sea el de toda mi vida.
— — — — —
hola.
¡Esto es importante!
Este es el primer OS que cambio de lugar. Pensé en mover todas las segundas partes y colocarlas alado de su primera parte. Así evitamos cualquier confusión.
Aunque seguirán teniendo un pequeño recordatorio de que es una segunda parte.
Eso claramente afectará la numeración pero se arreglará con el tiempo.
Espero que les agraden las correcciones, no son cosas muy grandes pero espero que les agraden.
Eso es todo. Paz.
(...)
Hi!
Lo siento, casi una semana sin nada 😆pero me acorde que una chica me pidió la segunda parte del OS de Jack y pues aquí está. Espero que les guste y espero que puedan pasarse por mi nuevo Zodiac.
Nos vemos pronto.