2.31 Dos Desconocidos Por Conocer

223 36 27
                                    

Así era...

Esa misma noche me había planteado olvidar todo lo que había pasado, esa mañana seria alguien distinta, sin preocupaciones.

¿Quién era Finn? No lo sabia.

¿Quién era Sally? Me daba igual.

¿Quién era Christopher? No me importaba.

¿Quién era Hero? No lo se.

Me levante muy temprano en la mañana pues tenia mucho trabajo que hacer en la morgue, lo de siempre, unas viseras y sangre que sacar por un lado, uno cuerpo por el otro, papeleos, etc. Pero esta mañana me sentí distinta, me vi al espejo y me sentí guapa, me sentí realizada, ya no habían problemas que me agobiaran, vivía sola, tenia una buena vida y... un chico que conocer.

Me permití maquillarme un poco y volver a las faldas de tubo que tanto me gustaban y así salí al trabajo con la bata colgando en un brazo. Recibí una llamada de Tammy.

—¿Hola? —conteste con una sonrisa.

—Quiero que me cuentes que hicieron tu y Hero antes de que tenga que entrar a clases...

—No se de que hablas... —dije como si nada.

—Haciéndote la loca no vas a lograr nada conmigo, Zoé.

—En serio, no se de que hablas... No conozco a ese tal Hero.

La linea quedo en silencio por unos segundos y casi reí al imaginar la cara de Tammy en esos momentos. Pero luego soltó un sonido de entender y rió.

—Mm, ya veo, ya se lo que han hecho, no me cuentes. Lo harás después cuando lo conozcas ¿no es así? —reí.

—Claro. El destino no esta escrito ahora...

Le colgué y seguí mi camino hacia mi trabajo. Desde la entrada hasta el laboratorio recibí halagos por parte de los químicos, del personal de seguridad y de otras personas que trabajaban conmigo, decían que me veía mucho mejor que hace algunos días, no quería alardear pero me sentía increíble.

A medio día salí de allí hacia el restaurante donde siempre almorzaba sola, pero esa vez unos ojos azulados se encontraron con los míos.

Pedía con apuro una malteada mientras hablaba con algunos de sus colegas. ¡Y madre mía, que hombre! Podría decir que era doctor o algo así pues encima de su camisa azul de botones y sus pantalones negros, llevaba una bata blanca con algunos lapiceros colgando en la solapa, pero no podía quitarle los ojos de encima, los músculos se le marcaban bajo la ropa, en las manos y el cuello se asomaban unos bonitos y oscuros tatuajes, tenia unos ojos maravillosamente azules, los labios de un rosa pálido y las facciones de la cara perfectamente marcadas.

Recibió su pedido al tiempo que reía por lago dicho por uno de sus colegas y su mirada volvió a encontrarse con la mía, esta vez mas descaradamente y eso me puso nerviosa. Baje la vista a mi comida que estaba por terminar y le di un pequeño sorbo a mi jugo de naranja.

Me puse mas nerviosa cuando note su cercanía.

—Hola —saludo con una sonrisa —¿puedo sentarme aquí?

—Claro... —lo vi lógico, las mesas estaban llenas y no me molestaba verlo mas de cerca.

—Disculpa, ¿Cómo te llamas?

—Zoé Green —le di la mano y el la tomo con delicadeza —. ¿Y tu?

—Hero Wright, es un placer. Dime, ¿eres doctora o algo así? No recuerdo haberte visto... —sonreí. Que bien hacia su papel.

De Amores Y Amigos A Los 22 [✓]Where stories live. Discover now