De Amores Y Amigos A Los 22 [✓]

2.20 Las Rosas De Chris Y El Deseo De Finn [+18]

Fueron semanas extrañas para mí, en el ámbito personal y sentimental. No había tenido ninguna noticia de Hero y no sabía si eso era bueno o malo, Tammy estaba demasiado ocupada como para preguntarle y con Daniel casi no me hablaba, además no quería parecer muy interesada en su situación, supuestamente yo ya lo había superado.

Por otro lado estaba Chris, seguíamos en la misma tónica de amigos tratando de conquistarse.

—No quiero que pienses que solo quiero eso y ya —me dijo una vez —. Contigo quiero hacer las cosas bien porque quiero algo grande, quiero un futuro, quiero hijos, quiero matrimonio, quiero todo contigo y quiero ganarmelo de buena forma... Hasta podríamos hacer como si no nos conociéramos, encontrarnos en un supermercado y por cosas de la vida conocernos, todas esas cursilerías...

Reí fuertemente.

—Claro, yo entiendo, Chris. Pero, no se, ¿no te hace falta el...?

—Por supuesto pero no quiero confundirnos.

Me encantaba que fuera así, de nuevo repito que su cambio había sido abismal, había dejado de lado su arrogancia y su egocentrismo, al menos conmigo, para convertirse en el hombre que toda chica sueña: guapo y romántico. ¿Lo malo? Carente de emoción sexual. ¿Que le había pasado al chico que le gustaba a cada rato y en cualquier lugar, al que siempre se le escapaban frases con doble sentido, que te nalgueaba, que te decía cosas subidas de tono al oído? Pues no tenía ni puta idea pero se había ido.

Y no pretendía que volviera a buscar chicas como loco para saciarse, sino que lo hiciera conmigo. A veces me llegaba a preguntar si era gay.

Claro que su amor hacia mí me decía lo contrario, era sumamente detallista. Sé que es horrible comparar, pero había tomado esa misma costumbre de Hero de ir por mí al trabajo, de atenderme como una princesa, de estar pendiente de mi sin hostigar. Chris me daba eso: estabilidad emocional.

—Dale tiempo —me dijo Tammy un día en que fui a visitarla —. Imagina el momento en que ya puedas montarlo cual caballo de carreras —reí —, va a ser increíble. Mira se me puso la piel de gallina —reímos juntas.

—Es que a veces me desespera. Alguna vez vi una película donde el chico era super atento con ella y amoroso pero nunca llegaba a tocarla y resultaba que era gay y solo iba a utilizarla para crear una imagen —Tammy soltó una inmensa carcajada que alertó a todos los que estaban en la cafetería y no pude evitar unirme.

—¿Estás diciéndome que piensas que es gay?

—Es que dime, ¿que hombre se aguanta tanto tiempo sin sexo? —susurré —. A menos de que tenga otra...

—No creo que la tenga, Zoé, parece muy atento contigo y que quiere ir en serio. Yo solo creo que él se está tomando todo con calma...

—Es que eso no me convence.

—Consigue un prostituto mientras tanto, ninfómana —reí. Si supiera que tengo algo mejor que un prostituto, pero me quedo callada.

Aprovecho el encuentro y el despiste para preguntarle por Hero.

—Salió del hospital hace unos días y se esta terminando de recuperar en casa —sonrió —. Me ha dicho que va a dejar de beber y fumar... Lo noté un poco más animado.

Y en serio me alegré por él. No había buscado, ni yo a él.

Con todo este rollo de que Chris no tenía apetito sexual aparente te y estaba como un palo de leña al fuego vivo, pues mi mejor opción era Finn.

Y Finn era el sueño sexual de toda chica.

Podía sentir su aura minutos antes de que cruzará por la puerta, era literalmente verlo y notar una tensión sexual enorme. Me encantaba desnudarlo, era como un nuevo fetiche que había adquirido. Nunca perdíamos el tiempo aunque al principio fuera delicado y luego se volviera rudo como a mí me gustaba.