Extra #3

11.1K 564 629
                                    

Capítulo 17: De nada sirve negarlo.

Mikhail:

Dejo a Natalie en su casa luego de haber tenido mi entretenido encuentro con Nomar.

Ella no quiere salir, por lo que tendré que comprar la ropa yo solo, o quizá con ayuda de Shawn.

— ¿Te sientes bien? —me pregunta Shawn mientras conduzco hacia su casa.

Lo veo de reojo y asiento— Tengo dolor de cabeza pero nada que una siesta no pueda reparar.

— Tienes el rostro hinchado —opina, mirándome con una mueca graciosa.

— Lo sé, genio. El imbécil de Nomar me golpeó hace solo media hora —digo de manera obvia mientras suelto un bostezo. El simple acto hace que me duela la cara.

— Siempre podemos mandarlo a golpear —Shawn me mira de manera cómplice. Ruedo los ojos, a Shawn le gusta arreglar las cosas a golpes—. Con bates y eso.

— A él no le duelen los golpes, Shawn. A él le duelen las acciones de Natalie —le explico, lamiéndome los labios resecos—. No tendré que mover ni un solo dedo para lastimarlo. Nomar se está autodestruyendo con sus acciones.

— A veces me pregunto de donde sacas esas ideas —Shawn me sonríe—. Siempre eres tan correcto y por ende cada decisión que tomas lo es.

— Es cuestión de usar el sentido común, Shawn.

— Mi sentido común dice que debemos molerlo a golpes —me da una sonrisa de boca cerrada y luego me mira con cierta curiosidad—. ¿Qué te dice el tuyo?

— El mío me dice que debo enamorar a Natalie —Shawn suelta un bufido mientras rueda los ojos.

— Eso te lo dice el corazón, imbécil. Estamos hablando de tu cabeza —recrimina, mirándome con seriedad.

— Natalie me gusta. Lo sabes. Desde el mismísimo momento en que nuestras manos se tocaron, en el que nuestros ojos se encontraron. A él le gusta igual. No convertiré esto en una competencia porque no sería justo para Nat, pero a Nomar le dolerá muchísimo que Natalie me escoja a mí—

— Eso está como difícil ¿no lo crees, hermano? —Shawn parece inseguro de lo que le dije—. Ella está ciega por el idiota de Nomar.

— Él no la trata como debería, Shawn.

— ¿Y eso qué? Existe algo llamado masoquismo —me hace saber—. Yo soy un masoquista de mierda, Mikhail. Pongamos de ejemplo mi relación con Sabrina, ella me trata como una mierda y aquí estoy. Soy un maldito mujeriego, sí, pero solo para ocultar lo mucho que la amo.

— Eso porque no has encontrado a alguien que te haga sentir mejor, Shawn —le explico con una sonrisa compasiva. Mi amigo ha estado atrapado años en esa relación tóxica con Sabrina.

— ¿Y a quién encontró ella?

— A mí. La amaré de tal manera que la haré olvidarlo todo, me hará olvidarlo todo. Shawn, en serio me gusta mucho, no sé si yo le guste a ella pero la verdad es que ella me encanta, así que haré lo que esté en mis manos para que ella me ame, para hacer que ella se olvide de ese patán.

— Espero que lo logres, Mikhail. Ella se lo merece, nadie debería amar a una persona que no siente igual. Es el peor sentimiento de toda la puta vida —me detengo frente a su casa.

— ¿Paso por ti en dos horas para ir a comprar las cosas de Natalie? —le pregunto, cuando lo veo alistarse para bajar.

— Yo iré por ti a eso de las tres —acepta, sonriéndome mientras se baja del auto—. Maneja con cuidado, puto.

Estrella Fugaz © [Completa ✔] Where stories live. Discover now