Capítulo 24 2/2

1.1K 155 47
                                    

Todavía recuerdo aquel día donde me regalaste una sonrisa bajo la luz del sol, estabas tan centrado dándole postres a las chicas que no notaste los sentimientos que desataste en mi interior.

Todavía recuerdo tu rostro de asco al ver cómo te abrazaba o me escondía detrás de ti cuando sentía miedo, pero ¿qué esperabas? Si a tu lado me sentía seguro.

Todavía recuerdo tu mirada de enamorado hacia aquellas bellas chicas, ellas eran muy bellas, yo no era ni la mitad de ellas.

Todavía recuerdo tu sonrisa al ver que Luffy me acepto de vuelta en la banda.

Todavía recuerdo tus palabras, cuando me sentía débil y reemplazable, me ayudaste.

Todavía recuerdo tu calor, aquel día fatídico, logre hacer algo por ti, te apoyaste en mi aún cuando era débil, recuerdo que como todo un tonto lanzaba "Kaenboshi", creyendo que cambiaría algo. Que iluso ¿No? Ni Zoro había logrado algo, ¿Y yo? Nada, pero a pesar de que era un tonto gritaste mi nombre, y me sentí aliviado, al menos, por un instante, fui importante, fui tú centro de atención antes de desaparecer a manos de Kuma.

Todavía recuerdo tu rostro cuando te volví a ver dos años después, pero no me notaste tan rápido como yo, las chicas habían cambiado, menos yo.

Todavía recuerdo la sangre desbordante de tu nariz al ver a las sirenas, eran muy hermosas, yo no lo era.

Todavía recuerdo tu rostro de desaprobación al escuchar como le grite a la princesa sirena, jamás permitirías que le gritara a una bella dama.

Todavía recuerdo tu alegría al ocupar el cuerpo de Nami, ¿te hubieras sentido así de usar el mío?

Todavía recuerdo tu amor ciego hacia violet, ¿Qué se sentiría ser amado por alguien así?

Todavía recuerdo la alegría que sentí al poder ayudarle a Luffy, lástima que no estuviste ahí.

Todavía recuerdo la opresión en mi pecho al enterarme que te habías ido, lástima que no pude ir.

Todavía recuerdo tus ojos de enamorado hacia Robin cuando la viste en Wano, yo solo pude fijarme en tu traje, te mirabas bien, pero cuando quise decírtelo, no me escuchaste, como siempre.

Recuerdo tantas cosas, tal vez tú no sepas ni la mitad de esto.

Tú jamás sentirás algo por un hombre, menos por alguien como yo, exactamente como yo.

¿Te digo por qué?

Porque jamás notarias a alguien con tremenda nariz.

Porque jamás notarias a alguien con tanta cobardía.

Porque jamás notarias a alguien tan débil.

Porque jamás notarias a alguien que no fuera una mujer.

Porque yo no era una mujer, y cuanto deseaba serlo, para que tú me notaras, siquiera por un instante.

●○●

¡Hola!

Agradezco cada uno de los comentarios o mensajes privados que me han enviado. En verdad que adoro cada palabra que me escriben, me motivan a seguir escribiendo.

Este corto ya lo tenía escrito desde hace un tiempo, pero no encontraba el momento adecuado para publicarlo. Pero pensé que mientras más esperaba más perdía su valor.

Así que este corto no tiene orden cronológico, pueden pensar que pensó eso luego del rechazo de Sanji o cuando estuvo enfermo. Es en su criterio.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Porque eres mi nakamaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora