Porque eres mi nakama

Capítulo 3

El sombrero de paja yacía al lado del entusiasta capitán. Este miraba desde su asiento favorito, el mar se miraba tan transparente, tan hermoso, como las olas golpeaban el barco y como pequeños peces nadaban.

Estaba relajado, era una de las pocas veces donde él no sentía un peso en sus hombros, donde no sentía una opresión en su corazón.

---¿Me estás viendo, Ace? ---pregunto al aire cerrando los ojos--- Estás decepcionado ¿cierto?

Sólo el golpeteo del agua se escuchaba, y el tranquilo latir del corazón del capitán.

---¿Es porque soy muy débil?

Abrió los ojos, con dolor en ellos. No podía seguir así, no podía preocupar a sus nakamas. Ellos eran todo para él, y tendría que protegerlos, ellos eran su vida.

---¡El desayuno está listo!

El azabache al escuchar al rubio se levantó, no tenía hambre, era extraño, no había tenido hambre últimamente.

---¡Buenos días! ---dijo antes de tumbarse en uno de los asientos

---Buenos días, Luffy ---le saludó Usopp al entrar, traía una pequeña pistola de agua--- ¿Quieres jugar?

En verdad que quería jugar, pero al mismo tiempo, estaba cansado, muy cansado.

---No, Usopp. Hoy no tengo ganas...

Usopp solo asintió entendiendo y corrió a buscar a Franky, tal vez el si quería jugar con el.

---¿Por qué Usopp no insistió? ---pregunto el pequeño reno viendo a la mayor

---Porque recordó que hoy le tocaba chequeo a Luffy ---respondió la mayor mientras bebía su café--- ¿Cómo se siente, capitán-san?

---Nunca estuve mal ---respondió antes de ver la comida, otra vez, el hambre no se manifestó.

---¡Zoro, me debes más dinero! ---decía la peli naranja enojada entrando junto a un peli verde.

---¡Maldita bruja! ¡Qué yo no gaste tu dinero en sake! ---decía molesto el peliverde, odiaba que lo culparan en algo que no había hecho.

---¿Y quien más va a querer beber sake? ---pregunto exaltada Nami, faltaba una parte del dinero que usaría para su ropa

---Yo fui.... ---admitió Luffy en voz baja, llamando la atención de todos.

---¿Bebiste alcohol? ---pregunto sorprendido el ciborg

---¿Siquiera eso es legal? ---pregunto el narizón refiriéndose a la edad mental del capitán

---Fufufu ---la arqueóloga más que sorprendida estaba divertida por la situación--- ¿Y disfruto el alcohol?

---Fue la cosa más horrible que he probado en mi vida ---respondió sin ganas

---¡Me pagaras ese dinero con intereses! ¡Me debes el doble de ese dinero! ¡No, el Triple!

---Ya estoy lleno ---dijo Luffy sin haber escuchado lo que dijo Nami, y se fue.

---¿Se habrá molestado? ---pregunto la peli naranja

Siguieron comiendo con normalidad, ya luego le preguntarían que le pasaba a Luffy.

●○●

Luffy era una persona energética, así que estar sentado y quieto no era su fuerte, pero si que le dolían esas sogas en sus muñecas, no lo entendía. Era él de goma, pero aún así no intento romperlas, Nami lo golpearía y no quería ser golpeado.

---¿Hice algo malo? ---preguntó Luffy mientras miraba al pequeño reno--- No he robado nada del refrigerador ---se defendía el pirata con un puchero y haciendo berrinche en la enfermería

---Necesitas ser revisado, Idiota ---exclamó la peli naranja al entrar con su típico sonrisa manipuladora--- ¿O prefieres que bote cada pedazo de carne de este barco para poder revisarte? 

Luffy negaba frenéticamente, a pesar de no poder comer, no tener carne era horrible, seguramente cuando se recuperará de lo que sea que tenía, tendría mucha hambre. Sólo tendría que esperar un poco, un poco más.

---Luffy---le llamó el pequeño reno---¿Hace cuánto tiempo te sientes así?

---mmm ---pensar no era el fuerte del capitán--- No lo sé 

Nami suspiro con notoria molesta, le molestaba que Luffy no le tomara importancia a su salud. Chopper solo suspiro, como si ya sabía la respuesta.

Chopper sacó una jeringa y se la introdujo lentamente en el brazo izquierdo del azabache, tendría que analizar su sangre.

---Yo...---susurró lentamente el azabache, sabía que había preocupado a sus nakamas, ese no era su propósito, solo se sentía un poco mal, nada malo--- Lo siento, chicos.

●○●

Cuando el sol ya era insoportable, Zoro se pasaba un trapo seco por su cuerpo sudoroso. Estaba preocupado, aunque prefería no mostrarlo.

Llevaba unos meses extraño, un nudo en su garganta se creaba al ver a Luffy desanimado, un extraño cosquilleo se creaba al verlo sonreír o la molestia que sentía al verlo jugar con Usopp .

Eso era inadecuado, lo sabía, pero era inevitable, se rehusaba a creer que podía ese sentimiento llegar a ser algo que no fuera amistad.

Sabía muy bien que un hombre y un hombre no se juntaban, que una pareja gay no era bien vista. ¿En que momento le llamo la atención unos músculos? O ¿En que momento la sonrisa de su capitán hacia el, le cambiaba su humor?

Tal vez si supiera que era ese sentimiento lo aceptaría, tal vez no.

---Espadachín-san ---apenas escucho la voz supo de quien provenía, esa mujer a veces era una molestia--- ¿Estas preocupado?

---Luffy es fuerte, es nuestro capitán.

La mayor solamente se sentó y coloco su mentón en la palma de su mano, analizando los movimientos del menor, una sonrisa ladina se formó en su rostro.

---Tienes razón ---dijo ella--- Lo peor que le puede pasar es que tenga una enfermedad mortal la cual haga que se retuerza de dolor y que muera poco a poco.

El menor sintió un escalofrió, a veces es esa mujer decía unas cosas increíbles. Pero a pesar de eso, no se molestó, sabía que esa mujer estaba preocupada.

---Creo que no haz logrado hablar con Franky ¿Me equivoco? ---cambio de tema el peliverde logrando ver como las facciones de esa mujer se tensaban.