El renacimiento de Chen An

Capítulo 130: ¿Chen An? ¿El Emperador Malo?

La carne sabía bien; era carne pura y natural.

Chen An echó un vistazo a Ding Sheng, que acababa de salir de detrás del biombo; se había bañado y llevaba una camiseta negra. A Ding Sheng claramente le gustaba más su propia ropa.

"¿Qué dijo?" Ding Sheng se acercó. Es cierto que consideraba a Lu Feng y Chen Yang como cómplices de Chen An, pero en este extraño mundo, eran los únicos que podían ayudarse mutuamente.

Chen An suspiró: "Dijo que no."

Chen Yang y Lu Feng no podían simplemente desaparecer en el aire, ¿verdad?

"También le pregunté si había visto a un tipo con cabello rubio y ojos azules, y que se veía un poco diferente", Chen An añadió, "¿sabes lo que dijo?"

"¿Vio a Ivanov?" Ding Sheng lo adivinó.

Chen An sacudió la cabeza: "Me dijo que la gente de aquí no se veía así. Deberían ser los extranjeros del norte, sólo que tenían un aspecto tan extraño."

Chen An vio que Ding Sheng lo había estado escuchando con atención desde que se sentó, así que tomó una rebanada de carne y la puso en el tazón de Ding Sheng. Luego continuó: "Cuando describí a Ivanov, pude ver que el chico de la taberna tenía una expresión extraña, temía que sospechara algo, así que le dije que cuando bajamos de la montaña, vimos a algunos extranjeros. Le insté a ser cauteloso porque esas personas podrían estar todavía por aquí."

"Es bueno que hayas preguntado, si le preguntara al camarero, definitivamente sospecharía algo." Ding Sheng todavía no se atrevió a decir "chico de la taberna" e insistió en llamarlo camarero.

Chen An totalmente de acuerdo. Si hubiera enviado a Ding Sheng a preguntar por ahí, pronto podrían ser considerados como lunáticos.

"Ding Sheng, ¿qué pasa si no podemos volver? ¿Has pensado en ello?"

Era su segundo día en este extraño nuevo mundo, sólo el segundo día.

Chen An no estaba del todo seguro de las palabras de Changle. Si iban a hacer el bien con las armas que tenían, ¿significaba que podían luchar contra un puñado de bandidos y ayudar a la gente común, o debían poner fin al desorden en este mundo y establecer una sociedad pacífica y estable?

"Los mayores tienden a pensar demasiado en sí mismos. Si no podemos regresar, pensar demasiado no nos ayudará. Veamos cómo va", Ding Sheng masticó la carne que le dio Chen An y sonrió con entusiasmo, "Deja de ser un pesimista; piensa en las cosas buenas, como esta deliciosa carne! ¡Es mucho mejor de lo que solía comer, y más barato, también!"

Chen An se divirtió con las palabras de Ding Sheng, ¿era un pesimista? ¿Por qué demonios este joven pensaría que es un pesimista?

*

Como lo hicieron ayer, Chen An y Ding Sheng durmieron en la misma cama la segunda noche. Aprendiendo de la experiencia de la primera noche, Ding Sheng se las arregló para dormir bien.

Por la mañana, cuando Chen An abrió los ojos y se encontró en un abrazo muy íntimo con Ding Sheng, se puso rígido por un momento.

Ding Sheng pronto abrió sus ojos también y sonrió a una cara a centímetros de la suya: "Buenos días, tío Chen."

"Buenos días." Chen An se las arregló para desenredarse discretamente de los brazos de Ding Sheng. Luego se dio vuelta y se levantó de la cama.

Aunque era muy suave en sus movimientos, Ding Sheng todavía sentía que Chen An trataba de mantener una distancia, y por lo tanto tenía una sensación incómoda en algún lugar dentro de su pecho.