#Día cuatro; Intriga. { Rubelangel }

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El castaño jaló del brazo al rubio oscuro e hizo que se sentara en su regazo. Miguel pasó sus brazos a la delgada cintura de Rubén y le dio un fuerte abrazo, mientras le daba besos mariposa en el cuello, hombros, y rostro. Miguel levantó la vista hacía su pareja, y se miraron fijamente durante unos segundos. Ruben se acercó más al rostro del contrario, quedando a centímetros de que sus labios se tocaran. Duraron largos segundos así hasta que los labios delgados de Mangel, como le llamaba su pareja, aterrizaron en los regordetas del rubio. El beso fue lento, tímido, sin lengua y lleno de amor. Al separarse, el menor dio un último beso en el pecho de Rubén.

— ¿Qué es lo que planeas? —pregunto el mayor de los dos lleno de intriga, ciertamente nervioso.

No era ni las siete de la mañana y Miguel Ángel ya estaba más que cariñoso. Con decir que lo había levantado a besos lo decía todo. El aludido soltó una ligera risa encogiéndose de hombros,  fingiendo inocencia.  Rubén estaba más que seguro que algo pasaba, pero prefería no presionar mucho las cosas.

— ¿Tiene que pasar algo para que quiera besarte?  —cuestionó sintiéndose ofendido, negando con la cabeza a la par que sus dedos se deshacían en la espalda de su novio, alzando de la poco su camisa de dormir.

— Si cuando son las seis y media de la mañana, tío —bromeó. Vio a Mangel fruncir el ceño y lo beso una vez más sin problemas— Aunque puedo acostumbrarme. 

Challenge de escritura. { Youtubers }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora