She will be loved |COMPLETA|

Capítulo 48

Cuatro meses después.

Gil alzó la ecografía frente a ella, para que Grace y su madre pudieran verla mejor.

—Es...—dijo Grace, fingiendo que sentía emoción, pero al final desistió—la verdad es que no veo absolutamente nada, Gil Elizabeth.

Gil se echó a reír.

—Claro que no ves nada, no sabes leer una ecografía—le indicó—no hay mucho que se pueda apreciar. De todas formas creo que sería lindo conservarla.

—Claro que sí—dijo Esme con emoción—yo tengo las tuyas...en...en algún lugar.

Gil sonrió de medio lado mientras su madre se levantaba a buscar sus ecografías, Grace, todavía en el sillón puso los ojos en blanco.

Gil no podía más que compadecerla, odiaba estar en la casa de su padre.

De hecho, Gil también lo odiaba.

No venían mucho, durante todo este tiempo ella se había presentado tres veces y Grace dos (incluyendo esta visita) y todas y cada una de ellas habían sido para Esmeralda, ninguna para George.

Las cosas estaban mejores desde hace un par de meses ya.

Aunque...no mucho.

Gil sabía que su padre todavía las vigilaba, esperando el momento preciso para recuperar todo el control que tenía sobre ellas. Y por supuesto, ellas estaban listas para rebelarse contra lo que fuera.

Siempre estaban a pie de guerra.

Pero las cosas se habían mantenido en una paz fría debido a que George, fuera como esperara o no, había conseguido lo que quería.

Gil estaba en Seattle, con Cole como padre de su hijo, lejos de cualquier hombre que él no aprobara. Por el momento, eso le parecía una victoria.

Lo que no hacía más que molestar a Grace. Gil sabia que su hermana se sentía atrapada, sabía que no se sentiría libre creyendo que de alguna manera, sus vidas todavía seguían siendo lo que su padre quería para ellas.

Pero Gil no podía decirle la verdad, no podía decirle quien era el padre de su bebé o Grace iría personalmente a Texas y traería a Jay a rastras y le patearía el trasero.

—¿Y qué dice Cole? —preguntó con algo de desdén—me imagino que debe estar emocionado.

Gil trató de forzar una sonrisa. Grace todavía no soportaba del todo a Cole, a pesar de saber que estaba de su lado. Ella sentía que se había aprovechado de Gil, que la había embarazado sin amarla, pensaba que Cole no quería a "su hijo"

Cole estaba haciéndo lo mejor que podía y Gil lo sabía, la acompañaba a las citas, la llevaba a cenas, realmente iba a verla a la mansión de Grace todo el tiempo.

Para el ojo común parecería un padre-a-ser dedicado, para Grace, quien era una experta en esconder cosas, había algo raro, pero como no podía entender el origen de esto, lo atribuía a que Cole no estaba feliz con el embarazo.

—Está muy feliz—mintió Gil—es solo que está nervioso, ya sabes, es la primera vez que va a tener un hijo.

—Mmm—dijo Grace, tomando su bolso.

Por supuesto que no le creía nada.

—¿Te vas? —preguntó Gil sorprendida.

Grace asintió mientras se ponía de pie, el rubor en su rostro fue ligero, pero suficiente para que Gil lo captara.

—Ahh—dijo Gil, la burla palpable en su voz—¿Te vas a ver con tu amorcito?

—¡GIL! —protestó Grace, horrorizada—sabes que no somos nada. Vamos a empezar un negocio juntos y ya, eso es todo lo que hay.