Encargandome de otro mundo. Capitulo 46: Leccion.

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No puedo decir que fue una gran sorpresa ver a Zentrus y las chicas viajando junto al grupo mercante...mi primer pensamiento fue sobre quien estaba cuidando y dirigiendo la ciudad de los elfos oscuros, aún que descarte la idea de que nos dioses tan experimentados en gestión de personal no tomaran las medidas necesarias.

Desde el momento en que el trío de dioses irrumpio en mi mundo sin invitación, comprendi que ellos, o al menos Zentrus, mantenía un status y libertad que lo llevaban a ser espontaneo, al final solo acepte lo que veía como algo normal.

Durante las primeras horas de la mañana, Sui fue instruido por Zentrus sobre el mundo de los mercenarios y su trabajo, ayudandolo a integrarse y conversar con los otros reclutas. Debido a mi tiempo recluso en el hospital, mi nivel social era bastante bajo, por lo que vi oportuno que Zentrus diera pie a que Sui pudiera abrirse a este gran grupo de personas.

La marcha se mantenía pacífica, la formación estaba diseñada para minimizar ataques de criaturas. En la parte delantera viajaban los demonios, dejando un rastro de hedor que ahuyentaba a las criaturas, exponiendo al peligro a los hombres de la retaguardia, aún que en este lugar se encontraban la mayoria de los mercenarios, incluyendo a Sui.

En las primeras 4 horas fueron atacados por 9 grupos de bestias, las cuales fueron abatidas facilmente entre los numerosos magos desde la distancia, también habían guerreros que poseía bendiciones de fortalecimiento, por lo que con sus espadas podían cubrir a los magos de cualquier ataque sorpresa.

Los mercenarios de mi mundo eran humanos que prestarian su fuerza por dinero, incluso si significaba asesinar a otras personas..en cambio, en este mundo los mercenarios eran un grupo muy unido y respetado en las ciudades, escoltando mercaderías de baja o urgente necesidad, en el peor de los casos serian ellos quienes llevarian medicina o comida a pueblos asolados por enfermedad o hambruna, aún sin un mercader que pague por sus servicios

Durante el medio día se había tomado el primer gran descanso, dando tiempo a que los hombres y mujeres pudieran descansar y comer antes de continuar. Durante la comida, Sui y la elfa Elena que viajaba con el se juntaron para comer, aún que la comida consistía en carnes secas y panes de larga vida, todos se veían con entusiasmo y curiosos por su nuevo compañero, después de todo era sabido que era muy raro que un mago de fuego pisara un bosque elfo tan tranquilamente.

Durante el interrogatorio y risas de los mercenarios, pensé que era un buen momento para que hiciera mis propias preguntas, por lo que vole hacia el trío que se mantenía conversando en la lejanía.

Tatsui -Esas prendas no los favorece-. Comente mientras volvia a mi apariencia humana, burlandome de las túnicas que parecían fracasar en mantener un perfil bajo.

Rea -¿A si? Pues tu te ves mas apuesto como insecto-. Respondió mientras se acercaban a mi.

Zentrus -Hola tatsui, no esperaba verte tan pronto-.

Tatsui -Eso deberia decir yo...creía que esperar a Sui en la ciudad de los elfos oscuro-.

Freya -Ese era el plan..pero Zentrus no estaba dispuesto a esperar, se puso en contacto con la ciudad enana y tomo el liderazgo de los mercenarios..-.

Rea -Nosotras fuimos arrastradas como de costumbre-. Se quejaba mientras se encogia de hombros.

Zentrus -Ya paren de quejarse tanto, dejen de actuar como niñas y asuman que son diosas-. No pude evitar pensar que el que actuaba como niño era otro..

Tatsui -jaja..¿Y bien? ¿Que opinan de Sui?-.  Pregunté curioso, mientras los dioses se veían entre si.

Rea -No es nada sorprendente, solo un humano analítico como tu-.

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