Encargado de otro mundo.

Encargandome de otro mundo. capitulo 36: Exploracion.

Gracias al reporte detallado de Priscilla pude visualizar claramente lo ocurrido con el grupo de Zentrus en mi ausencia.

Zentrus -Bien, estoy emocionado por ver que ha creado tu pequeño, Freya-.

Freya - También lo estoy, espero poder ver algunas criaturas maravillosas como el unicornio y pegaso que compre-.

Zentrus - Si no les molesta tomare el liderazgo de ahora en adelante-.

Freya - Estoy de acuerdo-.

Rea - De todas formas planeabas hacerlo, ¿verdad?-.

Zentrus - A si es-.

Con una sonrisa en su rostro, el grupo de dioses, liderado por Zentrus, avanzo por las llanuras durante mas de una hora, Rea, transformando sus brazos en largas y fuerte alas de ave, surcando los cielos pudo vislumbrar un río repleto de criaturas, alertando al grupo.

Rea -¿Que tal si atacamos?-.

Freya -No tenemos armas, ni informacion, podria ser peligroso, ¿Que tal si solo seguimos explorando?-.

Zentrus - No necesitamos armas por ahora, ¿O si, Rea?-.

Rea - No necesitas preguntarlo-. Señaló mientras levantaba una de sus piernas y movía sus garras.- Me gusta este cuerpo, veamos como trabaja-.

Con el grupo decidido comenzaron a caminar rumbo al río, mientras se escondian entre los arbustos pudieron observar multiples criaturas extrañas bebiendo sus aguas.

Rea -¿Que haremos, Deberíamos atacar a alguno o luchar contra todos?-.

Freya -. Son muchas criaturas, lo mejor seria buscar un grupo mas pequeño e inofensivo-.

Zentrus -hmm...ante la duda, lo mejor es dejar la decisión al enemigo-.

Rea -¿A que te refieres?-. Sin recibir respuesta, Rea observo a Zentrus acercarse al enemigo sin vacilar.

Cuando los arbustos provocaron ruido las cabezas giraron hacia su dirección, al ver como una figura humanoide emergia de entre las hiervas, las bestias entraron en pánico, las criaturas acuáticas se sumergieron, algunas otras bestias como el jackalope huyeron despavoridos.

Cuando la conmoción se detuvo Zentrus sonrió al presenciar que 3 criaturas permanecian de pie frente a el, atentos y listos para atacar, uno de estos era el cocatriz, una pequeña criaturas con forma de dragón pero con cabeza y cola de gallo, el hipocampo, que con su parte superior de caballo y posterior de pez, se acerco a la orilla, amenazando con un relincho, por ultimo se hallaba una ninfa, la cual previamente se hallaba acariciando al hipocampo, abandonando el agua con la presencia de Zentrus, su cuerpo tenia forma de mujer, pero su cuerpo era de una madera recubierta en moho.

Zentrus -Gracias por quedarse-. Agradeció Zentrus, antes de ser atacado.

El primero en actuar fue el hipocampo, con un gran relincho las agua temblaron y esta salio volando en su dirección, generando una fuerza aplastante que Zentrus recibió de frente.

Antes de ser impactado por la fuerte presion del agua, Zentrus logro pronunciar un cantico, "Dios de la tierra, cubre mis brazos para aplastar a mis enemigos" con esto, sus dedos y antebrazo fueron cubiertos por una gruesa piel de roca, con la cual logro resistir el impacto del agua, empujandolo pocos centimetros.

Zentrus -¡Rea, Elije uno o me quedare con toda la diversión!-. Grito con una gran sonrisa, mientras su cuerpo se hallaba empapado.

Rea -¡Entendido!-. Grito mientras comenzaba a volar entre los arbustos, elevandose a gran altura.