Villano || Libro 1 Terminado©

Capítulo 37||

Emma Jackson

Joder, el reloj marca las 6:35 pm, llenándome de angustia, ni siquiera me he bañado todavía, me he pasado toda la mañana y parte de la tarde buscando alguna prenda, algún vestido que colocarme, pero nada me ha resultado, nada me ha agradado, de repente todo lo que hay en mi armario me resulta desagradable y horrible. Acostumbro a colocarme lo primero que encuentro, pero simplemente el día de hoy no he podido, ha sido un jodido peldaño, ha sido un completo estrés.

Dejo de pensar y de dar vueltas como loca en la alcoba, yendome por mi movil, decidiendome finalmente por marcarle a Scar.

—Emmie, ¿Qué sucede? —Pregunta luego de responder, al quinto tono.

—Necesito tu ayuda. —Me apresuro en decir, sonando tan desesperada como estaba, alertando sus sentidos.

—¿Estas bien? ¿Que pasa? ¿En qué quieres qué te ayude? —Cuestiona de inmediato, notablemente preocupada.

—Tengo una cita con Aron a las 7, y no se que ponerme. —Suelto atropelladamente, se ha sonado tan enredado que dudo que me haya entendido.

—¡Espera, ¿Qué?! —Exclama tremendamente alto. —¿Una cita? ¿Con Aron? ¿Emma acaso estas loca? ¿O es qué has decido seguir con mi plan?

—Luego hablamos de ello, necesito que vengas aquí ahora. No se que ponerme y ya casi es la hora. —Expreso tratando de calmarme, no lo estoy pero necesito relajarme sino acabaré volviéndome loca.

—Mujer es solo una cita, tranquilízate, estaré ahí en cinco minutos. —Contesta, colgando enseguida.

Respiro excesivamente profundo, para luego entrar al baño, a tomarme una ducha fugas, últimamente no he podido bañarme con calma. Salgo del baño con una toalla envuelta en mi cuerpo, me siento en mi cama, revisando mi reflejo frente al espejo, y exactamente a los cinco minutos llega Scar, la casa de sus padres no se encuentra muy lejos de la mía, pero si que ha volado, no se como putas le ha hecho, pero se lo agradezco.

—Ten apresúrate y cámbiate ya son las 6:46 pm, aunque no debes preocuparte normalmente las chicas tardamos mucho en arreglarnos. —Me dice suavemente, mientras me entrega la bolsa en mano.

—Ya lo se, pero me ha dicho que no le gusta esperar. —Respondo, provocando que ruede sus ojos, sujetando la bolsa en mis manos.

—Con más razón debes hacerlo esperar, Emma. —Replica con su ceño sumamente fruncido.

—Ya lo se, solo que... iré a cambiarme. —Suelto sin querer alargar la conversacion, entrando nuevamente a mi alcoba. Se que debería hacerlo esperar y no obedecer sus palabras, pero recién estamos comenzando esto y no quiero liarla, no por ahora.

Reviso la bolsa y saco dos vestido de esta, uno bastante corto y sensual, el otro igual de corto, pero más conservador, me decido por el y me lo coloco de inmediato, me queda sumamente ajustado debido a que Scar es mucho más delgada que yo, se me ve realmente bien por lo cual, rexhalo hondo, y me lo quedo sin problemas.

Me coloco mis tacones altos plateados, los cuales use para ir a la fiesta la noche anterior, llamo a Scar y en menos de dos segundos aparece en la habitación.

—Te queda genial, incluso mejor que a mí. —Suelta, haciendo un leve puchero, llevandome hasta el espejo. —Toma asiento, arreglaré tu pelo y maquillaje.

—¿Qué hora es? —Pregunto nerviosa, haciendo lo que me dice.

—Tranquila ya casi son las 7 pm, pero terminaremos en pocos minutos, además ya te dije que debes hacerlo esperar. —Me recuerda, y me quedo en silencio, dejando que empiece. Toma en manos mi cabello y me hace una bonita trenza de lado, la cual llega hasta más abajo de mis senos, retoca mi maquijalle con sumo cuidado, despacio, y empiezo a cabecear, a sentir sueño.

—Listo. —Exclama y me sobresalto. —Has quedado mucho más que hermosa, Emmie. —Me dice y concuerdo con ella, me ha dejado realmente bien.

—Muchas gracias, Scarie. ¿Que hora es? —Cuestiono preocupada y más nerviosa aún.

—Las 7:10 Emmie, te he dicho que iba a ser rápido.

Respiro un poco más aliviada, ya que solo me he tardado unos diez minutos más. Me levanto de la silla apresurada, recojo mi celular de la pequeña mesita, donde veo dos llamadas pérdidas de Aron, debe de estar furioso, pero que más da. Lo entro en mi pequeño bolso, me doy una última mirada en el espejo y me apresuro a caminar hacía la puerta, aun mas nerviosa.

—Espérame Emmie ¿O es qué piensas dejarme encerrada aquí? —Cuestiona Scar apresurandose a recoger sus cosas, siguiendome.

Abro la puerta y, mis ojos captan el rostro algo molesto de Aron, el cual esta con una de sus manos levantada. Trae una camiseta blanca junto con unos jean negros y tenis, lo que hace que me sienta totalmente ridícula, estupida y fuera de lugar con un vestido. Dios, debí de haberme decido por los vaqueros.

—Hola. —Le saludo acabando con el silencio sepulcral y la incomodidad. Scar permanece en silencio detrás de mí. Él me recorre con sus ojos y suaviza su mirada al instante.

—Has tardado. —Dice levemente calmado.

—Lo siento. —Me disculpo y Scar me codea disimuladamente.

—Esta bien, vamos. —Dice, me toma de la mano, halandome contra su cuerpo. Baja su mano a mi cintura y luego observa a Scar, arqueando una ceja. —¿Invitasteis a tu amiga a nuestra cita? —Pregunta sin quitarle la mirada, confundido. Así que después de todo sí es una cita... Volteo mi rostro, y sonrio levemente sin poder evitarlo.

—No, yo ya me iba. —Responde Scar nerviosa, pasa por mi lado y baja extrañamente por las escaleras.

—Ahora sí, vámonos. —Vuelve a decir, cierro la puerta bajo llave, y nos entramos en el ascensor. —¿No crees que has exagerado un poco? —Cuestiona el divertido, una vez que llegamos abajo y salimos del ascensor.

—¿Exagerado? —Repito confundida.

—Sí, con unos jeans estabas bien, aunque no voy a negarte que ya me traes jodidamente duro con ese vestido. —Comenta con descaro, abro la puerta de su coche, entro junto a él, volteando mi rostro a su direccion.

—No me dijiste a donde íbamos a ir. —Respondo, encogiendo mis hombros.

—Y tu no preguntaste. —Canturrea en su tipico tono de burla. —Iremos a un casino. —Vuelve a decir, y lo miro sorprendida.

—No se jugar. —Articulo nerviosa.

—Lo se. —Murmura, y vuelve a enfocarse en conducir.

No vuelvo a cuestionar y me enfoco en el transcurso, media hora después se detiene frente a un enorme edificio con el nombre "Casino Star" estampado en lo alto con una larga fila reluciendo en este. Sale del auto y yo lo hago igual.

Me toma de la mano, congelandome, sorprendiéndome con dicho acto, no digo nada, comenzamos a caminar, y el guardia a penas ve a Aron abre la puerta, nos adentramos en el lugar, las luces de colores parpadeantes relucen en todo el espacio, y la fuerte música impacta contra mis oídos. Hay alrededor de doscientos personas aquí, por suerte el espacio es bastante amplio, Aron nos conduce hasta la segunda planta, donde el nombre VIP parpadea en diferentes colores.

Seguimos caminando, hasta que llegamos a una enorme mesa de juego con muebles negros alrededor, me lleva hasta uno, donde están sentadas unas cinco personas, dos chicos y tres chicas, ambos bastantes guapos, y las chicas igual de hermosas.

—En hora buena Aron, Amy ya me tenía hasta los huevos preguntándome por ti. —Exclama uno de los chicos, uno rubio, la chica de pelo rojo y ondulado empuja su hombro. Aron suelta mi mano suavemente, aumentando mi pulso, ¿Qué demonios, a caso tiene algo con esa chica?, la molestia me toma en seguida. —Wow, ¿Quién es la bella dama? —Pregunta el chico, enfocando sus ojos en mi, percatándose de mi presencia.

—Emma. —Me apresuro a presentarme, ya que Aron se ha quedado en silencio, observando al chico algo indiferente y molesto.

—Es mi chica. —Aclara a los pocos segundos, dejando su mano alrededor de mi cintura, sorprendiendo a sus amigos y sorprendiendome totalmente a mí.