xxviii. sacrificios

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Aiko odiaba sentirse de esta manera, porque no sabia como describir sus sentimientos exactamente. Se sentía estúpida, inmadura inclusive. 

Su madre le aseguraba que sus sentimientos eran totalmente validos, no tenia que avergonzarse de ellos. Sentir era algo poderoso, al menos eso decía ella. Aiko pensaba que estaba loca. Aiko no podía expresarse igual de bien que su madre, a pesar que ella era una poeta. Se quedaba corta a la par de su procreadora. 

Y mientras Aiko trataba de definir que era lo que sentía, la mujer corriendo por su mente se apareció por el marco de su puerta. 

''¿Aiko? ¿Estas despierta?'' le pregunto con cuidado, porque si su hija estaba dormida no quería molestarla. Aiko la miro y sacudió su cabeza ligeramente ''Oh, bien. Tienes una visita.'' le anuncio y desapareció por unos segundos. 

¿Una visita? Aiko no quería ver a nadie en estos momentos, mucho menos hablar con quien sea que fuera. Solo ocupaba estar sola por un rato, al menos hasta que tuviera que volver a la secundaria y ser forzada a hablar con alguien. 

Aiko no tuvo tiempo de imaginarse quien podía estarla visitando, porque la figura alta y delgada de Luke Hemmings apareció en el mismo lugar donde su madre estuvo hace poco. ¿Se debía de sorprender que era el? Si ya no tenia otros amigos que se preocuparan por ella. Tachar eso, ¿se debía de sorprender que Luke Hemmings se preocupa por ella? 

''¿Que haces aquí?'' le pregunto Aiko, queriendo contestar la duda en su mente. Si Aiko podía ser honesta, el era parte de la razón por la cual se encontraba tan conflictiva con sus sentimientos. No la razón principal, pero definitivamente parte de. 

Y es que desde que ella y Luke decidieron empezar una amistad, había sido un tiempo de Aiko aprender a congeniar con alguien que no fuera superficial como Carson y Serena. Nada de ''¿que marca estas usando?'' o cosas por el estilo. A Luke no le importaba el reciente drama de las Kardashians o el nuevo álbum de Beyoncé. Pero a Luke no le gustaba hablar de sus propios gustos, así que no sabia como llegar a el. 

''¿Acaso no es obvio? Te estoy visitando.'' respondió Luke, sarcasmo en su voz. Aiko suspiro y rodó sus ojos ''Tal vez sabrías que vendría si hubieras visto tus mensajes.'' ''Tal vez sabrías que no quiero ver a nadie si utilizaras la lógica.'' respondió Aiko al comentario de Luke. 

Luke rió ligeramente, apreciando el veneno en la respuesta de la chica. Se apoyo en el marco de la puerta de Aiko, esperando que ella lo dejara pasar. La habitación de Aiko era un reflejo perfecto de ella, al menos eso creía el. Con posters de sus bandas favoritas pegados en su pared, aunque fueran pocos. Un estante lleno de libros que ya había leído, probablemente mas de una vez. No había algo que lo hiciera pensar diferente sobre ella. 

''Yo se que no hemos sido amigos por mucho tiempo, pero si se que algo te sucede.'' le dijo Luke y Aiko suspiro sabiendo que tenia razón. ''No tienes que contarme que te pasa si no quieres, pero cuando estés lista, puedes hacerlo.'' le aseguro el rubio y ella asintió. ''En fin, no vine por eso en realidad.'' 

Luke se dijo a si mismo que se quedaría parado el resto de la noche si esperaba que Aiko lo dejara entrar así que se acerco con cuidado a ella, la chica se sentó a la orilla de su cama, haciendo un ademan con su mano, invitando al chico que se sentara también. 

''Alguien me pregunto por ti y supongo que lo correcto seria pasar el mensaje.'' Aiko lo miro confundida, no entendiendo a que o quien se refería.  Su mente empezó a pensar en todas las personas posibles; Michael siendo la primera en venir a su mente, pero estaba segura que el chico nunca tuvo contacto con Luke. Después pensó en sus dos ex amigos, Carson y Serena, pero luego recordó que Carson no hablaba con nadie que no fuera Serena y esta misma odiaba a Luke con pasión. 

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⏰ Última actualización: Mar 24, 2020 ⏰

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