iv. ayuda

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Aiko estaba empezando a preocuparse por el destino de su clase de Calculo, se sentía tan tonta por no poder tener el valor suficiente de hablarle a Luke Hemmings o tan siquiera a Calum Hood; dos chicos cualquiera.

Temprano en la mañana, antes de que su clase de Ciencias Sociales comenzara, se hizo camino a la Administración donde estaría entregando su poema para el periódico escolar del mes. Se sentía muy a gusta con el resultado y esperaba que a todo el mundo le gustara también.

Su usual ser con ánimo entro a la oficina, para encontrar la caja de entregas en una de las mesas presentes, la secretaria estaba distraída escribiendo algo en su computadora. Aiko la saludo de todas maneras, aunque solo recibió un 'hola' en murmuro de parte de ella.

-Ehm, buenos días.- escucho de una voz un poco familiar, su cabeza volteo para ver a Luke Hemmings tratando de llamar la atención de la secretaria. -Vengo a pedir una hoja de traslado de clases.-

-Cariño, ahorita estoy un tanto ocupada. ¿Por qué no vuelves a la hora de salida?- le hablo con amabilidad la secretaria, por fin quitándole la vista a la pantalla de su computadora.

-Es urgente.- trato de aclararle el pero la secretaria no iba a ceder.

Aiko miro esto con atención, notando la frustración de Luke con la Secretaria. Pero de todas maneras, Luke se dio por vencido, diciendo que estaría puntualmente en la salida.

'Vamos, puedes hacerlo. Hazle la pregunta, es solo un chico.'

Así que, Aiko le hizo caso a su mente, pensando que tal vez esto sería a diferente que con Calum. Le siguió el paso a Luke, el cual estaba cargando su mochila y papeles en mano. Para alguien que era muy popular, no era saludado por todos los alumnos en los pasillos como usualmente lo hacían con otras personas.

-¡Oye!- lo llamo Aiko sin utilizar su nombre, sintiéndose un poco intimidada por él; era patético.

Luke se dio cuenta de los constantes llamados de la chica pero no le hizo caso, debido a que logro encontrar a su grupo de amigos cerca de sus casilleros. Si lo veían hablando con ella, lo más probable es que se burlarían de el cómo lo hacían con Calum; Luke no tomaría ese riesgo.

-Sé que me estas escuchando, ¿podrías parar por unos segundos?- comento Aiko, esta vez tomando la suficiente confianza para tomarlo de la muñeca y hacerlo detener.

-¿Qué diablos quieres?- le pregunto Luke un tanto enfadado, porque esta chica desconocida lo estaba molestando y la secretaria había decidido ignorarlo. -Estoy ocupado.-

-No creo que lo estés.- murmuro Aiko a la obviedad -Ocupo un favor de tu parte.-

-¿Acaso te conozco?- pregunto Luke retóricamente a como esta chica de la nada cree que tienen la suficiente confianza para pedirle favores.

-No.- contesto ella con una mirada seria, sintiéndose irritada con la actitud del chico -Pero ocupo tu ayuda. El Profesor Sabatt me dijo que tu eres bueno con los números, y ocupo un tutor, o si no reprobare Calculo.- le explico Aiko, rezando que el chico tuviera compasión con ella.

-Bueno, lamento decírtelo, pero Sabatt te mintió. No soy bueno con los números, yo también estoy reprobando.- mintió Luke, ahora enojado porque ella sabia su secreto. -Aunque conozco gente que si es buena...-

-No, yo le creo al Profesor, se que eres bueno.- lo interrumpió Aiko, haciendo que Luke empezara a irritarse con su presencia. -Si no me quieres enseñar solo dime.-

Y antes de que Luke pudiera contestarle, su novia apareció a su lado, dándole un beso en la mejilla y entrelazo su brazo con el de él. La mirada de Kimberly Anne no fue de amabilidad o tan siquiera su sonrisa mostraba cortesía. Los dos juntos parecían un mal dúo.

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