Effloresce

viii. llamadas

Calum chequeo su celular una última vez esa noche para ver si su mejor amigo, Michael, había contestado sus mensajes. Como siempre, nada. Y se estaba empezando a cansar de su comportamiento. Calum no había hecho nada en lo absoluto para molestar a Michael.

-¡Hood!- escucho de la voz de Ashton Irwin, llamándolo desde la entrada de la casa ruidosa, el chico de cabellera oscura levanto su mirada para encontrarlo con una bebida en mano y una sonrisa gigante -Ven, entra.-

Calum le hizo caso, y lo siguió hasta dentro de la casa, la cual estaba repleta de personas de su edad bailando y bebiendo, ya era una costumbre. Ashton le empezó a hablar sobre que ya días no lo miraba y que la última vez que lo miro tenía unas mechas rubias en su cabello.

-Fue una apuesta.- le aclaro Calum, llegaron a la barra de la cocina donde las bebidas se estaban sirviendo.

-Steve, sírvele algo a mi amigo aquí.- le ordeno al chico que estaba atendiendo en la barra, el cual asintió y le preparo lo mismo que Ashton estaba bebiendo. -Te miras más alto.- hablo Ashton a Calum.

-¿La pubertad?- le respondió dudoso, Ashton solo rió y negó con su cabeza.

Ashton le hablo sobre su experiencia en la Universidad y que la estaba disfrutando mucho más que su tiempo en la Secundaria, le hablo sobre su trabajo de medio tiempo que usaba para pagar la renta del apartamento donde vivía con dos de sus amigos y ayudar a su familia; con la cual siempre había sido unido.

-Cero novias.-

-¿Cero novias? ¿Es en serio?- le pregunto Calum a su amigo, el cual sonrió un tanto orgulloso y negó con su cabeza. -Vaya que la Universidad cambia a las personas.- a la mención de esto, Ashton rió.

Pasaron un rato mas juntos hasta que su amigo, Daniel Feldman, se les unió a charlar. Y su conversación no tenía mucha consistencia, y Calum tampoco les estaba prestando mucha atención debido a que su mente se estaba haciendo mil y un teorías sobre porque Michael no le contestaba sus llamadas o mensajes.

-Ven, Calum.- Daniel le dijo a Calum, poniendo su mano en su hombro y dándole un pequeño empujón de regreso a la realidad.

Calum siguió a Daniel y Ashton, que se estaba haciendo camino hasta la pista de baile, pero el chico sabia que ellos no iban a hacer lo se debía realizar ahí. Ashton probablemente hablaría con sus conocidos y Daniel trataría de coquetear con chicas, mientras Calum solo se quedaba parado mirando todo suceder.

Pero esta vez fue diferente, porque parecía que esta vez sus amigos de veras querían hablar sobre la vida de Calum. Le hacían todo tipo de preguntas, desde su familia (especialmente sobre Mali), sobre sus estudios, sobre el equipo de fútbol, e inclusive sobre alguna chica especial en su vida.

-¿Chica especial?- les pregunto Calum, para confirmar si lo que sus oídos habían escuchado era cierto.

-Sí, Hood. Desde que tengo recuerdo de conocerte, no te he visto con una chica.- hablo Ashton, y Calum hizo una mueca.

Le encantaban las chicas, pero Calum no era como Ashton que iba de chica en chica cuando quisiera. Ya que tenía una hermana mayor, había sido educado de una manera diferente hacia el trato de las chicas. Había tenido unas cuantas citas, una que otras chicas como algo platónico, pero nunca nada serio.

-Al momento, no.- expreso Calum, apenado que a comparación de sus amigos, su vida amorosa era una desgracia.

Al finalizar de hablar de esto, el mar de personas se empezaba a despejar de la vista de Calum, para enseñarle a Aiko Marie bailando al ritmo de la música que sonaba muy fuerte de los parlantes. Quería maldecir por dos razones: