vi. invitaciones

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Aiko levanto su mirada del ejercicio de calculo que Luke Hemmings le había colocado en su cuaderno cuadriculado. El se encontraba enfocado en su celular, sin prestarle atención a Aiko, ya que confiaba que la chica estaba trabajando por su cuenta; sin saber que ella estaba totalmente confundida.

Tenía este problema de nunca decirle a las personas cuando se encontraba en algún tipo de problema, y mas con sus maestros. Y tal vez esa era la razón por la cual estaba cerca de reprobar Calculo.

Luke aparto su mirada del celular, estaba mensajeandose con Kimberly Anne, su novia, explicándole que no podía llamarla porque estaba ayudando a su madre con unas cosas; una pequeña mentira. Noto que Aiko rápidamente quito su mirada de él y la regreso a su cuaderno, pretendiendo que estaba trabajando.

-¿Estás trabajando?- le pregunto el chico a la chica del afro, la cual asintió sin quitarle la mirada al complicado ejercicio. -Déjame ver tu avance.-

-No, no, yo lo tengo controlado.- se negó Aiko rápidamente, y Luke rodo sus ojos sabiendo que no lo tenía.

-Aiko, sé que no estás trabajando. Estoy seguro que no entendiste nada de lo que te explique.- le dijo Luke, descubriéndola haciendo que ella suspirara y asintiera.

-En mi defensa, no vengo preparada para aprender.- le revelo y Luke rió ligeramente. -Lamento ser una pésima estudiante.- se disculpo con un pequeño puchero.

-Eres mi primera estudiante, así que no puedo juzgarte. Todos aprendemos de maneras diferentes.- le explico Luke, encogiendo sus hombros. -Creo que para que te sientas mas cómoda, deberíamos de conocernos un poco más, ¿te parece?- le ofreció.

Aiko acepto y el par de adolescentes empezó una larga platica sobre cada uno. Luke comenzó a charlarle sobre él, y lo que hacía en su tiempo libre. Le hablo sobre su familia, sus amigos, e inclusive sobre su novia.

-Era un tanto...complicado, Aiko. Yo era prácticamente un Don Nadie en la Secundaria hasta que Kim se fijo en mi.- le explico a la chica, la cual no entendía muy bien cómo es que Luke era popular sin tener algún tipo de talento especial. -Y sabes, a veces ni yo lo entiendo.-

Y aunque Kimberly Ann no fuera la persona favorita de Aiko, se notaba que ella hacía a Luke feliz por la forma de como hablaba sobre ella; con una sonrisa y mejillas enrojecidas en su cara. Era lindo ver a Luke Hemmings de esta manera, parecía algo que solo sucedía una vez en la vida y solo Aiko lo iba a presenciar.

Cuando fue turno de Aiko de hablar sobre sí misma, fue bastante precisa. Le hablo sobre sus padres, sus amigos, e inclusive sobre su escritura.

-Es algo que he hecho desde hace años, no es nada del otro mundo.- concluyo ella y Luke asintió, se sentía un tanto mal que nunca se había molestado en leer sus poemas.

-Entonces, ¿nada de novios?- le pregunto Luke curiosamente al hecho que Aiko no había mencionado ningún tipo de chico importante en su vida, aparte de Carson, pero todos sabían que eso no estaba ni por cerca.

-Bueno, si he tenido pero no era nada serio, ¿sabes? No he encontrado a alguien como Kimberly lo es para ti.- le explico y Luke asintió. -Tampoco estoy desesperada por tener un novio.-

-¿Qué hay de Calum?- le pregunto Luke y Aiko trato de no atorarse en su saliva

-¿Calum, como Calum Hood?- le pregunto Aiko a Luke, tratando de confirmar que lo que sus oídos habían escuchado era correcto.

-Si, Aiko, ¿qué otro Calum Hood hay en el Colegio?- hablo Luke entre risas silenciosas

Todavía la hacía sentir incomoda hablar sobre él, y es que lo del anuario fue un simple mal entendido que todos parecían tomarse en serio. Era una simple pagina en un libro, no es como si expresara que Calum y Aiko debían ser una pareja porque si. Los dos nunca habían tenido una conversación estable (Si no contamos donde Calum fue a darle el numero de Luke) Y si por si fuera poco, Calum parecía detestarla.

EffloresceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora