BTS Imaginas

소우주 (Mikrokosmos). "Jin"

Quizas esa sea la razón de porqué la noche se tan hermosa, no es por las estrellas sino por nosotros mismos.

***

Agotada me adentré en el ascensor del pequeño edificio donde vivía, en uno de mis hombros colgaba mi cartera y en el otro la bolsa ecológica con las compras que no pude hacer en una semana, estuve comiendo cosas que adquiría en tiendas de conveniencia todo ese tiempo, pero ya había alcanzado mi limite, si seguía tenía la probabilidad de sufrir una indigestión, y no podía pasar por eso.

Las puertas del ascensor se abrieron en el piso donde se encontraba mi pequeño apartamento, iba caminando dando unos leves movimientos por la música que salía de mis audífonos; colocar la música que te gustaba mientras hacías algo cotidiano en tu vida era una buena forma de relajación. Iba mover mi muñeca derecha al compás de la canción, pero un pequeño dolor me alerto que no debía seguir haciendo aquel movimiento, chasqueé mi lengua, tenía que recordar que todavía no debía mover esa parte de la mano. Intente buscar las llaves de mi departamento en mi bolsillo siendo una tarea complicada por las cosas que estaba cargando, pero alguien se me adelanto de forma rápida y tomo mi bolsa ecológica, mis ojos se abrieron como platos ante la sorpresa.

—¿Seokjin-ssi?— quité uno de mis audífonos al ver la persona que estaba al frente mío. Jin me miraba de forma recriminatoria mientras cargaba con una de sus manos la bolsa ecológica.

Lo observe, estaba usando unos pantalones negros holgados y una camisa verde acompañada por una chaqueta de blue jean. Jin estaba parado justo al frente de la puerta de mi departamento, giré a ambos lados rápidamente y lo volví a ver, todavía seguía apareciéndose en mi casa sin importarle mucho que lo vieran.

—No deberías estar cargando con este peso— su mirada se conectó con la mía, tenía unas leves ojeras y su cabello, ahora negro, comenzaba a cubrir de nuevo sus cejas. Rodee mis ojos ante su tono de voz, estaba molesto y por ende me estaba regañando.

—Y tú no deberías aparecerte de un momento para otro en mi casa ¿Y si te ven? Pueden crearse muchos malentendidos ¿sabes?— dije volviendo a observar a los lados, estaba nerviosa.

—No importa, ya estoy acostumbrado a los malentendidos ¿Puedo pasar? Vine a cocinar un rato— Jin hablo de forma inexpresiva señalando unas bolsas que estaban detrás de él, tenían demasiada comida, parecía como si hubiera hecho la compra de un mes.

—Ya estás aquí, así que hazte un lado para que podamos entrar— le di una breve sonrisa mientras lo apartaba para poder abrir la puerta, Jin se movió de forma silenciosa para luego posarse detrás de mí.

Me adentre en la casa seguida por Jin y las cosas, ambos nos quitamos los zapatos y nos pusimos nuestras respectivas pantuflas, siempre tenía un par para él en el caso de que viniera a verme. Avancé a paso apresurado hacia mi habitación, allí quite mi chaqueta junto el suéter de cuello de tortuga que me proporcionaba calor y me coloque una camisa holgada. Escuchaba como Jin dejaba las cosas en la cocina y se procedía a guardarlas, a pesar de que fuera mi cocina, él la tomaba como suya cada vez que venía.

Saqué mi teléfono de mi cartera y vi la hora, bufé, Jin debía estar descansando en estos momentos, sin embargo, estaba en mi casa dispuesto a cocinar nuestra cena. Busqué entre mis conversaciones recientes a la persona con la que había hablado hacía ya un día, no espere mucho y marqué para llamarlo. Uno, dos, tres, cuatro pitidos y descolgó, su voz sonó rasposa del otro lado de la línea, por la hora debía estar durmiendo.

—¿A qué hora llegaron?— hablé de forma suave para no captar la atención de Jin, se podía escuchar todo a través de las paredes.

—Hace dos horas ¿Por qué?— Yoongi respondió soltando una serie de quejidos por la interrupción de su sueño, no lo compadecí, podría seguir durmiendo después de la llamada.